Entre tacones y motocicletas [EN PAUSA]

Capítulo 7: solo pienso en verla.

Ethan "Ignis" Holt:

Desperté después de tener un muy buen sueño con mi dulzura. De repente entra Biker, sin golpear la puerta, un día de estos le partiré la cara.

—Hey Ignis, ya está el desa...–Se detiene abruptamente.—Con que tuviste muy buenos sueños ¿Eh? Maldito pervertido.–Dice moviendo las cejas sugerentemente.

—¿Puedes cerrar la boca por un puto momento? Y además, toca la puerta antes de entrar, esta no es tu habitación como para entrar cada vez que se te de la gana. Y para tu información, si sueño con ella o no, es mi puto problema ya que es MI mujer ¿Entendido?–Digo con enojo.

—Ay pícaro, ya sabía yo que soñabas con ella. Esa tienda de campaña en tus pantalones me lo confirma. Y con lo demás, solo me gusta molestarte, no me castigues. A que soy tu hermano favorito. Ahora ¡A desayunar!

—Maldito idiota.–Murmuro para mí mismo mientras camino hacia la ducha.

Salgo luego de darme un baño y camino hacia mi clóset, tomo mis jeans, una remera lisa color blanca y mis botas. Mientras voy a la cocina me cruzo con Arrow y Mech, por lo que vamos juntos a desayunar. Llegamos y nos sentamos en la isleta (la cual construyó el Prez solo porque Mary dijo que siempre había querido una) y nos sentamos en las sillas que hay arrimadas en ésta.

—Buenos días niños.–Nos dice Mary mientras nos sonríe, siempre nos llama de esa forma aunque sólo sea unos 2 o 3 años mayor que nosotros.

—Buenos días Mary.–Decimos al unísono, aunque obviamente no puede faltar el humor de Biker.

—Mary, ya deja de decirnos niños. Somos unos hombres ¿Sabes?–Habla Biker refunfuñando como niño pequeño.

—Tu actitud no me dice lo mismo, Wade.–Sonríe Mary mientras lo dice.

—Prefiero ser un niño a ser igual de amargados que éstos. –Habla mientras nos mira.–Por cierto, ¿Sabes que Ignis anda todo loquito por la castaña? Hoy tuvo un muy buen sueño con ella.–Maldito bastardo, le borraré esa sonrisa de un puñetazo.

—Calláte Wade, es de mi amiga de quién estás hablando.–Le da una cachetada en la nuca, por lo que reímos todos.–E Ignis, ¿Ya hablaste con ella? ¿Cómo te fue? ¿Te contestó? Dime, dime.

Al ver la emoción de Mary no puedo retener la sonrisa que se forma en mi rostro.
—Sí Mary, hablé con ella. Y me contestó, hablamos poco ya que se tenía que ir a trabajar y yo tenía que dormir, después de la redada de anoche estaba muy cansado.

—Hey, ¿Ya dirán su nombre? Esto de hablar en código no me gusta, ¿O sólo prefieren que la llamemos castaña?–Dice Biker.

—Wade, ya cállate. ¿No ves que los adultos estamos hablando? Por cierto, se llama Alexia. E Ignis, ¡Que bieeeeeeeeeen! ¡Por fin pude encontrarle un buen chico!

—Espera, ¿Que? Como que por fin le encontraste un buen chico, ¿A caso la dejaste salir en citas a ciegas?–Pregunto con obvia rabia en mi voz.

—No no, traté. Pero ella es muy estricta en ese sentido, su ex novio era un hijo de puta. La engañó en su propia cara al tener sexo con la llamada amiga de la infancia de Alexia, ella misma los encontró en el departamento en el que vivían juntos, los dos en la misma cama en la que dormían. Los interrumpió, le pateó las pelotas y le quebró la nariz de un puñetazo, en cambio a la chica le pegó en el estómago y también le quebró la nariz, la perra se lo merecía. Mi mejor amiga es una boxeadora profesional.–Mary sonríe al recordar la situación.–De ahí viene toda la desconfianza que tiene hacia los hombres, no todos, porque los tolera e incluso con algunos es amable. Pero a los que le coquetean así como así, los manda a volar, pero sé que tú eres el indicado. Eres mucho más hermoso, paciente, valiente y tolerante que éstos de aquí. –Apunta a mis hermanos que están desayunando, y éstos le fruncen el ceño.

—Gracias Mary, no sabía nada de eso. Trataré de hacerla lo más feliz que pueda, lo prometo. Por cierto, ¿Y Bliss?–No la he visto desde que nos fuimos de ahí anoche. Me preocupa que Biker haya sido el mismo idiota con ella.

—Está durmiendo, anoche luego de que éste animal la trajera como una bolsa de papas, la pusimos en una habitación que era neutral. Charlamos un poco y le expliqué la situación, por lo que cuando se calmó se durmió. Eran las 9 de la mañana aproximadamente.–Habla Mary un poco pensativa, luego sonríe. –Nunca tuve hijos, así que la siento como una hija, la cuidare como una. Así que si uno de ustedes, solo uno, se atreve a jugar con ella, les corto el pene ¿Entendieron? –Mis hermanos asintieron un poco asustados, a veces Mary daba un poco de miedo.– Bien, Ignis, cuídala también. Serás como su hermano mayor.

—Bien Mary, ante cualquier cosa que pase, me avisas. Voy a pasar a buscar a mi dulzura. Hasta luego hermanos.

—Hasta luego, Ignis. –Dicen a la vez.

Camino hasta afuera de la casa club y saco mis llaves, me coloco mi chaleco de vp y mis lentes. Pongo la llave en la cerradura para dar arranque, me subo y bombeo con la pierna hasta que se escucha el ruido del motor, es como música para mis oídos. Me volví motociclista por esto, por el rugido del motor y la adrenalina que corre por tus venas cada vez que se está sobre la carretera, y por otras cosas más que no diré a nadie más que a mi dulzura, sólo si ella quiere. Voy llegando a la agencia y se que falta poco para que salga, le pregunté sobre su horario a Mary y me informó sobre cuándo entraba y salía. Me estaciono en frente de la agencia, bajo de mi motocicleta y espero a que salga, la gente que pasa por ahí me miran con gran apreciación. Luego de unos 8 minutos sale mi mujer, acompañada de otro hombre que parece amigable por la manera en la que hablan, él me mira y veo que se relame los labios pero no le presto atención porque ella levanta la mirada y se queda clavada en mis ojos, sus ojos esmeralda me hipnotizan. Llega hasta mi lado y sólo me sonríe, el hombre a su lado me sigue mirando como un trozo de carne, por lo que frunzo el ceño. Ella se da cuenta y habla.

—Daniel, él es Ethan, el chico del que te hablé. –Dijo mirando al tal Daniel.

—¡Tú estás loca! Es hermoso, si no lo quieres yo lo quiero. –Y ahí me percaté de que era gay, lo que me hizo mirarlo con un poco de temor, al no saber de qué era capaz  de hacer él.

—Daniel, por Dios, ya basta.–Dijo avergonzada. Dios, que malditamente hermosa se veía cuando estaba avergonzada.

—Disculpame, soy Daniel Bolleigh. Agente de la señorita aquí presente, Alexia Louvier, una de las modelos más solicitada de la agencia. –Y levantó la mano para estrecharla. Lo cual hice.

—Ethan Holt, dueño de un taller de autos muy famoso en la zona por las pinturas personalizadas y los mejores mecánicos, también tengo tiendas de tatuaje, e invierto en empresas grandes. –Dije a lo que ambos quedaron asombrados.

—Wow. –Dijo Alexia, a lo que sonreí.

—Ahora discúlpanos Daniel, tengo que llevar a esta dulzura a su casa. –Dije mientras le pasaba el casco a Alexia.

—Okey, gracias Ignis, pero no lo creo convenien... –Y la paré en seco.

—Te llevo, vamos. Daniel, ¿Me harías el favor de llevar luego el auto de Alexia?–Le pregunté, si no tendría que llamar a uno de mis hermanos para que se lo lleve a su casa.

—Si, claro, no hay problema. Pásenla bien. –Se va, luego voltea y le guiña un ojo a Alexia.

—¿Vamos? –Pregunto.

—Está bien. –dice mientras se coloca el casco y se sube con cuidado en la moto. –Agradece a Mary el que me haya puesto unas zapatillas antes de salir. –Yo solo sonreí. Solo pienso en verla, la quiero detrás de mí, en mi motocicleta. Siempre. Y con ese pensamiento nos pusimos en marcha hacia su casa.

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Buenas mi gente beia💙 ¿Como están?
Acá les dejo otro capítulo en esta semana, porque me estaba aburriendo así que terminé escribiendo esto de volada. Espero y les guste😝
No se olviden que si les gusta la historia, agreguenla a su biblioteca, comenten 💬 y denle a la estrellita🌟 Que si leyeron los capítulos anteriores, ya saben por qué lo digo💁🏻‍♀️
Bueno gente, nos vemos pronto. Que tengan linda semana✨
Besos y abrazos desde Argentina 🇦🇷❤️
Bye, Ale.