Extra 1

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CASSIAN

Escucho que alguien llora en las gradas, no he podido dormir, así que salí a correr por el campo.

— ¿Hola? —mi voz se escucha como un susurro, me acerco en las gradas y miro a Inna, sus rodillas están en su pecho, me acerco a ella y levanta la cabeza.
    
—Pensé que estaba solo —dice con voz rasposa por el llanto.
    
— ¿Estás bien? —me siento a su lado.
    
—Me cansé de cómo me trata Bruno, pero no puedo dejarlo, no tengo la fuerza necesaria para hacer —vuelve a llorar, la abrazo y ella llora en mi pecho.
    
—Encontrarás las fuerzas, créeme —ella se aparta y me mira a los ojos.

Poco a poco se acerca y nuestros labios se unen, la separo y ella agacha la cabeza.

—Esto no está bien, Inna.
    
—Lo siento, Cassian —susurra y se va dejándome solo en el campo.

Mañana pienso pedirle a Ebba que sea mi novia, con la ayuda de Adler y algunos amigos, hicimos una sorpresa para ella, tengo anotado un discurso que le voy a decir, espero que nunca se entere de ese beso.

Después de pedirle que fuera mi novia, los dos nos dedicamos a nosotros, un sábado nos fuimos a un hotel, renté una habitación y la decoré con rosas rojas, esta será la primera vez de los dos y la quiero ser especial para ella y que nunca lo olvide.

***

—Inna —jadeo cuando me hundo en ella, el sexo con ella es otra cosa, sabe como moverse como complace a un hombre
    
—Más rápido —pide.
    
—Nos van a descubrir —jadeo intentando moverme más rápido sin hacer ruido.
    
—No importa —muerde mi labio y pierdo el control.

Estamos en las gradas, es nuestro punto para encontrarnos y tener sexo, es de noche.

—Oh mierda —gime Inna y los dos nos venimos al mismo tiempo.

Pienso en Ebba, sé que está mal, pero no la quiero lastimar más, no sé cómo decirle, miro a Inna que se acomoda su uniforme, ella es una diosa para el sexo, Ebba es una diosa en el amor.

Inna es mi placer infernal del sexo y Ebba mi placer infernal del amor.

EBBA

¿Cómo superar un corazón roto? Cada quien tiene su manera pero la mía es demostrar quién soy realmente, hacer cambios de look, pintarme las puntas del cabello de color morado, tipo una bandera para Inna y Cassian, usar ropa atrevida, no tanto, pero es un cambio con mi antigua ropa, maquillarme más y lucir como una reina.

Esa es mi manera, las chicas y el chico me apoyan haciendo que les agradezca su apoyo, hemos visto a Cassian con Inna muy juntos y una que otra ocasión cuando vamos a las gradas ellos están en sus cosas de pareja.

Thunder, feel the thunder, lightning then the thunder —susurro peligrosamente cuando me veo al espejo, estoy muy orgullosa de mostrar como soy en realidad.
    
—Serás la chica que rompe cuellos porque todos van a querer verte —dice Vanessa y nos reímos.
    
—Como dice Sean Paul crickneck —digo divertida y salimos del dormitorio.
    
—La cabeza siempre en alto y no dejes que nadie te la baje —me dice segura Vanessa caminando con la cabeza en alto y con una sonrisa que demuestra lo poderosa que es.

Hemos notado miradas de los chicos hacia nosotras, algunos nos silban y otros nos dicen piropos.

—Definitivamente necesito salir contigo —dice Dustin a mi lado, no me había dado cuenta de que estaba ahí.
    
—Perderás el tiempo, cariño —le digo y se ríe.
    
—Sería un placer perderlo contigo —dice y de la nada me hace girar y une nuestros labios, escuchamos gritos de asombro, paso mis manos por el cabello del chico y lo acerco más a mí, él pone sus manos en mi espalda baja.
    
— ¡Qué sexy, Ebba! —una chica nos grita haciendo que terminara nuestro beso, giramos para ver a la chica.

Inna fue la que nos gritó está con Cassian, él me mira con el ceño fruncido un poco molesto por ver que besé a Dustin, hace un recurrido por mi cuerpo y sonrío de lado, su brazo está rodeando los hombros de Inna.

—Yo digo que sí merece perder el tiempo —dice Dustin y rio.
    
—No te emociones, nene —guiño un ojo y él me vuelve a besar pero ya con un toque de lujuria, le muerdo un poco el labio y nos alejamos.
    
—Nos veremos por ahí, Ebba —se aleja.
    
—Eso fue tan sexy, nena.
    
—La valentía —digo con una sonrisa y miro hacia la pareja que todavía no deja de vernos—. Feel the thunder, lightning then the thunder —susurro y doy una vuelta sobre mis talones haciendo que mi falda tome vuelo, escucho que muchos chicos silban y demasiados piropos.
    
—Estás que ardes, beibi —se ríe mi amiga y seguimos nuestro camino después de ver que Inna le da un golpe a Cassian por ver mis bragas negras de encaje.

Todo lo que te perdiste, bebé.

Placeres InfernalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora