Asalto (Sesshome).

Episodio 12

Me levante temprano a preparar una canasta con comida, hiervas y medicina para en viaje también dentro de una tela guarde ropa, los deje apilados en orden en una esquina junto a mis armas, luego comencé a preparar el desayuno.

Kagome: joven maestro....- Lo moví.- es hora de levantarse.

Toya: es muy temprano.........- Se cubrió la cabeza con la manta.

Kagome: lamento despertarlo pero debemos irnos, viajaremos al palacio en unos minutos.

Toya: ¡no quiero, si tu no vas a estar ahí no quiero volver!.- Me miró molesto.

Kagome: me quedaré unos días.

Toya: después me iré contigo.

Kagome: su padre no lo permitira y yo tampoco, fue muy peligroso lo que hizo de venir a buscarme.- Lo regañe.

Toya: soy fuerte....- Bajo su cabeza frunciendo el ceño.

Kagome: y aún es un niño.- No me contestó, solte un suspiró antes de levantarlo con todo y manta dejándolo sentado en mis piernas.- su padre debe estar muy preocupado por usted y debe estar buscándolo, quizás hasta destruyó la ciudad haciéndolo, usted es muy importante para él al igual que sus hermanos.

Me costó trabajo pero pude convencerlo y despues de desayunar deje cerrado antes de comenzar el viaje.

En el transcurso del día fuimos jugando con Kirara y por la noche acampamos en donde le conté historias de aventuras.

Me tomo más tiempo de lo estimado para regresar al palacio, Toya debía descansar y alimentarse bien.

Mayor parte del viaje deje que Kirara lo llevara en su lomo, se cansaba rápido aún que sea un demonio sigue siendo un niño. Cuando pudimos ver el palacio a lo lejos ya era pasado medio día y me agarro de la mano apretandola ligeramente.

Toya: debe estar enojado.

Kagome: claro que no, se sentirá muy feliz cuando lo vea.- Le sonreí.

Continuamos la caminata rodenado la ciudad para no pasar por medio de las personas, a mitad del bosque Toya se detuvo abruptamente y Kirara encrespo su pelaje.

Toya: ahí vienen.

Kagome: Kirara no ataques.- Me miró y se sentó, en escasos segundos una molesta pesadez se presentó en mi pecho al ver al emperador y a sus hijos con algunos guardias imperiales aparecer de la nada.- vaya con su padre.- Fue con ellos y sus hermanos se lo llevaron siendo escoltados por los guardias dejándome a solas con el emperador.- tiene a sus hijos preocupados por usted y el joven maestro me reveló que se siente solo.

Le hice una reverencia y comencé a caminar devuelta, me sentía muy nerviosa y me dolia el pecho con tanto latido frenético golpeando.

—gracias.

Lo escuche hablar por lo que me detuve.

Kagome: es un buen niño, por favor le imploro que no lo castigue por ir a buscarme.

Sesshomaru: te daré una recompensa.

Kagome: no la quiero.- Reanude mis pasos y me detuvo tomándome de la mano.

Sesshomaru: quiero que vuelvas.

Kagome: ¿para seguir dándole más trabajo?.- Aparte mi mano.- a cambiado, antes no me gritaba ni mucho menos me decía que mi presencia le estorbaba, cuándo era un lord no me encerraba ni mucho menos me mandaba a las masmorras por desobedecerle, recuerdo muchas cosas del pasado y ya no lo reconozco, señor Sesshomaru.- Kirara se transformó y la monte.- vámonos.- Se elevó y nos alejamos de él sobre el bosque.

Sesshomaru: espera.- Me giré y estaba volando.- después de tu muerte por culpa de ese híbrido, todo fue distinto, nuestros cachorros se aislaron y él que más sufrió fue Toya.

Kagome: todos alguna vez perdemos a alguien que nos importa, yo perdí a muchos y lo supere.

Sesshomaru: aún son cachorros, necesitan una madre y te quieren a ti.

Kagome: baja.- Kirara fue descendiendo y baje de ella.- que hay de usted, me dejaras volver solo por que sus hijos lo quisieron.

Sesshomaru: no.

Kagome: no, que, si me va a decir que también lo quiere solo por parecerme a su ex esposa, entonces no volveré, no quiero sentirme miserable otra vez.

Sesshomaru: que es lo que quieres.

Kagome: yo lo tengo claro pero la verdadera pregunta, es que es lo que quiere usted de mi.

Sesshomaru: ¿lo que quiero?.- Sonrio de lado.- eres distraída.

Kagome: ¿algún otro defecto que me quiera recordar?.- Me cruce de brazos.

Sesshomaru: insolente, irritante.- Frunci mi ceño molesta.- alborotadora, insolente.- Me acerque a Kirara.- hermosa.- Voltie a mirarlo perpleja.- muy hermosa.

Lo mire en silencio sintiéndome confundida mientras daba ligeros pasos elegantes hacia mi, tomo una de mis manos y con la otra acarició mi mejilla.

Sesshomaru: no es lo mismo sin ti humana.- Solte una carcajada mirando a otro lado apretando mis labios enervante, me hizo mirarlo tomándome de la barbilla y dejó su frente junto a la mía, por primera vez me sentí intimidada y pequeña.- has hecho que este Sesshomaru te necesite a su lado.

Tímidamente le di un ligero beso en la comisura de sus labios y luego sentí su aliento sobre los míos.

Kagome: siento lo mismo..- Musite y me beso con lentitud, sus labios eran suaves y cálidos.

Cuando nos separamos me abrazo y oculte mi rostro en su pecho para no verlo, estaba avergonzada, nerviosa.

Sentí como era levantada seguido por el aire moviendo mi cabello, descubrí mi rostro para mirar y estabamos volando en dirección al palacio.

Sesshomaru: solo te impondré una regla, si vas a salir debes avisarme antes.

Kagome: lo pensaré.- Me miró y le montaré una sonrisa juguetona.- eh intentaré que no se me olvide.- Sonrio de lado.

Cuando llegamos aterrizó en el jardín y me bajo, no tardo mucho tiempo en que sus hijos aparecieran y Toya corrió a abrazarme.

Erina: bienvenida.- Me sonrio haciendo un reverencia con sus hermanos y los imite.

Syusuke: me alegra volver a verla.

Kagome: lo mismo digo, me alegra volver a ver a los jóvenes maestros.- Les sonreí y Kirara salto a mi hombro.- ella es Kirara una vieja amiga de su madre.