XXXII.Cicatrices

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2 meses después.

De pie junto a una tienda de vestidos, es donde me encuentro con mamá, tratando de elegir uno para el baile de la preparatoria al que me ha invitado Aron hace tres días. Siendo honesta, no comprendo qué planes tiene, ya que me aseguró que a pesar de no haber asistido a ninguno, le parecen tontos, y a mí también, pese a que ninguno jamás ha ido, me ha invitado y yo he aceptado, qué locura, ¿no? Sólo que Aron me ha prometido que no será un baile como el que suelen hacer, como los que tal vez conozca, y no sé qué está planeando con exactitud.

—¿Qué color prefieres? —inquiere mamá a mi lado.

Frunzo las comisuras de mis labios y pienso en qué color deseo, porque incluso eso es bastante difícil.

—¿Rojo?

—En ese caso, vamos, Jane, a buscar un hermoso vestido para ti —me dice con una enorme sonrisa en los labios, haciéndome entrar a la tienda.

(Soundtrack sugerido: The Enemy-Andrew Belle) 

Uno a uno, me pruebo los vestidos que mamá elige, a pesar de no ser rojos, ya que, de acuerdo a su experiencia, es mejor probar todos los colores si una está indecisa. Aunque, no hay uno en particular que me guste, puesto que o están demasiado cortos, o con demasiado escote, o simplemente parecen de abuelita, de acuerdo a mamá.

Tienda tras tienda vamos intentando buscar el adecuado, lo cual, al cabo de varias horas, resulta un poco agotador, pero, por otro lado, cuando mamá intenta hacer bromas, todo se vuelve mucho mejor. Es la primera vez que realmente me divierte comprar algo con ella, que no pienso que debo fingir que no me importa estar con ella, y eso realmente se siente mejor que bien.

Es cierto que no puedo hacer bromas, no soy buena para ello, aunque intento hacerlo un par de veces, al menos para hacerla reír, y a pesar de que me dice que sí soy divertida, más bien creo que sólo lo dice porque me quiere.

Cuando incluso ella menciona que ya está agotada, terminamos sentadas en un sofá de una de las tiendas, con varios vestidos en los probadores.

—No recordaba cómo era comprar vestidos para un baile —admite exhalando —, pero sí que es divertido y agotador.

—Ni que lo digas —digo arqueando una ceja.

La observo cuando se queda en silencio, su rostro cambia drásticamente.

—¿Sucede algo? Si deseas que nos vayamos porque estás muy cansada, podemos irnos —le sugiero.

—Estoy embarazada. —La frase retumba en mi cabeza y a pesar de que en un primer momento no sé qué decir o hacer, rápidamente se me dibuja una enorme sonrisa en los labios, es entonces cuando la miro con ternura, mis brazos se levantan y me arrojo a ella para abrazarla.

—Felicidades —digo casi en sollozos. Al momento de separarnos, ella toma mi rostro entre sus manos y comienza a llorar.

—Vas a tener un hermano, Jane —asegura, y pienso en esa palabra: hermano. Algo que siempre deseé y que a la vez no quería cuando era niña, porque sabía que si otra persona llegaba a este mundo con la Bruja y el Ogro, tendría el mismo destino que yo, así que no deseaba eso.

—Voy a tener un hermano, o hermana —sonrío. De pronto, me levanto y la tomo de la mano. —Tienes que decírselo a George, tenemos que... ¿Qué estamos haciendo comprando vestidos? Deberíamos comprar ropa para el bebé y todo lo que necesitará. Podemos comprar cuentos y yo... Yo le leeré cuando nazca o desde ahora y...

Fall In Love ✓TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora