Capítulo XIII

8.6K 733 143
                                    

Sentada en la ventana, sola, mirando desde lo alto de su departamento a las personas que pasaban, unas sonrientes, otras tristes. Esas personas que estaban cargadas de historias diferentes. Eso hacía Kara, solamente mirar, sonriendo con ironía y tristeza, aferrándose como tantas veces, a la que una vez fue su vida, pero sentía un sentimiento indescriptible, había destrozado el corazón de Lena Luthor. Irónicamente ella misma que se preguntaba cómo alguien podía lastimar de esa forma a la pelinegra cuando escuchó su historia de que su novia la había engañado con su mejor amigo. Por eso reía de ironía y dolor a la vez sintiendo sus lágrimas correr por sus mejillas, la rubia quería golpear la ventana con sus puños, le dolía no saber qué estaba sintiendo por la ojiverde o tal vez sí lo sabía, pero sentía que de alguna manera seguía ligada a Lucy Lane, le dolía saber que hace setenta y dos horas la dejó irse sin intentar hablar con ella.

Tuvo tentación varias veces de marcarle a la pelinegra y decirle que todo había sido una broma de mal gusto para apagar el fuego que sentía su cuerpo al estar encima suyo, al final terminaba bloqueando su móvil. Quería escuchar su voz decir su nombre y confesarle lo bien que se sintió al estar besando sus labios, ¿significa que Lena está enamorada de mí?, esa pregunta mental le resonaba una y otra vez. Recordando como se entregaba, como recorría cada milímetro de su boca con sus labios, como suspiraba, cuando no la detuvo al invadir su intimidad y no podía olvidar cómo decía su nombre.

— Lena — susurró con tristeza para si misma cerrando sus ojos recargando su cabeza en el vidrio, se sentía cobarde por no definir lo que siente por la señorita Luthor. Intentó hablar con Alex ese mismo día, pero se encontraba atendiendo una emergencia en el hospital, sin embargo, prometió que hoy lo harían. Preciso instante que tocaron la puerta, sabía que era ella, su pelirroja hermana. Porque sabía que estaba muy lejos de fuera la ojiverde — Pasa Alex, está abierto — le dijo tristemente, Alex así lo hizo entró mirándola perdida con su cabeza recargada en la ventana y suspiró, sabía con lujo de detalles por medio de su casi novia lo que había pasado.

— Aquí estoy, aquí estoy — se acercó a ella susurrando para abrazarla sin pensarlo y Kara se aferró a ella fuertemente para comenzar a llorar en su pecho. Alex también estaba enterada de todo lo que estaba viviendo Lena por medio de su misma bella fuente y se sentía frustrada con su hermana. Pero hoy estaba decidida decirle la verdad que había estado callando, hacerle ver que necesita ayuda — Cuando estés lista hablaremos — volvió a susurrarle con cariño y comenzó a acariciarle su espalda dándole un beso en su cabello. Kara asintió en su pecho durando un poco más en su pecho y se separó lentamente.

— La herí, Alex — le dijo sin verla a los ojos y Alex solo la veía sin gesto alguno en su rostro — Lena está enamorada de mí. No sé si yo la confundí o... — su hermana mayor tomó su mano para que la mirara y Kara lo hizo con los ojos llenos de lágrimas nuevamente.

— ¿A ti te gusta Lena? — su hermana mayor la miraba fijo, pero CEO Danvers la quitaba no soportaba la profundidad con que lo hacía. La rubia se encogió sus hombros mirándola levemente.

— No... No sé, Alex — negó tristemente poniendo su cabeza entre sus piernas sollozando. La doctora tomó un poco de aire para ser paciente con la rubia.

— Claro que sabes, Kara — se burló de forma irónica acomodando su chaqueta, pero Kara no la veía — Hiciste muchísimas cosas para que Lena Luthor estuviera feliz en Midvale — Kara abrió los ojos ampliamente sintiendo como su corazón latía rápido, la había descubierto. Alex aprovechó ese silencio para seguir enumerando — Además que, prácticamente estabas llorando preocupada de por qué no te buscaba — le dijo nuevamente irónica sentándose a la par de la ojiazul en la ventana. Kara alzó un poco la mirada quitando sus lentes para limpiarse las lágrimas.

Cuestión De Amor [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora