✨🧨 ⋯ ━━━ 𝗚𝗢𝗟𝗗 𝗧𝗥𝗔𝗜𝗟.
❛ En donde Charlotte Heller y
Tony Stark se encargan de ser
dúo más caótico antes visto. ❜
Creamos a nuestros propios demonios. Cuida tus pal...
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█▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀█ CAPÍTULO TREINTA Y UNO 🗯️GRACIAS, CAP. █▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄▄█
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Se había encontrado con todos los semáforos en verde camino a la mansión, mentalizándose para otra catástrofe emocional en su vida si Tony continuaba actuando como desgraciado. No tenía nada de malo esperar lo peor en cada momento a esas alturas de su vida, pero estaba claramente consciente de que eso no era lo más sano. En su mente, también hacía una rápida lista de pros y contras de estar en la vida de Stark. Fundamentando su preparación, eran más cosas negativas que positivas en aquella rápida lista mental.
Y los pros no eran cosas demasiado buenas. Si bien, Tony había tenido detalles con ella, era lo mínimo que podía hacer. No podía estar encantada con eso, no era extraordinario, era lindo, pero no excepcional. Así que, por cortos periodos, consideró la idea de dar la vuelta y regresar a casa. Sin embargo, finalmente decidió brindarle el beneficio de la duda, por última vez.
Charlotte se llevó una sorpresa que casi la hace retroceder al mirar la casa, gravemente destruida, o por lo menos una parte de ella. Claro que algo había pasado, tal vez el mismo día de la fiesta que nadie parecía estar preocupado por los alcances del traje que Tony estaba usando completamente ebrio.
Dejando su automóvil donde siempre, la rubia se baja de dicho, caminando con pasos lentos y desganados hacia la entrada, algo temerosa de que de repente algo se cayera sobre su cabeza. Estando dentro, miró a su alrededor; cristales, polvo, la luz del sol entrando. También estaba sucio, pero prefirió continuar hacia el camino que siempre tomaba. Se apiadó de aquel que tendría que encargarse de la limpieza, que seguramente, no sería Stark.
Bajando los escalones en silencio, escuchó ruidos que la desconcertaron. Al mirar por la puerta cristal, miró a Tony golpeando la pared con un enorme martillo. Como primer pensamiento, creyó que desahogar su furia golpeando una pared era terapéutico, pero la que estaba molesta, era ella.
