capítulo nueve

673 51 54
                                    

«Claramente los muertos si reviven.»

— ¡Han! —gritó Hana entrando a la cocina mientras que el chico guardaba la comida y yo lo veía desde la mesa comiendo del pote de helado— ¡A que no sabes qué he visto!

— Posiblemente algo que no me interesa, realmente. —contestó sin siquiera girar a verla.

— ¡Grosero! Y no, no es algo que no te interesa. —rodó los ojos cruzándo se de brazos— Es una persona que tienes demasiado tiempo sin ver y que posiblemente te emocione hacerlo.

— No creo que la abuela haya venido a la cuidad. —negó el otro y Hana se exasperó golpeándolo con ayuda de su pie— Auch, deja de ser tan agresiva.

— Entonces tómame en serio. —devolvió con tono amenazante.

— Imposible. —se burló.

— ¡Jeonghan!

— ¡Hana!

Seguido de la mini discusión que se habían armado en menos de dos segundos, Mingyu entró a la cocina con el rostro más serio que cuando llamaban a mamá de dirección y la veía cruzando la puerta del instituto con ánimos de cometer asesinato en cuanto llegáramos a casa. El chico alto rodó los ojos en tanto escuchó a Hana diciéndole a su hermano que realmente iba a sorprenderse y su mirada se encontró con la mía momentos después en los que no debatió si quiera un segundo para caminar hasta y sentarse a mi lado en la mesa; le ofrecí helado con la misma cucharilla que tenía yo y él rápidamente la tomó para comer un poco en tanto Jeonghan no le prestaba atención a su hermana quién brincaba de aquí para allá.

Presté atención a pesar que no sabía de qué hablaban, Hana se veía realmente emocionada y Mingyu algo molesto, debía ser algo interesante y de todas formas más tarde iba a posiblemente sacarle la sopa a la menor de los Yoon.

— ¿Qué pasó? —pregunté con interés y en un tono bajo dirigiéndome a Kim— Estás muy serio y ella muy emocionada.

— Ya vas a ver. —bufó rodando los ojos nuevamente con la cuchara llena de helado metida en su boca— Después dicen que estoy loco, pero realmente se cómo son las cosas con esa emoción que siente.

— ¿Pero de qué hablas...? —no terminé de decir aquello cuando ya Hana me había interrumpido con un pequeño grito.

— ¡Me encontré con Wonsun! —soltó emocionada y su hermano la miró rápidamente con interés— Volvió a Corea hace unos días, se quedarán aquí permanentemente según lo que me dijo.

— Woah, hace años que no sé de él. —sonrió el chico, continuando con su tarea— Es genial que esté de regreso.

Carraspeé llamando la atención de ambos, compartí mientras otra cucharada de helado bajo la ofendida mirada de Jeonghan. Sabía que diría algo respecto a que ese helado era para ambos, pero él se había tardado bastante metiendo las compras a la despensa y Mingyu realmente parecía necesitar ese helado más que nosotros.

Tenía en su rostro una mueca de tragedia que era imposible pasar desapercibida.

— ¿Quién es Wonsun? —la miré con ojos entrecerrados— Me siento traicionada.

— No seas tonta, te hablé sobre él. —me miró de la misma forma a lo que negué— ¡Claro que sí!

— Yoon Hana, si te estoy diciendo que no lo hiciste es por algo. —la miré con obviedad— Jamás me hablaste de alguien llamado así.

𝐌𝐎𝐔𝐓𝐇. ━ Jeonghan. (𝗖𝗮𝗻𝗰𝗲𝗹𝗮𝗱𝗮)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora