Tú eres mi destino

[Capítulo 23]

Narro Yo

La chica jadeaba. No paraba de correr. No quería perder tiempo. La humana se veía vacía sin ella a su lado. Requiere algo de tiene para llegar ahí pero, en caso de que Luz pueda llegar a “salvar” a Amity, tendrían una conversación muy seria.

Se escondía tras los arbustos o árboles que habitaban cerca, no quería ser vista.

Luz se metió sigilosamente en otro arbusto por, trigésima cuarta vez, para no ser capturada y haber fallado. Tanto tiempo en aquel arbusto, hizo que a esta individua le entrara un apetito insaciable. Una voz, procedente de un hombre, comenzaba a acercarse más y más al arbusto donde se situaba la humana.

Steve: Si Sr, si. La Srta Blight ya llegó hace unos minutos, me contó uno de los guardias. Si, si se encuentra en su sala... Si okey, yo le diré el trabajo que tiene que realizar... Esta bien Sr, ahora me voy hacia el castillo.- “Un guardia de Belos” Pensó la humana. “Esta es mi oportunidad”.

La latina se rasguñó parte de su ropa. Y, aunque le diera algo de asco, cogió algo de barro y lo “arreglo” por todo su moreno rostro. Salió de los arbustos como si nada y comenzó a dirigir sus paso hacia Steve.

Luz: S-señor... Ayúdeme, por favor..

Steve se limitó a mirar a aquella baja y quebrada voz.

Steve:- Guarda su pergamino- ¿En qué le puedo ayudar?

Luz: M-me expulsaron de mi hogar, mi familia no me quiere y no tengo a donde ir...

No se notaba pero, Steve mantenía una mirada “firme” y algo desconfiada.

Steve: ¿Como se llama señorita?

Luz: L-luz Noceda...

Steve: Claro- De su atuendo logra conseguir un cuadernillo pequeña de color violeta y una “pluma” con un ojo de decoración- Luz Noceda- Lo apunta- Venga, le llevaré al Castillo Del Emperador Belos hasta que logremos encontrar un residencia para usted, ¿De acuerdo?

Luz: S-si... Muchas gracias.

Steve se acercó a Luz y la tomó con cuidado del brazo, para no dañarla y comenzaron una linda y tranquila caminata.

Por el camino, Steve se atrevía a hacer preguntas, las cuáles Noceda no podía evadir...

Steve: Y, ¿Como dijo que se llamaba?- Luz se sobresalta por la pregunta- Jejeje, perdóneme, se me olvidó- Manifestó el varón, llevándose una mano a su nuca en, expresión de vergüenza-.

Luz tragó saliva. Sus nervios la impedían pensar; realmente se encontraba perdida.

Una de sus neuronas, conectó con su pequeño cerebro, haciendo que a Luz se le ocurriera algo.

Luz: Me llamo Luz Noceda.

Steve: Ah... Espere, usted se llama igual que la humana que se reveló contra nuestro Emperador... Jajaja qué ironía, por un momen-

Luz: ¿Quisiste decir “momento”- Preguntó la humana, mientras observaba el cuerpo de Steve en el suelo inconscientemente- Bueno, muchas gracias Steve pero, creo que de aquí hasta el castillo- El cual estaba literalmente delante suya- No habrá más problemas- Terminó la frase con una sonrisa tentadora para cualquier ser vivo-.

Unos minutos después~

La muchacha vagaba por los anchos y silenciosos pasillos; mientras buscaba la supuesta habitación de la que habló Steve antes.