Jugar con fuego | Peter Parker

3.

Ya pasó poco más de una semana desde la llegada de "la chica nueva". No pasó demasiado, parece haberse integrado bien.

Ahora mismo estábamos en el almuerzo, Need y las chicas hablaban entusiasmadamente mientras yo miraba la mochila de los vengadores que tenía el chico de adelante.

— eran geniales

Miré hacia mi lado donde ______ había tomado lugar.

— si...lo eran

— lo admirabas mucho

— ¿cómo?

— a ironman, se nota, pareces muy triste cuando lo recuerdas

— si, digo...era un gran héroe

— podría jurar que solo me falta una pieza para terminar de saber que sucede contigo

— ¿otra vez con eso? ¿nunca te rindes?

— a veces, esta vez no

— ¿por qué yo? debe haber otro chico triste dando vueltas por el colegio

— ¿entonces acabas de admitir que estás triste?

Solte un risa negando con la cabeza y sentí su mano sobre la mía.

— déjame ayudarte

La miré confundido, no necesitaba ayuda en nada.

— ¿a que?

— no lo sé, a que te sientas mejor. Sea lo que sea que te esté pasando dejame estar a tu lado

Tragué saliva nervioso acomodándome en mi asiento. Pensé unos segundos y coloqué mi otra mano sobre la suya.

— no hay nada en que ayudar ¿está bien?

Hizo una mala cara y apartó la mirada.

— no te enojes — reí.

— no me enojo, solo que me gustaría verte mejor — arquee una ceja — no creas que Need no me cuenta de la situación o que antes te veías más animado

Mi cuerpo se tensó.

— y me está volviendo loca que no me diga la razón de porque cambiaste pero tiene razón ya que no puede decirlo por ti — suspiró — seré la chica más insoportable para ti pero solo quiero verte mejor y conocer al Peter que todos extrañan

No caigas Peter, es todo una manipulación, no caigas.

— y...como harías eso

Caí.

Cerré los ojos con fuerza y levanté la vista para verla, tenía una sonrisa dibujada en el rostro.

— simple, no hay unos pasos que seguir solo... — pensó unos segundos — te veo hoy en tu casa y, déjame estar cerca. Need me dio la dirección

Se levantó de la mesa y desapareció por las grandes puertas dejándome perdido en la conversación...espera, ¿mi casa?

(...)

Estaba mirando el techo de mi habitación esperando a _______ que había tomado la iniciativa de invitarse sola.

Mis ojos pesaban un poco, si no llegaba pronto terminaría por dormirme.

Mi cabeza se fue hacia un lado quedando dormido completamente, escuche un leve ruido y lo ignore hasta que algo en la cama se hundió.

— realmente eres tierno — se oyó en un susurro — aunque no estoy aquí para eso