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[ ♤ un momento en casa pt2 ♤ ]

Taeyong había estado de acuerdo con ayudar a Doyoung, no harían más que hurgar un poco en las cosas de Yoonoh y luego hacer como si nada.

Juego de niños, pensó él mientras revisaba el ordenador del pelirosa.

No encontró mucho. Tenía fotos y vídeos de personas que Taeyong no conocía, pero suponía que todos eran aliados o enemigos de MadDog.

Seguirle el juego a Doyoung no iba a ser gratis, si le ayudaba a encontrar algo se encargaría de cobrar el favorsito al fiscal Kim cuando lo necesitase.

Por supuesto no esperó que Yoonoh llegara tan temprano, y tampoco esperó que estuviera tan enojado.
Ni siquiera había conseguido una mierda y el hombre ya se ponía así, además lo había ignorado.

Erróneamente, Taeyong pensó que lo dejaría pasar, que tenía a Yoonoh encaprichado y comiendo de sus manos. Tarde se dio cuenta que jugar con la paciencia del pelirosa era lo más estúpido y peligroso que pudo haber hecho en su vida.

Cuando Doyoung abandonó la habitación sin rechistar, como un cobarde diría Taeyong, Yoonoh lo empujó hasta que sus piernas chocaron con el borde de la cama.

Taeyong era orgulloso, así que no bajó la mirada en ningún momento y se mantuvo serio aún cuando Yoonoh parecía a punto de golpearlo.

El primero en hablar fue Yoonoh, con un tono tan profundo que las piernas de Taeyong temblaron, y no sabía si era por miedo o por alguna otra cosa.

ㅡ¿Es así como quieres que sean las cosas?ㅡ dijo mientras pasaba su brazo izquierdo por la delgada cintura de Taeyong, quien jadeó sorprendido al sentir las manos frías de Yoonoh.

No sabía a lo que se refería, tampoco iba a preguntar. Si Yoonoh quería jugar al malo Taeyong también lo haría y no respondería una mierda.

La diferencia de altura no era tanta, pero Taeyong se sentía cada vez más pequeño entre el brazo musculoso de Yoonoh.

ㅡ¿Ahora no hablas?ㅡ bien, estaba comenzando a asustarse. Normalmente, Yoonoh agregaría un bebé al final de cada frase, pero no lo estaba haciendo y eso significaba que Taeyong la había cagado en grande.

ㅡYa deja de jugar, quiero irme.ㅡ dijo Taeyong tratando de librarse del agarre del pelirosa, este no protestó y lo soltó.

Taeyong iba a caminar hasta la puerta para poder salir, pero la voz de Yoonoh lo hizo detenerse.

ㅡEres igual a tu madre, tomando más de lo que deben.ㅡ la piel de Tae se erizo, sintió un escalofríos recorrerle por toda la espina dorsal.

ㅡNo hables de mi ma-

ㅡNo he terminado de hablar, Taeyong.ㅡ interrumpió Yoonoh.

Percibió a Yoonoh caminar detrás de él, rondando como un predador a su presa. Y por primera vez, Taeyong tuvo miedo de Yoonoh.

ㅡTienes muchas cosas que me recuerdan a Naeyong, principalmente la forma en la que ambos abusan de la mano que les da de comer.

Taeyong quería decir que podía meterse esa mano por donde no le daba el sol, que no lo necesitaba y que podía besar su pequeño trasero e irse a la mierda. Quería decir tantas cosas, pero el simple recuerdo de su madre lo paralizó, y sólo se quedó callado, escuchando como Yoonoh quería humillarlo.

[ R E D : mafia game ] Kunyang;Jaeyong;Luwoo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora