OVA 3

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Los sucesos de este OVA ocurren entre la franja horaria del capítulo 7 y 8 (es decir, cuando Kuroo todavía no le ha explicado a ___ el porqué del beso con Sasha)


Me había despertado con ganas de no hacer nada, ya llevaba el último par de días bastante deprimida por lo de Kuroo... y  sinceramente tenía muy pocas ganas de existir, pero con solo ver el mensaje de ese alegre peliplata, mis energías se vieron renovadas.


Era viernes, y había quedado con Bokuto para salir por la tarde, iríamos a tomar algo y nos la pasaríamos charlando. Ese chico se estaba convirtiendo en un gran amigo, jamás me habría esperado tener tanta suerte; no solo me había salvado cuando nadie más parecía estar dispuesto a hacerlo, también había resultado ser un personita maravillosa.

Paseé a Shadow y después me cambié, no quería ir demasiado formal, pero tenía ganas de lucir bonita, así que opté por ponerme unos jeans negros de talla alta y un jersey de punto color granate, que dejaba entrever mi ombligo. Me puse un poco de rimel y algo de colorete, estaba más pálida que de costumbre, supuse que era causa del estrés y la falta de sueño.

Salí de mi casa sobre las 11 y me encaminé en dirección al centro; durante todo el camino me la pasé pensando en si debería o no pedirle consejo a Bokuto acerca de chicos, lo que había pasado con Kuroo me había dejado hecha polvo y ya no estaba segura de nada.

No tardé mucho en ver su cabellera plateada entre la multitud, aparte de su fascinante pelo, también era bastante alto, y tenía una aura de felicidad que era fácil de identificar. El también me vio, y tras saludarme con una mano, se me acercó rápidamente.

-Bokuto-kun- dije sonriendo antes de darle un abrazo, a ambos nos gustaba saludarnos así, al fin y al cabo, yo tengo costumbre europeas, y él era cariñoso.

-__-chan, que guapa- al oírlo no pude evitar sentir mi rostro colorarse -awww kawaii- dijo mientras apretaba mis cachetes

-Bokuto-kuuun- dije a modo de queja mientras hacía un puchero -eso lo hacen los abuelos, sabes?- mis palabras parecieron calar en él, porque de inmediato me soltó

-Hi hi – me reí al notar que él también se había sonrojado, que mono -Oi, hay una cafetería en la que hacen el mejor café de la ciudad, está aquí cerca; vamos?- asentí, y me dejé guiar por él

Todavía no conocía bien la ciudad, y mi sentido de la orientación... bueno, ya todos saben como es. Tokyo en verdad era una ciudad preciosa. Había viajado por muchos sitios del mundo, pero jamás había sentido que mi persona era tan pequeña, la multitud que se podía apreciar allí, era única.

Caminamos un ratito hasta que nos paramos frente a una puerta sobre la cual había un letrero que ponía "CaffeMochi's", mis ojos brillaron al leerlo, y sin más preámbulos nos adentramos en el lugar.

El sitio era pequeño, no había mucha gente, supuse que no sería un local muy conocido, pero si Bokuto decía que era el mejor de la ciudad, yo me fiaba.

Nos sentamos en una mesita al lado de la ventana, el uno frente al otro. Él pidió un capuchino, y yo pedí un expreso con un mochi de chocolate.

-Te gustan los dulces?- me preguntó cuando ya nos habían traído los pedidos.

-H-hi...- mi voz sonó algo deprimida, habíamos estado conversando amenamente hasta el momento, pero esa pregunta me hizo recordar... al primer día en el que Kuroo y yo nos besamos.

-Estás bien?- el peliplata me miró algo preocupado

-H-hi, es solo que eso me ha recordado... a alguien- bebí un poco de mi café antes de proseguir -Oi Bokuto-kun, podría preguntarte algo? Necesito el consejo de un hombre- Lo miré suplicante, y él no tardó en responder.

