Extra 6: Eltanin

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Advertencia: Lactancia masculina.
¿Creo que es lo único? XD

⸺ ¡Papá! ¡Mamá! ¡El bebé está llorando!⸺ Lucy tocó su puerta y Lucius solo pudo pensar que habían olvidado poner el hechizo de privacidad para que su hija mayor no se despertara

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⸺ ¡Papá! ¡Mamá! ¡El bebé está llorando!⸺ Lucy tocó su puerta y Lucius solo pudo pensar que habían olvidado poner el hechizo de privacidad para que su hija mayor no se despertara. Por supuesto que sabía que el bebé estaba llorando ¡Lo tenía en brazos!
Eltanin había nacido hacía tres semanas, exactamente unos días después de la luna llena. El pequeño bebé que tenía una pelusa rubia como cabello tenía muy buenos pulmones.
Remus se levantó de la cama restregando sus ojos antes de abrir la puerta y murmurarle algo a la pequeña antes de acompañarla de nuevo a su habitación y Lucius no pudo evitar pensar que le tocaba lo fácil.
Su hijo pequeño se calló solo uno segundos para tomar aire y luego gritar.
El patriarca sentía que su cabeza dolía demasiado, sabía que la única razón por la que el lugar no era un desastre era porque los elfos habían hecho un buen trabajo. Pero Eltanin había pasado de un niño que dormía mucho a uno que lloraba a todas horas en los últimos nueve días.
Las ojeras estaban estropeando su rostro, el llanto incesante del bebé seguramente era más molesto para Remus quien tenía mejor oído pero no podían simplemente silenciar a su bebé con magia ¡Aunque había pensado seriamente en hacerlo!
No estaba seguro de haber dormido más de tres horas seguidas en la última semana.
⸺Vamos, amor… ⸺ Eltanin sollozó sin aceptar la mamadera, negándose a tomar y solo tratando de alejarlo de sí. Lucius suspiró y acarició su cabecita dejando la mamadera en la mesa de luz, sentándose al borde de la cama y atrayendo al pequeño a su pecho, el bebé movió su manito aferrándose a su ropa.
Al niño no le gustaba ninguna fórmula. Ni una sola.  Había gritado y llorado y pataleado, sin probar más que un sorbo de cada una. El medimago había dicho que era un bebé sano, que tal vez el sabor no le gustaba y habían tratado de encontrar una pero nada.
La solución más fácil sería extraer leche y dejarla en una mamadera como “banco de reserva”, y eso sería realmente fácil si no fuera por las grietas.
Amamantar nunca había sido cómodo para Lucius, primero con Lucy había una mezcla de vergüenza y pudor, pero había logrado acostumbrarse. Pero con Eltanin dolía, dolía demasiado.
Esperar a que tuviera la suficiente hambre como para aceptar la formula había sido toda una pelea de voluntades que el bebé había ganado. El niño estaba dispuesto a desnutrirse antes de tomar algo que no le gustara y tenía un padre demasiado suave que apenas se pondría firme una media hora, maldita sea, él no podía luchar contra el bebé y Remus a la vez.
Se rindió y lo dejó tomar, tratando de no hacer muecas al sentir el dolor.
Estaba bien, estaba bien. Él había querido tener otro bebé.
Había sido su maldita-grandiosa idea ¡Ahora debía lidiar con las consecuencias!
Por suerte Eltanin no tenía mucha hambre y lo soltó muy pronto, solo apegando su cabecita a su pecho y cerrando sus ojitos, dando pequeños hipidos de llanto. Lucius se acostó lentamente manteniéndolo contra su pecho y estuvo a punto de dormirse cuando el movimiento lo despertó, miró hacia Lucy quien gateaba en la cama para llegar a su lado. Remus se acostó del otro lado de la niña más dormido que despierto, sin verse mejor que él.
⸺ ¿No podemos devolver al bebé?⸺ Murmuró Lucy de pronto y Lucius no pudo evitar reír. Se arrepintió enseguida porque despertó al bebé que estaba contra su pecho y, de nuevo, el llanto volvió a escucharse.
Remus se puso la almohada sobre la cabeza y Lucius pensó que estaba tratando de asfixiarse.
Pero estaba bien, la noche anterior Remus se había hecho cargo.

No te metas con el lobo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora