Destined to love en español [Ruta Okita Soji]

Capítulo 1 (1 - 5)

El pétalo de cerezo que estaba en mi mano fue movido y llevado por el viento. Mientras el are revolvía ligeramente mi pelo, mi corazón dio un vuelco.

(¿En este momento alguien ha dicho mi nombre?)

Me di la vuelta para ver quién podría ser.

(¿Qué?)

Había varios hombres, de los cuales no reconocía a ninguno, corriendo hacia mi entre las sombras.

(¿Quiénes son estos tipos?)

Comencé a retroceder nerviosa, pero era demasiado tarde para huir o esconderme.

(Creo que puedo estar en problemas.)

Mientras se acercaban, me tense, lista para defenderme si fuera necesario. Los hombres patinaron hasta detenerse cuando notaron mi presencia, jadeando como si estuvieran sin aliento.

Hombre 1: ¿Qué está haciendo aquí una mujer?

Hombre 2: Si se mete en nuestro camino, simplemente mátala. ¡Ahora vamos!

Ayame: ¡¿Qué?!

Un escalofrío de miedo me recorrió el cuerpo, ante el gruñido sediento de sangre del hombre.

(¿Cómo puedo salir de esta?)

Mi corazón iba como loco y un sudor frio recorría mi espalda, mientras mi mente se quedaba en blanco por el miedo.

???: ¿Oh? ¿Ya no teneis ganas de huir?

Una voz divertida, pero amenazante, surgió de detrás de los hombres. Escucharla, hizo que recobrara la cordura.

(¡Creo que reconozco esa voz!)

Mire alrededor de los hombres, justo cuando el viento alborotaba el pelo de cierta persona.

Okita: Hola chicos.

Okita estaba de pie a varios pasos detrás de los hombres. A pesar de la oscuridad, pude distinguir una ligera sonrisa en su cara.

Okita: Creo que es hora de acabar con esto.

Con la sonrisa aun en su cara, desenfundo la espada que tenía a su lado. Me puse rígida ante el sonido del metal al ser sacado de la vaina.

(¡Uh-ho!)

Los otros hombres parecían nerviosos, pero también sacaron sus espadas. La tensión en el ambiente, me puso la piel de gallina.

(¿No me digas que van a pelear justo aquí?)

Aprete los puños a cada lado, tratando de parecer lo más pequeña posible. Fue en ese momento cuando Okita, por fin se dio cuenta de mi presencia.

Okita: ¿Hm? ¿Ayame?

El tomo tranquilo de Okita parecía fuera de lugar mientras me miraba con curiosidad.