¡Haikyuu en Hogwarts!

2.

Contrario a lo que cualquiera pensaría, el que estuvo interesado primero fue el Ravenclaw: Kiyoomi Sakusa. Desde el primer año estuvo indirectamente relacionado con el Slytherin Atsumu Miya debido a que compartía habitación con su hermano gemelo, Osamu. 

Así que desde que llego a Hogwarts, Sakusa, se debió acostumbrar a la personalidad energética del mayor de los Miyas, a verlo discutir con Suna o Futakuchi en los pasillos del castillo. Se acostumbró a encontrarlo en su dormitorio discutiendo con Osamu porque no le ayudaba con su tarea de pociones,  a los comentarios sarcásticos que lanzaba en medio de las clases cuando comenzaban a ponerse aburridas, a su manera irritante de hablar debido a su marcado acento, a como se jactaba de ser el mejor jugando quidditch y se acostumbró a siempre estar observándolo, ya sea en la cena, en los pasillos o en las clases que compartían las águilas con las serpientes, siempre estaba esperando el siguiente movimiento de Atsumu Miya.

Él es un Ravenclaw, y haciendo honor a su casa no le llevo mucho descubrir sus sentimientos. Pudo haber sido desde mucho antes pero para Sakusa el momento en que se dio cuenta que estaba enamorado del mayor de los gemelos fue cuando en tercer año después de que le dieran la calificación de sus exámenes y un inusual A = Aceptable apareció en el pergamino que le entregaron, su orgullo estaba por los suelos, se había quedado hasta muy tarde estudiando herbología y aun así no tuvo la calificación que esperaba. 

Esa mañana su enojo fue constante, cualquiera que viera su rostro enfadado se daría cuenta de la pésima idea que sería acercase a él.

Pero cuando llego la hora del almuerzo y escucho la risa de Atsumu desde la mesa de su casa cualquier indicio de su mal humor desapareció, se sintió en paz, aliviado y agradecido por el momento y la causa de la escandalosa risa del Slytherin. 

Ya era tarde para preguntarse porque él de todas las personas, no había tiempo para cuestionamientos. Cuando Sakusa se dio cuenta de sus sentimientos ya había caído al fondo del pozo, y no había manera de salir de ahí especialmente si Atsumu lo había empujado dentro.

Pero había un problema que preocupaba a Sakusa, y no, no era su manera fría y reservada de ser, no su extraña fobia por los gérmenes y su manía de limpiar sus cosas al menos 3 veces, no su incapacidad de tener contacto físico con alguien más, no los rumores de que Atsumu rechazaba chicos y chicas por deporte y no parecía interesado en una relación.

A esas circunstancias Sakusa podía encontrarles fácilmente una solución,  el verdadero inconveniente era que a pesar de que Miya Atsumu era reconocido por ser revoltoso y molestamente sociable no parecía estar interesado en meterse con el Ravenclaw. Sakusa era tan común y aburrido que había pasado completamente inadvertido aun cuando Atsumu pasaba metido en su habitación hablando con su hermano varias veces a la semana. Y eso dolió.

Pero Sakusa no deja nada a medias y menos cuando se trata de Miya Atsumu. Su plan comenzó poco a poco, avanzando tan lentamente que competía con la velocidad de un caracol. Pero avanzaba y eso era lo importante. 

Empezó acercándose a Osamu, y también a otros Ravenclaws como Akaashi, Kenma, Kita y hasta Hirugami,no quería ser sospechoso. Le preguntaba a Osamu algo acerca de alguna materia, iban juntos al comedor para el desayuno y la cena, e incluso hacían trabajos escolares en pareja. Cuando se relacionaron al punto de sentarse juntos durante las clases, Sakusa pasó a la siguiente fase.

Comenzó a desafiar poco a poco a Atsumu, burlándose de sus malas bromas, callando sus comentarios sarcásticos sobre las clases, pero no solo a él sino a cualquiera que lo hiciera porque prefería morir a que alguien comenzara a sospechar. 

Se esforzaba todavía más en las materias que compartía con Slytherin para impresionarlo, cuando los gemelos discutían sobre algún tema insignificante siempre le daba la razón a Osamu aunque tuviera sus dudas sobre si su punto era erróneo o correcto; y como la cereza del pastel se unió al equipo de quidditch de Ravenclaw.