-Claro ___-chan, qué es?- sus ojos brillaron ante mi petición

-Es que... mira, sabes el chico ese del que te hablé?- le cuestioné

-Hi- pensé unos segundos en lo que le iba a decir

-pues... el otro día íbamos a tener una cita, y cuando llegué al lugar... él se estaba besando con otra- no me atreví a alzar la mirada y volví a beber del líquido frente a mi

-QUE HIZO QUÉ?- su voz se alzó, y todos voltearon a mirarnos -Ohh gomen jeje- le dijo a los demás mientras se rascaba la nuca avergonzado.

-Si... y bueno, di media vuelta y me fui, no somos nada, pero no creo que sea apropiado hacer eso cuando invitas a alguien a salir- Bokuto asintió ante mi observación -Y han pasado unos días ya...  me ha enviado muchos mensajes, pero no me siento con fuerzas de responder... tal vez debería decirle algo, no sé...- Bokuto se apresuró a hablar

-Nono- dijo muy serio -lo que hizo está fatal, puede que debáis hablarlo, si, pero será él el que se tenga que esforzar para que esa conversación tenga lugar -ladeé la cabeza sin comprender -lo que quiero decir es, que lo ignores hasta que él haga algo parte de usar su maldito celular, que te vaya a buscar a tu casa o algo, no sé.- Asentí ante lo que decía mi amigo

-si, tienes toda la razón, gracias Bokuto-kun- le regalé la sonrisa más dulce que tenía, para después seguir conversando acerca de otras cosas.

Esa tarde la pasé de maravilla, Bokuto sin duda sabía como hacer para mejorar mi día sin siquiera darse cuenta de ello, su influencia en mi persona era mucha; aunque no tanta como la de Kuroo.

Gracias a la charla que tuvimos, me sentí más segura con mi decisión, así que le estaba sumamente agradecida.

Al volver a mi casa, dediqué el resto del día a limpiar; había contratado a una limpiadora que venía una vez a la semana, pero a veces me ponía a recoger yo también, me resultaba relajante. En mi cabeza rondaban muchas dudas, pero había una en especial que me estaba carcomiendo por dentro, la situación entre Kenma y yo era... del todo disfuncional.

Lo echaba de menos, demasiado a decir verdad; se que es egoísta, pero quería a mi amigo de nuevo a mi lado. Obviamente no lo podía obligar a ser mi amigo nuevamente, pero tal vez... tal vez si le llamaba y le decía lo que sentía... pfff no sabía que hacer, la vida era una mierda.

De pronto, y sin esperarlo, mi teléfono comenzó a sonar, lo cogí de inmediato, sin siquiera mirar a ver quien era; solo quería dejar de pensar y oír la voz de otro ser humano .

-___-chan?- no podía ser

-KENMA??- Dios me leía los pensamientos y me hacía bromas o qué?

-Hola... te llamaba para saber que tal estás- Su voz sonaba algo cohibida, así que me apresuré a tratar de hablar con normalidad.

-Bien bien, y tú?- dije con el tono más alegre que podía usar, en verdad estaba contenta de volver a oír su voz.

-Bien.. oye... quería saber si... si podemos volver a ser amigos como antes- Abrí los ojos de par en par, estaba a punto de echarme a llorar

-c-claro idiota- tarde, ya estaba llorando -eso no hace falta ni preguntarlo-

Después de eso estuvimos hablando largo y tendido acerca de nuestros días, no le dije nada sobre Kuroo, ya que aparte de que sabía que no era un buen tema para conversar con él, no quería crear malos rollos entre ambos amigos.

-Te he extrañado mucho- dije, ahora un poco más calmada; había llorado un rato

-Y yo a ti...bueno, te parece si hablamos otro día? Ya es tarde- Asentí, pero al darme cuenta de que no me podía ver le respondí por voz.

Después de esa llamada me sentí todavía  más liviana, esperaba que por fin esa mala racha que había tenido, se estuviese acabando de una jodida vez.

Kuroo's Heart (Kurooxlectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora