Capítulo 13

221 8 1
                                    

Nada más verlo asomarse por la puerta, con sus cachetes sonrojados y sus dorados ojitos entrecerrados, lo abracé dulcemente, siendo correspondida casi al segundo. Aspiré su aroma mientras hundía mi rostro en su pecho, buscando el resguardo de su calor.

-Alguien me ha echado de menos, eh- Susurró con la voz ronca a la vez que me apretaba contra su pecho, yo solo asentí sin despegarme ni un milímetro -¿Estás bien?- Repetí el gesto, aunque al alzar la vista y mirarlo a los ojos, supe que no estaba convencido con mi respuesta -Vamos adentro- Me tomó de la mano para que lo siguiese hasta el salón.

Nos sentamos en el sofá, y al percatarme de lo cansado que parecía y la calidez que desprendía me preocupé y de inmediato posé mi mano en su frente; Tetsurou cerró los ojos, relajándose de inmediato al sentir mi mano fría.

-¡Tetsu, tienes fiebre!- El azabache chasqueó la lengua mientras que yo tironeaba de él hasta su habitación -No puedes salir de la cama, te pondrás peor- Lo regañé a la vez que lo tapaba con las mantas. Testurou me contemplaba embelesado, y yo refunfuñaba por su falta de responsabilidad -...es en serio, me deberías haber dicho que viniese. De todas formas hoy no había nada que hacer en clases- Hice un puchero antes de seguir hablando -Me habría gustado cuidarte, idiota- Dije acariciando su rostro.

-¿Sabes? Tengo unas horribles ganas de besarte, pero te contagiaría- Habló mientras tomaba mi mano y la besaba -Toma esto como un incentivo, gatita- Su voz sonaba sugerente y esa media sonrisa que adornaba su rostro terminó por afectarme.

Su aliento golpeaba la piel de mi mano, consiguiendo que un escalofrío recorriese mi espalda y sintiese como mis pelos se erizaban. Aparté la vista, con los cachetes irremediablemente colorados y la respiración entrecortada. Kuroo Sonreía despreocupado, divertido ante la situación.

-¿Te has tomado las pastillas al menos?- Pregunté para cambiar de tema cuanto antes.

-Si ___, no te preocupes- Susurró, acariciando mi brazo -Solo necesito que... estés a mi lado ¿Si?- Sus mejillas se tornaron color carmín, y estaba casi segura que no era por la fiebre. No pude evitar reír levemente ante su petición.

-Lo que tú quieras, gatito- Y nada más decir eso sentí como me tomaba de la cintura y me recostaba a su lado, yo no me opuse y me acomodé entre sus brazos. Me sentía segura con él resguardándome en un abrazo.

-Vamos a dormir- Susurró Tetsurou cariñosamente mientras yo asentía, sintiendo como mis párpados se hacían cada vez más pesados.

El timbre de la casa sonaba intermitentemente, mientras yo refunfuñaba al no querer despertar. Tetsurou me apretó más entre sus brazos, él tampoco parecía querer moverse en lo absoluto, pero finalmente ambos nos levantamos.

-¿Quién demonios será?- Se quejó el azabache mientras se dirigía a la entrada, yo me senté en el sofá a esperar -¿Kenma qué..?- Al oír ese nombre un escalofrío recorrió mi cuerpo, no le había dicho a Kuroo lo que sucedió en el instituto.

-¿Está ___-chan contigo?- Su voz se notaba agitada, así que miré en dirección a la entrada,  a la espera de que apareciese. Y en efecto no tardó -¡___ NO ME ASUSTES ASÍ!- Yo entorné el rostro sin comprender.

-¿Asustarte? ¿Qué dices Kenma?- Pregunté confundida a la vez que Tetsurou se adentraba en la estancia, mirando al teñido sin comprender, pero pareció percatarse de un pequeño, gran detalle.

-¡¿Qué demonios te ha pasado Kenma?!- Se sobresaltó el azabache al ver el ojo morado de su amigo -¡¿Te has peleado?!- Kenma me miró, y después miró a Kuroo para repetir la acción un par de veces más. Hasta que se me quedó mirando, y se golpeó el rostro con la palma de la mano.

Kuroo's Heart (Kurooxlectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora