Destino

Capítulo 29: Solo en la mente.

Pv: Sarada.

Debo de poder hacer algo. Yo sé que desde aquí debo de poder hacer algo. Y de repente, estaba en casa. ¿Por qué estoy aquí?

-¿Hola?- No hay respuesta.

-¿De verdad creías que ibas a poder vencerme, a mí? – De nuevo Inoichi.

-Es mi cuerpo, después de todo.- Le contesté yo.

-Pero ahora es mi mente.- Dijo el, pero no me iba ganar tan fácilmente.

-Mi conciencia. Oye, ¿Cómo haces para estar aquí pero a la vez seguir moviéndonos?- Le pregunté, a lo que él se quedó en blanco.

-Pues.... Ahora estamos inconscientes.- Lo sabía. No se pueden hacer las dos cosas al mismo tiempo.

-¡Sí!- Exclamé.

-¿Por qué celebras?- Él de verdad parecía sorprendido.

-Porque así tú no lastimarás a nadie.- Y él desapareció.

-¡No puedes ir a otro lado! ¿O sí?- Creo que no. Digo estamos inconscientes. ¿A dónde irá? No estoy en casa. Ahora estoy... estoy en dónde estaba la última vez en esa mesa rara, o silla que parece de dentista.

-¡Déjame salir!- Pero nadie contestó, estoy sola.

-Eres un estorbo, ¿Por qué me fijaría en mi hermanita menor?- Boruto... ¿Por qué dices eso? No es cierto, no es justo.

-Eso no es cierto, tú dijiste-

-Pudimos soñar cosas diferentes.- Debo salir de aquí...

-No, no es cierto, yo, debo creer que...- No puede ser verdad. Es solo un producto de mi imaginación... Pero qué tal si es verdad.... No puedo creer eso... No quiero llorar....

-Llora, llora como un bebé vamos hazlo.- ¿Papá?

-¿Papá? No tú no por favor...- No quiero ver mis mayores temores en mi cara, por favor no, por favor...

-¿Sabes por qué nunca estuve contigo cuando eras una niña? Porque no quería estar ahí, no te quiero, no te quise y no te querré. Jamás.- Papá...

-No dices eso en serio.... Yo, yo no puedo creer eso.- Cállate, a lo mejor si me tapo los oídos se irán... No voy a resistir, es como si estuviera en el infierno de mi mente. ¡No quiero estar aquí! ¡Alguien sáqueme de mi cabeza! Por favor.... Se los suplico.

-A ver, quítate Sasuke, es mi turno.- ¿Mamá? Ya basta...

Pv: Mitsuki

El sol, demonios debí haber cerrado la ventana. La puerta. ¿Quién será?

-¿Sí?-

-Mitsuki, perdón por levantarte pero ya regresaron. De hecho regresaron en la madrugada, pero pensé que probablemente estarías dormido así que esperé hasta ahora y, sí. Regresaron y tienen a Boruto y Sarada.- Debo de ir en este mismo instante.

-Vamos.-

-Espera Mitsuki. Debo advertirte, Sakura-san, y Sasuke-san no se veían bien al regresar. Ni hablar del séptimo.- ¿Qué?

-¿Qué pasó?-

-No lo sé... Pero creo que por ser del equipo siete te darán un privilegio para entrar. Y conoces a Sakura-san y al séptimo, entonces creo que te dirán. Pero no puedo asegurarte nada Mitsuki, tienes que saber eso.- Sumire de verdad se veía preocupada, no puede ser nada bueno.

-Sí. Está bien, no me haré muchas ilusiones. Gracias Sumire, de verdad que haces todo esto un más fácil. De verdad Sumire, muchas gracias.- Le sonreí. Y le di un breve beso, ella se sorprendió un poco, pero me dejó y me fui.