No te metas con el lobo.

¿Qué puede pasar ahora?

Lamento cualquier error, no pude corregirlo tanto como me gustaría :'D

Lucius suspiró mientras acomodaba de nuevo los papeles, la pequeña estaba sobre una manta en el suelo jugando con sus juguetes, balbuceando y mostrándole a la elfina los nuevos que había conseguido. El patriarca sonrió ligeramente y se inclinó para acariciar el cabello de su pequeña quien le sonrió antes de seguir jugando.
Remus había tenido que volver al trabajo presencial por primera vez desde el incidente, así que pronto deberían empezar a acomodar sus horarios. A él no le molestaba trabajar desde su oficina en casa teniendo a la pequeña jugando siendo vigilada por los elfos, solo debía tener cuidado con sus horarios de comida y sueño, al igual que hacer algunas pausas para jugar con ella.
Y también debían acomodarse a los horarios de las sesiones con la sanadora.
⸺ ¡Ma! ⸺ Lucy lo miró sonriendo antes de señalar a la ventana, donde una lechuza los miraba a través del vidrio antes de inclinarse y golpear un poco. Lucius frunció ligeramente el ceño y se levantó alzando a su pequeña, abriendo la ventana y agarrando la carta rápidamente, la lechuza lo miró ofendida pero se quedó quieta esperando su premio. ⸺ ¡Ma! ⸺ Lucy gorgoteo feliz estirándose hacia el pájaro.
⸺No, amor no. ⸺ Besó la manito de la pequeña mientras se alejaba ⸺ Twinky, alimenta al pájaro, necesito escribir la respuesta. ⸺ Mandó dejando la carta sobre el escritorio antes de sostener a su pequeña con ambos brazos, besando su mejilla. Lucy dejó escapar una risita y se apoyó contra él antes de removerse, estirando sus manitos a sus juguetes abandonados. ⸺Supongo que cuando estoy trabajando no soy tan interesante ¿No? ⸺
⸺ ¡No! ⸺ Sonrió la pequeña, haciendo uso de la palabra que había aprendido.
⸺Que cruel. ⸺ Pero no pudo evitar reír ligeramente antes de bajarla con cuidado, sentándola cerca de sus juguetes, acomodando las almohadas a su alrededor para que estuviera más cómoda. ⸺Quédate ahí. ⸺
Tal vez si debería llevarla a ver a sus amigos del orfanato más veces, recordaba que cuando Draco empezó a socializar habían ido a gala tras gala dejando a los bebés al cuidado de los elfos, conociéndose, mientras ellos charlaban de los contratos o de cosas sin importancia. Siempre había sido bueno para darle varias miradas a su bebé de vez en cuando sin parecer un padre sobreprotector, dejando que Cissy se mantuviera con las demás damas conversando más cerca de los bebés.
Pero Lucy no tenía demasiadas opciones, la mayoría de las personas habían tratado de salir adelante luego de la guerra y eso quería decir que no había tiempos para niños. Los amigos de Remus seguramente tenían algunos niños, pero Lucy era la mayor de todas formas y no se entretendría con bebés que solo durmieran.
Apretó los labios ligeramente pensando en que podría hacer, ella necesitaba tener conexiones y aprender a poder convivir con otros niños. Tal vez cuando fuera más grande podría inscribirla en algunos cursos de verano para que pudiera convivir con niños un par de horas y luego volver a casa, pero para eso ello tendría que tener al menos cinco años.
Y Hogwarts a los once.
¿Era tan necesario que fuera a Hogwarts?
¿Por qué nadie pensaba que mandar a los niños a un internado no era buena idea?
¿Por qué tendrían que confiar a sus hijos a una escuela por tanto tiempo, confiando en las cartas y que los regalos lleguen? ¿Confiando que sus hijos volverán salvos y sanos en las vacaciones?
Cuando Draco entró había tenido a Severus como profesor y jefe de casa, se había vuelto parte del consejo escolar, había podido pedir que sacrificaran a un animal por lastimar a su hijo. Sin ninguna de esas posiciones ¿Qué pasaría con Lucy? Ya no tenía ningún poder en la escuela y los niños podían ser crueles.
La risa de su bebé lo hizo salir de sus pensamientos, miró a la pequeña quien sonreía agitando su cubo para que brillara, mirando hacia la lechuza que aún esperaba la respuesta.
Lucius negó con la cabeza abriendo el sobre, luego en el futuro se preocuparía, no estaba solo en eso de todas formas.
⸺Oh. ⸺ Frunció el ceño con molestia, entre sus nuevos negocios muggles había puesto a un par de squib como intermediarios, habían sido bastante útiles. Hasta ese momento no había tenido ningún problema.
“Ellos quieren organizar un par de reuniones con quien esté a cargo para terminar de firmar los contratos, no con intermediarios. Están tratando de evitar estafas.”
Era la frase que más le molestaba de la carta, había creído que podía mantenerse al margen. Podía pedirle a Narcissa que fuera por él pero eso la pondría como la jefa en todo, confiaba en ella plenamente pero no podía hacer que cargara con sus negocios.
Agarró una hoja y la tinta antes de empezar a escribir, primero presionándola demasiado por la furia pero fue calmándose al paso de las oraciones, aceptando a regañadientes y poniendo fechas continuas para ambas reuniones, teniendo cuidado con el horario que podía manejar.
Tendría que decirle a Remus.
Cerró el sobre y se lo pasó a la lechuza quien salió volando enseguida.
Muggles.
Tendría que encontrarse con varios de ellos y hacer negocios cara a cara. Era una posibilidad pero no esperaba que lo tomara con la guardia tan baja. Habían ido a restaurantes con la bebé y Remus, pero había cosas que aún eran desconocidas para él y era perfectamente normales para los muggles.
Cerró la ventana y volvió a alzar a la pequeña quien dio un pequeño gritito, soltando su cubo y mirándolo molesta por haberla hecho perder su juguete.
⸺ ¡Ma! ⸺ Se quejó removiéndose.
⸺Tranquila. ⸺ Besó su frente y recogió el cubo poniéndolo en sus manitos antes de sentarse aun con ella en brazos. Lucy sonrió contenta apoyándose contra él mientras balbuceaba un poco, moviendo su cubo para que cambiara de color. ⸺Ah, pequeña. Casi me había olvidado que tenía responsabilidades fuera de ti. ⸺ apoyó sus labios sobre los rizos rubios de la pequeña quien dio una risita, llevándose a la boca el cubo.