Not Just Boys [Drarry || Harco]

Aquel Diciembre de 1995

El día de Yule no estaba siendo precisamente lo que Harry había imaginado. Kreacher había llegado muy temprano a su habitación para levantarlo alegando que "la señorita Cissy y el señorito Malfoy requieren su presencia amo". Eso fue suficiente para que el azabache saltara de la cama y buscara algo para abrigarse y bajar lo más pronto posible.

Las cosas estaban más tranquilas entre Draco y su madre. Draco había aprovechado su soledad el día anterior para reflexionar sobre el actuar de Narcisa en las pruebas de resonancia, pero el aire entre ellos seguía un poco tenso y Harry tenía que actuar como mediador.

Lo lamentaba desde lo profundo de su ser porque, a pesar de que tampoco estaba de acuerdo con el actuar de Narcisa, sentía que nadie debería estar enojado con su madre demasiado tiempo. Si él tuviese a Lily Potter en su vida estaba seguro de que jamás se habría podido enojar con ella por más de cinco segundos.

Volviendo a lo importante, el día no estaba siendo como lo había imaginado en un inicio porque, en primer lugar, Narcisa y Draco no estaban discutiendo. Bueno, un poco, pero no era un tema demasiado grave.

-Draco Lucius Malfoy ¡suelta eso ya!- fue lo primero que Harry escuchó cuando se apareció en el comedor de su casa.

Draco alzó la vista hacia el lugar donde Harry se había materializado y no tardo en lanzarle al azabache una barra de cereal que atrapó en un reflejo perfectamente coordinado.

-Come y ponte a limpiar Potter, hay trabajo- Harry paseo la mirada entre él y Narcisa que a medio metro de su hijo lucía horrorizada de verlo con una escoba entre las manos. Le tomó diez segundos comprender la situación.

-Déjame adivinar ¿tenemos que limpiar la casa?- preguntó camino a la nevera (un electrodoméstico muggle que Harry consideraba como una de esas cosas indispensables de su vida no-mágica) para buscar algo de beber.

-Hasta el último cimiento- respondió el rubio demasiado concentrado en su tarea.

-Pero eso es trabajo del elfo- reclamó Narcisa buscando el apoyo del azabache.

-Madre, Kreacher tiene el día libre ya te lo dije- Harry frunció el ceño extrañado por esa afirmación.

-¿En serio Kreacher?- el elfo agacho la mirada con duda ante la pregunta de su amo y Narcisa se sintió victoriosa.

-El señorito Malfoy dijo que estaría de acuerdo amo...- respondió el elfo encogiéndose en completa sumisión.

-Ayer llegó una carta de Granger, de su grupo de activismo del elfos mejor dicho- comentó Draco -. Pedía que las familias con elfos domésticos les den el día libre para que puedan reunirse y celebrar Yule según sus propias tradiciones.

-¿y quieres hacer eso Kreacher?- preguntó Harry sentándose a la mesa para comer su barra de cereal.

-Kreacher no tiene con quien ir amo Harry.

-Kreacher...- advirtió Draco con voz severa, el elfo volvió a bajar la mirada mientras se frotaba las manos.

-A Kreacher le gustaría descansar e ir a ver a los elfos de Hogwarts amo- el moreno se tomó un momento para disfrutar la sinceridad de la criatura que más que su sirviente consideraba un pequeño amigo gruñón a su cuidado.

-Pues hazlo, te lo mereces. Si ves a Julpy en Howgarts envíale mis saludos ¿si?- las grandes orejas de murciélago de Kreacher se alzaron y Harry habría jurado que el elfo estaba sonriendo a pesar de que sus cejas mantenían esa expresión amargada que lo caracterizab -Ah ¿cómo celebran los elfos Yule? ¿Quieres darles regalos a los elfos de Hogwarts? Creo que yo debería obsequiarle algo a los elfos de Howgarts ¿Kreacher puedes pasar por Gringgots? Solo si no te retrasa, puedes coger lo que estimes conveniente y comprar algo para ti y tus amigos.