[ R E D : mafia game ] Kunyang;Jaeyong;Luwoo

[ ♤ 56 ♤ ]

[ ♤ convivencia ♤ ]

La conviencia entre ellos era buena pero tenía un límite, cuando Jungwoo no quería estar con Yukhei, este se iba de la habitación y volvía horas después con algún dulce para que el mayor se calmara.
Y cuando Yukhei necesitaba concentrarse en rastrear a Jackson, entonces Jungwoo se sentaba en el suelo frente a la ventana y leía algún libro que Junhyung le traía para distraerlo. Sí, ambos estaban compartiendo una habitación porque Yukhei temía que hiciera otra locura.

Ahora Yukhei estaba en otra habitación, con fotos en sus manos, viendo el rostro de Tuan en todas las imágenes y sintiendo rabia en su interior. Hacía varios días sus hombres habían logrado localizar a Mark y lo seguían a todos lados para saber dónde se ocultaba Jackson y en dónde tenían a Wooyun.
Sus hombres seguían a Tuan día y noche, a todos lados y sin perderlo de vista. En una de las fotos, Wooyun estaba en sus brazos y parecía estar haciendo un berrinche, se le veía una marca rojiza en la mejilla y sus ojitos estaban llenos de lágrimas.

Yukhei sintió rabia, apretó los puños y dejó las fotos sobre la cama, miró al rubio junto a él y este le hizo una reverencia antes de hablar. ㅡSeñor, nuestros investigadores encontraron una casa que Mark heredó de sus padres, está a las afueras de Seúl y creemos que Jackson se esconde ahí.

Yukhei asintió pensativo, quería ir tras Jackson y matarlo con sus propias manos, pero primero debía recuperar a Wooyun y asegurarse de que estubiera a salvo.

ㅡPor lo que hemos visto tras seguirlo todo este tiempo, Tuan tiene al niño viviendo con él en un hotel de mala muerte cerca del centro. Usted sólo dé la orden y nosotros iremos, señor.ㅡ volvió a hablar Junhyung.

Algo le decía que aún era demasiado pronto para actuar, Tuan era demasiado inteligente y si llegaba a sospechar de algo no dudaría en matar al niño o irse muy lejos con él y avisar a Jackson. Yukhei no quería eso, había hecho una promesa con Jungwoo y la cumpliría a toda costa, se lo debía, le debía muchas cosas y se las pagaría una por una.

Suspiró frustrado. ㅡTodavía no, quiero que estén seguros de que Jackson está en esa casa, mientras tanto no haremos nada que pueda asustarlos.

Todos asintieron ante la orden y él decidió salir de la habitación para dirigirse a donde estaba Jungwoo. Tocó la puerta dos veces y entró despacio.

ㅡ¿Noticias nuevas?ㅡ escuchó la pregunta del castaño y quiso no tener que responderla, pero mentir no era una opción cuando lo mínimo que podía darle era sinceridad.

Cerró la puerta tras de sí y avanzó hasta quedar sentado en la cama, Jungwoo lo miraba desde el suelo junto a la ventana, con un libro en sus manos y sólo vistiendo una pijama que le quedaba enorme.

Hermoso, pensó.

A veces, cuando Jungwoo se sumergía en sus pensamientos mientras cenaban en el restaurante del hotel, Yukhei no podía evitar mirar su belleza y deleitarse con ella.
No era ciego y tampoco heterosexual, Yukhei sabía apreciar toda la belleza que Jungwoo tenía, desde la punta de sus pies hasta el último cabello en su cabeza.

No estaba enamorado, estaba plenamente consiente de ello, pero decir que Jungwoo no le gustaba era una completa y vil mentira.
Tenía como pasatiempo pensar en los labios del castaño e imaginar que lo besaba mientras le acariciaba los cabellos.