I don't want to be your friend

Cαρíƚυʅσ ԃιҽȥ.

Ron salió de Sortilegios Weasley para su hora de almuerzo cuando se encontró con Blaise esperándolo afuera.

—No sabía que nos veríamos hoy.—dijo el pelirrojo en cuanto se acercó a este.

—Lo se, quería darte la sorpresa ¿tienes planes?

—No realmente, o no los tenía hasta hace como una hora donde mi madre me pidió que fuera a comer a la madriguera.

—Oh lo entiendo, podemos vernos después.—Blaise iba a irse cuando las palabras de Ron lo sorprendieron.

—También puedes venir conmigo si quieres.

—¿Ya vas a presentarme a tus padres? Vaya Weasley vas rápido.—bromeó el moreno.

—Que tonto eres, ¿vienes o no? Es comida gratis.

—Está bien, vamos.

—Iba a aparecerme pero ya que vas tú también, quizás lo mejor sea ir por chimenea, ven.

El italiano siguió al pelirrojo dentro de Sortilegios Weasley, se sintió algo extraño al sentir la mirada de uno de los hermanos mayores de Ron pero intento ignorarlo mientras seguía a este.

—¿No ibas a casa?—preguntó George.

—Voy a ir, solo que Blaise viene conmigo así que usare la chimenea, ¿los polvos flu donde los tienes?

El mayor sacó algo detrás del mostrador y se lo lanzó a su hermano.

—Bueno, diviertanse entonces.

Ron ignoró a su hermano por el tono que usó y fue hacía la chimenea, le dio un puñado de polvos flu al moreno para que él fuera primero.

—Esta chimenea solo está conectada para llegar a la madriguera, la casa de Bill o la de Harry así que es muy poco probable que termines en otro lado, ve tu primero.

Blaise asintió no muy convencido, pero entró a la chimenea y dijo fuerte "la madriguera".
Cuando salió de aquella chimenea se encontró una casa algo o mejor dicho muy desastrosa, se veía acogedora a pesar de no parecer una casa común pero no le desagrado estar ahí como pensó en un principio, unos segundos después sintió a alguien detrás de él así que volteo a ver a el pelirrojo que le sonreía.

—Ven, la cocina es por acá.— Blaise asintió y siguió a Ron hasta la cocina.

Al entrar encontraron a un señor muy pelirrojo que asumió era el padre, estaba sentado en una mesa muy larga con sillas distintas mientras leía el profeta, cerca de ahí estaba una señora pequeña y pelirroja que obvio era la madre pero para la mala suerte de los dos había una tercera persona que no esperaban ahí. Granger estaba muy sonriente ayudando a la señora Weasley a preparar el desayuno sin que ninguno aún reparara en su presencia.

—Ya he llegado. — la voz de Ron sonó tranquila pero su aspecto no demostraba mucha felicidad de estar en esa situación.

Los tres restantes miraron a Ron alegremente de verlo ahí, su madre se acercó a abrazarlo cuando reparó en la presencia de Blaise que lo miró entre confundida y sorprendida, hasta parecía algo decepcionada de verlo ahí. No tenía que usar toda su inteligencia para captar que los Weasley querían hacer una cita para Ron y Hermione sin que su hijo estuviera al tanto de ello.

—Mamá e invitado a un amigo a comer, es Blaise.—presentó el pelirrojo señalando a el mencionada que sonrío educadamente.

—Un gusto conocerla señora Weasley, espero no sea una molestia mi presencia es su hogar.—usar los modales que tenía gracias a su madre no solo en lo que dijo si no en la sonrisa que le regalaba a la mujer pareció funcionar pues ella cambió su expresión y le sonrió cariñosamente.