Not Just Boys [Drarry || Harco]

La brigada insquisitorial

CAPÍTULO 14, PARTE 2

Estaba por dar vuelta la cuarta tortita cuando escuchó el sonido en su puerta, tuvo que frenar para respirar antes de abrirla. Mierda, no podía estar tan desesperado por verle ¡Si apenas le había visto hace dos horas!

-¿Has comenzado sin mi?- preguntó Harry con una sonrisa cálida cuando decidió abrirle.

-No he preparado para ti- corrigió dejándole pasar. El chico se fue directamente a la cocina y tomó el mando del sartén.

-Lo usual entonces, ¿cómo te fue en la biblioteca?- a Draco no dejaba de sorprenderle la facilidad con la que Potter se movía por su habitación, la naturalidad de su andar. Era casi como si su bolso perteneciera sobre aquel rincón de su mesa, o su corbata roja sobre el sillón que utilizaba para leer. Ay no, de verdad se estaban convirtiendo en Harry y Malfoy.

"voy a dar pelea" se recordó a su mismo palpando su antebrazo.

-No estaba el libro de herbología que necesitamos y además te quedaste con las notas- respondió frunciendo el ceño al notar como sus tortitas estaban ligeramente más tostadas que las de Harry -¿y tú grupo de 'desventajados'?

-No tan mal, estuvimos revisando algunos hechizos de protección y el muffliato

-¿Muffliato? ¿pero si eso es de tercer año?- Exclamó el rubio sin poder contenerse

-Si bueno, su primer profesor fue un mortífago que se hacía pasar por ojoloco y la siguiente fue Umbridge... como que no puedes pedirles demasiado a esas generaciones- los duendecillos que había sentido la primera vez que compartió un fin de semana con Harry volvieron a atacarle cuando el chico le dedico aquella cálida sonrisa. "Piensa en Umbridge Draco" se dijo a sí mismo.

-¿Por qué estás incómodo?- preguntó Harry clavándole los ojos esmeralda.

-¿A qué te refieres Potter? No estoy incómodo- Harry formó una mueca antes de volver la mirada a la sartén -Eres un fijón- reclamó indignado al captar los pensamientos del moreno.

-Oye tú me lees la mente, yo tengo que aprender a leerte con lenguaje corporal. Y tú lenguaje corporal me está diciendo que ahora estas incómodo porque no dejas tranquilo tu antebrazo izquierdo ni tu palma derecha.

-Solo vamos a comer Potter- respondió tomando su plato de tortitas para dirigirse a la mesa.

Comieron en un silencio que solo era interrumpido por el sonido de los cubiertos. Luego Draco fue el que recogió los platos y fue a la cocina a lavar. Durante esa semana habían comprobado que podía realizar magia con la varita de acebo, así que Harry simplemente se la había cedido, técnicamente era capaz de realizar un conjuro rápido de limpieza. Pero no podía decir que estaba recuperado, la verdad era que hacer magia le agotaba y, además, sentía el aire demasiado espeso así que le entusiasmaba la idea de lavar los platos al estilo muggle.

Tuvo suerte de que los platos no se le resbalaran cuando una suave tonada comenzó a sonar en la habitación, reconocía la vibración del aparato. Harry había traído a su habitación una radio, de seguro encantada.

Draco tenía cierta experiencia con aquellas maquinas endemoniadas. No le agradaban demasiado, incluso cuando daba con música que le era agradable la calidad del audio le era molesta. Sin embargo, en aquel momento de tensión, el sonido de la guitarra era agradable.

-¿Qué canción es?- preguntó por la necesidad de que el aire perdiera aquel peso excesivo.

-Creo que son los Red Hot Chili Peppers- respondió Harry haciendo aparición en la cocina -¿Vas a decirme qué te ocurre?