|19|

924 96 6
                                    

Corría con la máxima velocidad que podía alcanzar, ella era bastante ligera, por lo que su titán también lo era en cierta parte, siendo el que más velocidad alcanzaba de todos, seguido del titán hembra.

-Muy bien, descansa por hoy Apath!-la voz del Capitán le hizo frenar hasta pararse.

-¿Cuando voy a tener al menos un día libre? ¿O al menos podría entrenar por la tarde en lugar de por la mañana?- preguntó recuperando aire.

-La guerra se aproxima, es complicado, pero veré que puedo hacer-.

Estaba bastante fastidiada e irritable, había pasado toda una semana entrenando todas las mañanas sin descanso, y lo que mas le fastidiaba era que Reiner hacía lo mismo pero en las tardes, pudiendo solo verse en la cocina, y algunas veces él no podía ir porque le obligaban a comer en el campo temprano para poder empezar a entrenar. Muchas veces pensó en decirle de que durmiera con ella, pero últimamente había varios soldados que rondaban por allí en la noche, complicando por completo que el chico pudiera colarse a su habitación.

Debido a que los días pasaban y la tensión por la guerra aumentaba, entrenaban más duramente y el cuartel estaba más reforzado de soldados.

-Te he visto quejarte de todo, pero nunca de un entrenamiento- Magath le daba una botella de agua para que recuperara energías tras abandonar su titán.

-Es que, me quitan todo mi tiempo-.

-Tienes tardes libres, no se de qué tiempo hablas-.

Se quedaron unos segundos en silencio.

-Braun entrena por las tardes, ¿es eso verdad? Entiendo que quieras verle pero ahora mismo la guerra es más importante que eso, y te recuerdo que es delito lo que estáis haciendo- la rubia lo miró con tristeza, sabía que tenía razón, pero le costaba tener que resignarse.

-Lo siento Theo, no volveré a protestar, yo me entregué a Marley y mi misión es llevarle a la victoria, y ¿¡que estamos haciendo?! Osea no hay nada entre nosotros...lo que pasó por el acohol ni siquiera lo recuerdo- habló nerviosa y avergonzada.

Magath solo soltó un suspiro.

-Escucha, te voy a conseguir un día libre para ti y para él, pero necesito algo a cambio, os estoy dando demasiado, no me puedo creer lo que llego a hacer por ti niña, si se enteran me ejecutan...- se llevó una mano a la cara.

-Lo que sea Capitán- el brillo volvió a sus ojos en unos segundos, hizo una postura de saludo típica de los soldados.

-Avisaré a los superiores de un descanso para vosotros a cambio de que cocinéis para los soldados una semana entera-.

-Lo acepto por completo- dijo ilusionada y agitando sus manos.

-Espero no arrepentirme de esto-.

-Eres el mejor Theo, nunca podría compensarte todo lo que has hecho por mi, eres como un padre para mi- Magath se sorprendió por las palabras y se le escapó una pequeña sonrisa.

-Anda, ve a buscar a Reiner, te estará esperando para comer, espero que no sobrepaséis los límites- se retiró del lugar.

El Capitán no se equivocaba, pues cuando llegó a la cocina él estaba allí, con la mesa preparada y la comida ya hecha, dejando sorprendida a la platina.

-¿Me has hecho la comida?- corrió a abrazarlo.

-Si, he venido un poco antes- la levantó del suelo para dejar un pequeño beso en los labios de ella, raramente lo hacían por miedo a que alguien los viera, se sentían oprimidos todo el tiempo por las estúpidas leyes.

Flor de Acero | *Reiner Braun* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora