Capítulo 2

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―Buenos días,Bill―Saludó mi padre apenas entré a la cocina―

―¿Qué haces tu aquí todavía?―Pregunté con fastidio mientras tomaba una silla y me sentaba frente a el en la mesa―

―¿Así que ese es tu saludo?―Dijo levantando la cara de su plato para mirarme―

―Bueno, ¿y qué quieres que haga ahora? ¿Que te bese?―Espeté con ironía―

―No,pero, ¿podrías al menos ser educado?―Contestó con molestia y volvió la cara a su plato para luego agregar―:No estoy criando a un animal.

―Yo no estaría tan seguro―Murmuré por lo bajo y de inmediato volvió su vista a mi―

―¿Qué dijistes?―Preguntó frunciendo el ceño―

―Nada―Contesté rapidamente con una sonrisita burlona―Come tu desayuno,para que te largues de una vez.

―No te voy a tolerar una falta mas de respeto Bill―Dijo levantando la voz y dejando las manos a cada lado de su comida―

―No te estoy faltando el respeto―Me defendí con sorna y luego,al ver su cara confundida agregué con diversión―Te estoy recordando que tienes un trabajo y que deberías estar allí,deberias estarme agradeciendo―Asentí mirándolo con gracia,parecía haberse quedado sin palabras,se quedó un rato en silencio hasta que por fin dijo―:

―Ese no es el modo,Bill―Bufé cruzandome de brazos―

―Sea o no sea el modo lo dije,soy un gran hijo―Aunque pretendía decir la ultima frase en broma,me arrepentí de haberla dicho―

―Seguro...―Murmuró mi padre con desdén —

Bajé la vista,sintiendo mi pecho doler de una forma increible,de inmediato me enojé conmigo mismo por ser tan gilipollas,me levanté de la mesa dispuesto a irme yo ya que el no lo hacía.

―¿Ya te vas Bill?―Le escuché a mi padre preguntar cuando salía de la cocina―

―Sí,no pretendo quedarme un minuto más contigo―Contesté con molestia mientras buscaba mí mochila en la sala,mi padre no contestó enseguida, me puse la mochila y caminé hacia la salida―

―¿No vas a desayunar?―Preguntó cuando abría la puerta―

―Que te den―Le respondí,odiaba su preocupación, escuché sus regaños desde la cocina pero no entendí ninguno, al tratar de salir me había tropezado con la tonta niñera,quien traía a mí hermano en sus brazos,la miré con fijeza,al parecer no tenia intenciones de moverse,solo me miraba ¿asustada? Sí,ya lo creo,le intimido a la pobre muchacha―

―¿Te vas a quitar o qué?―Dije con brusquedad,ella enseguida se movió dándome paso,pasé por su lado y empezé a caminar por la acera―

Seamos malos juntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora