El día que Jin se había negado a aceptar a Rosé, pensó que ella seguiría intentando.
Pero no demostró más que eso, ya había pasado tres días desde que Rosé y Jin habían cruzado palabras, solo se encontraban en la cafetería y la chica lo ignoras por completo.
Jin había estado recibiendo constantes mensajes de Jisoo, ya no sabiendo qué decirle, pero la pelinegra sabía entender cuando su hermano le respondía con un simple: "tal vez hoy"
El pelinegro ya estaba perdiendo la paciencia, veía a Rosé reír de lo más tranquila con Somi en una de las mesas de la cafetería, mintras su hermana está esperando solo un pequeño rastro de interés por su parte.
Llegó un momento en que volvía a verla, estaba tomando las escaleras que dirigian a la azotea. Pidió disculpas a sus amigos y se apresuró a seguirla.
Subió los escalones y al llegar al último peldaño, abrió la puerta, sientiendo el fuerte viento en su rostro.
Buscó a Rosé con la mirada y la hayó sentada en el borde, estaba bebiendo alcohol mientras miraba el paisaje, pensativa.
_¿Estás loca? - Jin había llegado a su lado y le arrebataba la botella, Rosé solo rió levemente, estaba ebria - quitate de allí - ordenó con enfado, tomando su brazo para alejarla del borde, pero Rosé apartó su brazo brusamente.
_No me toques - advirtió - no quiero que te acerques.
_Puedes caer - reprochó, viendo con temor la altura en que estaban - sal de allí - ofreció su mano y Rosé lo ignoró, Jin impaciente e indeciso, tomó por los brazos a la rubia e intentó quitarla del borde, forcejeó un instante con ella y no teniendo opcion, uso su fuerza para dejarla en el suelo siendo lo más cuidadoso que pudo, Rosé se quejó ante la fuerte caída pero luego solo rió, quedándose extendida en el piso - ¿qué diablos te pasa? ¡Podrías haber caído!
_No te interesa - miraba al cielo.
_¿desde cuando tomas? - observaba la botella - ¿sabes que te pueden expulsar por esto? - regañó.
_¿y qué? Solo uno de todos nosotros tiene la posibilidad de convertirse en idol, dudo que pueda con ello, ¿por qué perder mi tiempo aquí?
Jin la observó enfadado, parecía una perdedora.
_Levantate - la tomó de uno de sus brazos y quiso levantarla, pero Rosé lo empujó, haciendo que cayera sentado a su lado, ella solo rió volviendo a mirar al cielo.
Jin bufó y se quedó allí sentado, solo haciendole compañía, no podía dejarla en ese estado, sí no se tira por el borde lo más seguro es que alguien la vea, no podía permitirlo, podrían expulsarla.
_Eres una idiota, quiero que lo sepas - pronunció Jin un poco más tranquilo.
_No tienes que decirme algo que ya sé - respondió con calma.
_Pues que bueno que lo sepas, por fin piensas.
Rosé solo sonrió por lo que había dicho, recordando esos días en que ellos escapaban a la azotea porque les daba flojera ensayar.
Flashback
_Eres una idiota - un pequeño Jin de quince años se encontraba sentado de la misma manera que ahora, su amiga estaba recostada en el piso, sintiéndose mareada.
_No tienes que decirme algo que ya sé - respondió Rosé, tenía la misma edad.
Ambos aun mantenían el color de su cabello natural.
_Pues que bueno que lo sepas, por fin piensas - reprochó - te dije que no te acercaras al borde porque te mareas y no me hiciste caso.
_Quería ver si ya no me mareaba, si lo practico cada día llegará el día en que ya no me marearé.
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IDOL ROMANCE
RandomLa cantante Rosé vuelve a Corea después de tres años. ¿Su antiguo amor renacerá?