"Nuestro baile"

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Había llegado el gran día.

El día del queridísimo baile de graduación.

Mentiría si digo que no me estaba muriendo de los nervios.
La verdad es que prefería que me tragase la tierra.

Avani vendría para ayudarme a prepararme, ya que no tengo la menor idea de maquillaje y peinado.

Amelie: Me haces dos trenzas? -preguntó la pequeña mientras yo miraba a un punto fijo en la pared mientras pensaba-

Tn: Pero...no sé cómo. Lo puedo intentar si quieres -sonreí de lado y ella asintió-

Hoy no iríamos a la secundaria por el baile, y como la profesora de Amelie se enfermó, ella tampoco iría.

Hace días había leído en internet acerca de peinados, para ver qué me iba a hacer para el baile, y entre ellos estaban las trenzas. El problema era que yo no había visto cómo se hacían.

Mi madre, cuando yo era más pequeña, siempre me peinaba para la escuela, y cuando ella no estaba, simplemente iba con el cabello suelto, o me lo recogía un poco, nada elaborado.

Luego de unos cuantos minutos de cruzar mechones unos con otros, había terminado lo que supuestamente eran las dos trenzas.

Amelie: No están tan mal -dijo mientras miraba en el espejo de mi habitación su cabello todo despeinado- Gracias! -me abrazó y luego se fue hacia su cuarto-

Supongo que no dijo nada malo porque no quería herir mis sentimientos, pero si vamos a ser sinceros, las trenzas me habían quedado horribles.

Fui hacia la cocina y preparé mi desayuno y también el de Amelie. Cuando ya estaba listo, la llamé y nos sentamos en el sofá a ver televisión.

Me hacía recordar a los fines de semana en el campo de la abuela.
Había veces que nos quedábamos a dormir en su casa y cuando llegaba la hora del desayuno nos poníamos a ver televisión.
Recuerdo que siempre daban un comercial de una vaca cantando, y con Amelie nos moríamos de la risa.

Después de desayunar, nos lavamos los dientes y luego nos pusimos a jugar unos juegos de mesa que tenía Amelie.
También intenté enseñarle a jugar al ajedrez, pero ella había desistido, ya que le parecía
sumamente aburrido.

Luego Julia vino y nos preparó el almuerzo.
También nos había preparado un postre de chocolate, con el cual con Amelie nos manchamos toda la cara, ya que ella comenzó manchándome un poco la nariz, y terminó en un caos total.

Nos fuimos a limpiar cada una a su habitación y luego yo me quedé ahí.
Me recosté en la cama y me dispuse a leer.

En un momento, me di cuenta que realmente no estaba prestando atención a lo que estaba leyendo, y que solo estaba pensando en una cosa.

En una persona mejor dicho...

Y justo cuando estaba por hacer un esfuerzo en dejar de pensarlo y disponerme a leer, me llegó un mensaje de él.
Sonreí instantáneamente al ver su nombre en la notificación.
Agarré el teléfono y vi lo que me mandó.
Era una foto de él y Jackson, su amigo de las características pecas. Estaban al parecer comprando comida en Chick-fil-A.
Su cara graciosa y el ángulo en el que sacó la foto me hicieron estallar a carcajadas.

Me había preguntado si estaba bien y si yo ya había comido. También hablamos de otras tonterías, y luego dejé que comiera tranquilo con Jackson.

Se hizo más tarde y Avani ya estaba viniendo hacia mi casa.

Cuando llegó, fuimos hacia mi habitación y lo primero que hice fue bañarme.
Estuvimos ahí toda la tarde, ya que ella también estaba peinándose y maquillándose, ya que luego iría a su casa y solo se pondría el vestido y un par de cosas más.

¿Me amas? •TERMINADA•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora