↳ ੈ‧₊ CAPÍTULO 11

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Kokichi Ouma se encontró a sí mismo volviendo a su vieja rutina sin mucha dificultad.

Ir al comedor en el que todos los otros estudiantes definitivos se encontraban por las mañanas, encontrar a alguien con quien salir por las tardes, tomar su medicación y asistir a sus sesiones de terapia obligatoria por las noches. No era complicado acostumbrarse a una vida sistemática y sencilla como esa, e incluso el petite, alguien rencoroso de la cotidianidad tan anormal que vivía de vez en cuando, había encontrado comodidad en la situación entera de regresar a su vida después de los diez días que pasó al lado del detective.

En su corazón, en un sitio bastante especial, guardaba las memorias recabadas en aquel periodo de tiempo. Desde los amargos recuerdos en los que intentó rechazar sus sentimientos sin mucho éxito, hasta las ocasiones tan íntimas que compartieron juntos. Habían sido un par de días en el que se olvidó de todos sus problemas por completo y se dejó sumergir en conflictos completamente nuevos.

Había pasado desde ese entonces solo una semana y media, 11 días en total, pero ciertamente ya extrañaba el confort y la seguridad que le traía la compañía de Shuichi, quien era su interés romántico, pero no era codependiente de él. Conocía bien sus límites e incomodarlo más de lo que debía no era su intención.

Después de todo, no deseaba volver a alejar a su querido. No importaba cuanto quería tenerlo a su lado y acurrucarse contra su cálido cuerpo, simplemente no deseaba sobrepasar los límites que el muchacho de los ojos ámbar había puesto y que terminara dejándolo por su terrible personalidad. Eran miedos que no podía explicar, pero que sin ninguna duda existían y lo atormentaban de vez en cuando, específicamente en las ocasiones en las que se sumergía en sus corrientes mentales.

Por el momento, encontraba tranquilidad fuera de su enamoramiento con Saihara en Rantaro, Miu y Himiko principalmente, pero solía pasar el rato con quien sea que aceptara una invitación. Estar junto a los otros jóvenes era relajante, bastante entretenido y le permitía despejar su cabeza de la agridulce sensación del rechazo indirecto.

Aunque no salía con otros chicos con el propósito de olvidarse de sus problemas exclusivamente, pues también tenía el miedo de que ellos lo abandonaran como lo habían hecho en el juego de asesinato del que alguna vez fueron partícipes. Formar vínculos con cada uno de ellos y pasar el rato de vez en cuando a su lado garantizaba que no lo odiarían de la nada y volverían a tornarse en su contra, de la misma forma en la que lo hacían en las más retorcidas de sus pesadillas.

Y había hecho un par de sacrificios para eso. Podía nombrar algunos con solo pensarlo un par de segundos, pero estaba orgulloso particularmente de un logro en el cual puso sangre, sudor y lágrimas para completar.

Había mantenido su racha de no mentir de forma compulsiva por una cantidad considerable de tiempo, lo cual era increíblemente bueno tanto para él como para los otros. Sus amistades estaban tan orgullosos de él gracias a ese logro, uno que, aunque parecía fácil lograr, no lo era en lo absoluto.

Mentir se volvió su segunda naturaleza en el pasado, como un mecanismo de defensa para protegerse a sí mismo y a su plan maestro, el cual terminó fallando rotundamente. Era solo normal que algo de eso se hubiese quedado en su consciencia a pesar de ya no encontrarse en peligro.

Y, si decía palabras deshonestas, eran inofensivas. Quizá sería decirle a alguien que su atuendo se veía bien cuando realmente no combinaba del todo, tal vez era soltar un cumplido que no sentía de corazón. Cosas que todo el mundo hacía de forma inconsciente y que no tendían a hacer daño.

Eso era un progreso.

Otro progreso era lo bien que se llevaba con su querido. No era exactamente bueno para su mentalidad ahora que tenía que superarlo, pues si seguía sumergiéndose en su enamoramiento quizá terminaría por arruinarlo todo, pero era imposible no comportarse amistoso alrededor del atractivo detective. Pasaban mucho de su tiempo juntos, más de lo que ambos quisiesen admitir.

↳ 💉₊˚. ··· Healing Takes Time »-Postgame Saiouma-«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora