Isabella

CAP 51

Isa

-Isa es hora del baño- dice papi en el umbral de la puerta.

Ignoré su llamado y subí más mi cobija envolviendo me, estábamos en temporada fría así que imaginaran mis ganas de bañarme aún cuando es agua calientita, no pueden culparme.

- arriba princesa o se nos hará tarde- vuelve a insistir.

Segundo llamado así que a levantarnos, quito un poco las cobijas, me siento y levanto mis brazos hacia papi y que me saque de la cuna.

- Buenos días hermosa- saluda antes de bajar los seguros de la cuna

-buenos días papi- susurro antes de bostezar

-primero debemos quitar el pañal - comenta e inmediatamente vuelvo a recostarme para que lo haga- al parecer alguien no quería levantarse- de burla para luego darme un beso en la mejilla y tomarme en brazos para dirigirnos al baño.

-estaba muy cómoda papi y está haciendo frío- me justifico

- lo sé nena pero sabes que no podemos llegar tarde, además, el agua está calientita.

- lo sé papi pero no quiero salir- suelto un suspiro y papi me sienta sobre el enorme lavamanos y me ayuda con la ropa, al parecer ya tenía todo listo en la bañera así que entro y me entrega la esfera y la sumerjo observo como el agua va cambiando de color y se creando mucha espuma.

Papi aprovecha que estoy en la bañera para terminar de alistarse, hoy por primera vez estábamos solo nosotros dos, daddy debió irse hace rato ya que hoy tenía reuniones importantes por lo que debía mantener todo en orden y que no se presentaran problemas, así que papi era el único responsable presente.

Cuando vuelve ya he terminado así que me ayuda a salir y me envuelve con la toalla llevándome hacia el cambiador, me muestra dos conjuntos el primero es un vestido rosa palo y mallas negras, botas café y un gran abrigo del mismo color del vestido, era un conjunto muy lindo pero íbamos a la empresa de papi y obviamente yo iba aprovechar el tiempo para dormir en el sillón, así que decidí el segundo conjunto que consistía en un pantalón, sudadera celeste y tenis.

- el celeste papi, por favor

- sé lo que tienes en mente nena.- Huy me descubrió, al parecer soy muy predecible aunque voy a tratar de negarlo.

- ¿Qué cosa, papi?- digo con la voz más inocente posible hasta inclinó la cabeza a un lado.

- irás directamente a dormir en cuanto lleguemos a la oficina y este es más cómodo que el otro conjunto- responde serio, ups me descubrió

- eso no es verdad-

- recuerda que mentir amerita castigo ¿quieres uno? - se cruza de brazos y yo sólo niego.

-claro que no papi - me apresuro a responder, no quiero castigos aunque haya recibido solo uno desde que los conocí no quería volver a tenerlos. No poder tomar mis juguitos no es bonito y si se preguntan por qué fue pues... se me salió un palabrita y daddy estaba detrás mío, así que durante todo ese día no pude probar ni una gotita de jugo. Lo sé, una catástrofe.

-bien- suelto y él sonríe

- Bien, mientras sea en las horas asignadas o en ciertas circunstancias, no habrá problemas

-¿puedo dormir al llegar a la oficina? - pregunto ya que en si, no es hora de dormir

-solo porque el clima está fantástico para dormir- concede y festejo

- Ahora terminemos de vestirte y a desayunar.

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Me despido de papi al entrar en el ascensor, marco el último piso  donde seguro daddy debe estar esperándome.