Capítulo 13

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Narra Hope

Despertar dos días seguidos en los brazos de la mujer más hermosa de este mundo parecía un milagro, veía cada respiración que daba, como arrugaba su nariz y como se mordía los labios sin que ella obviamente se diera cuenta.

Saque su brazo lentamente y me levante a hacerle el desayuno, exprimí jugo de naranja, hice algunas tostadas e hice unos huevos. También le serví café con leche y subí la bandeja hasta el cuarto, cuando llegue ella ya estaba sentada en la cama restregándose los ojos – Buenos días Bonita – Josie me quedo mirando y sonrió.

- No tenías porqué molestarte Hope – coloqué la bandeja sobre sus piernas.

- Claro que tengo porqué – besé su frente – es el último dia que estas acá en mi casa, en mi cuarto – acaricie su rostro – en mi cama – ella me sonrió – así que quería hacerte algo así como un regalo.

- Gracias – dijo mirándome a los ojos.

- ¿Por qué?

- Por dejarme despertar a tu lado estos días – se acercó ligeramente y me besó mis labios – extrañaré no dormir a tu lado hoy sabes.

- Bueno... - esta vez me acerqué yo a ella – siempre puedes ir a verme a la biblioteca y nos damos una pequeña siesta – Josie sonrió y dejó la bandeja debajo de la cama, yo solo sonreí - ¿Qué pasa? – pregunté mirando sus labios.

- No quiero aguantar hasta el lunes – Josie me agarró del cuello de mi polera y me lanzó sobre su cuerpo, al sentir el contacto de nuestra piel sonreí, ella estaba helada y yo también – se siente bien tenerte así – sentí mis mejillas ruborizarse.

- No quiero hacer nada de lo que te arrepientas.

- No me arrepentiré nunca de nada si eso tiene que ver contigo – sus manos se fueron a los costados de mi cara y la acariciaba – eres la chica más perfecta que conozco – yo solo podía mirarla – me gusta tu manera tan fácil de ver el mundo, me gusta como enfrentas cada cosa que te pasa en la vida, me gusta todo Hope... y como te dije anoche – Josie comenzó a acomodarse debajo de mi cuerpo de tal forma que una de mis piernas quedo entre las suyas y sus manos se aferraron a mi piel descubierta en la espalda – también soy ser humano y sería una idiota si no asumiera que no me pasa absolutamente nada cuando te tengo en una cama o frente de mí con tu ropa sexy.

- Mi ropa no es sexy – hubo silencio.

- Si eres así de sexy con ropa y con pijama ¿Cómo serás desnuda? – entonces una atmosfera de erótismo nos embriago por completo y sentí como mi corazón se aceleraba de tal forma que se me hacía imposible controlarme - ¿Por qué tu corazón late tan rápido? – sus ojos marrones no paraban de mirarme.

- Por ti, siempre ha sido por ti.

Acerque mis labios a los suyos lentamente hasta que por fin pude tener ese ansiado contacto, sus labios a diferencia de su cuerpo estaban tibios y semi abiertos, sus labios me daban una bienvenida que anhelaba desde el dia en que la conocí y la cual he hecho mía en estos días. Cuando nuestros labios reconocieron la textura del otro ella abrió lentamente sus labios haciendo que mi sangre se me fuera a la cabeza y se me hiciera imposible pensar en algo más que no fuera a la preciada persona que tenía debajo de mi cuerpo. Josie se dejó llevar por mis caricias experimentadas a tal punto que le fue imposible seguir besándome, deje que tomara aire y me di cuenta de que sus mejillas eran de un color carmesí y no era precisamente porque estuviera sonrojada, todo su cuerpo ardía.

Las manos de Josie se fueron a la parte trasera de mi polera de mi pijama y comenzó a subirla lentamente mientras que me concentraba en un sector de su cuello, sus jadeos eran música para mis oídos y sus caricias me hacían temblar entre sus brazos – Hope – dijo en mi oído y con un tono ronco y lleno de placer. Elevé mi cuerpo para que ella pudiera sacarme la parte superior del pijama y sus ojos se abrieron de par en par al darse cuenta que no llevaba ropa interior – Woow – fue lo único que salió de su boca y para mi basto como una señal. Envestí sus caderas con algo de rudeza y ella dejo escapar un leve sonido desde su interior, besé nuevamente sus labios y mis manos comenzaron a tener vida propia. Se fueron hacía el final de la tela de la parte superior de su pijama y comenzaron a subirlo lentamente, anhelaba sentir el contacto de su piel con la mía, así, como de igual manera sabía hasta donde iba a llegar porque mi plan no era tener relaciones con ella acá solo quería que se sintiera cómoda conmigo estando en este ambiente erótico que claramente ella había empezado.

Amor entre libros (Hosie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora