Atrapado por tu Amor

Capítulo 17: Amor

DISCLAIMER: Los personajes no me pertenecen pero la historia sí, por lo que NO AUTORIZO para que esta se modifique o publique en otro lugar.

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Capítulo 17: "Amor"

Ya era de noche, Toutossai les había sacado ventaja desde hacía rato, a ambos no les importaba cruzar solos el bosque, a paso tenue del caballo, estaban demasiados ensimismados en el otro, en lo que había sucedido, en que ahora comenzaba una vida nueva para ambos.

Inuyasha deslizó su mejilla contra la de ella y aspiró el dulce aroma de sus cabellos. Era suave, tibia, tierna... y pensar que él detestaba a las inexpertas y ahora tenía una muchacha así a su lado... ansiaba poder mimarla, tocarla, enseñarle......

- Hueles... tan delicioso...

Su aliento cálido y profundo chocó en su cuello, Kagome entrecerró los ojos y sintió escalofríos en todo su cuerpo.

- Y tu cabello... es... tan suave...- Agregó, esta vez deslizando su mejilla contra sus cabellos, Kagome sonrió pero a pesar de todo estaba nerviosa y algo cohibida. Todo era nuevo para ella. Carraspeó incómoda y se puso tensa, alejando su cuerpo del suyo. El hombre frunció el ceño y la observó desde atrás un instante.

Kagome miraba el frente con seriedad, estaba tensa, él lo notaba por su postura rígida, respiraba apenas, aunque intentaba claramente controlarse no podía, tenía las mejillas muy rojas y sus manos que reposaban en su regazo temblaban notoriamente. Inuyasha sonrió y se acercó a su oído.

- No tienes nada que temer...- Susurró.

La joven bajó la vista, avergonzada, era la primera vez que se encontraba tan cerca de un hombre, de esa forma. Sólo ahora era consciente de eso... tenía temor... mucho. Pensó que el silencio hacía más turbador el momento, así que decidió que debía comenzar una conversación trivial.

- ¿Sueles andar por este bosque?- Elevó la voz para que sonara más normal, aun así Inuyasha notó el temblor de sus palabras. Sonrió y pensó que le seguiría el juego sólo para que se tranquilizara y tomara confianza.

- No mucho, cuando era pequeño me escondía de Sesshomaru cerca del arroyo... ahh, un día te llevaré a ese lugar, te gustará.

Kagome miró al cielo justo en donde unas ramas se separaban y dejaban ver un hermoso cielo estrellado.

- ¿Y no te perdiste alguna vez? este lugar es muy grande.

Él rió con suavidad, parecía haber recordado algo gracioso, Kagome ladeó un poco el rostro para ver su expresión.

- Una vez... eres una adivina...- Agregó, frunciendo el ceño-... estuve toda una noche perdido... pero estaba a salvo, ahora las cosas son diferentes... donde el arroyo se vuelve más torrentoso y es un río, cruzando el río, cerca de aquellas colinas del este... ahora habitan lobos... a veces bajan hasta acá, así que nunca te atrevas a cruzar el río ¿entendido?

- Jamás lo haría- Respondió ella con una sonrisa, pero sintiendo un leve escalofrío al pensar en aquellas criaturas tan malignas y salvajes.

- Perfecto- Él se inclinó más a ella y rosó sus labios junto a su oído- Me gusta que me hagas caso en todo...

Kagome volvió a reír.

- Yo no dije que te iba a hacer caso en todo.

Inuyasha arrugó la frente.

- ¿No?