ATACK

Capítulo 22

La habitación se encuentra en total silencio, al igual que todos en esta están durmiendo, todos a excepción de un pequeño de 7 años.

Se había despertado a mitad de la madrugada al sentir ruidos en el pasillo y escuchar como la puerta se abría y volvía a cerrarse nuevamente, cerró sus ojos fuertemente para no ver de qué se trataba e intentar olvidarlo.

Pero, luego de algunos minutos le entraron ganas de ir al baño. Quiso aguantarse y dejar que pasara, pero no podía, además de que tenía miedo de salir solo y encontrase con alguna persona mala en el pasillo, así que, pensándolo por última vez decidió por despertar a Iker.

Lo sacudió suavemente por su brazo, intentando despertarlo, pero este parecía tener un sueño profundo; intentó nuevamente, pero ahora con más fuerza, lo movió hasta que este comenzó a despertar.

Ik: ¿Mateo? ¿Qué sucede? ¿te sientes mal? - Me siento en la cama y miro su carita y su ceño fruncido.

M: No... Solo tengo ganas de hacer pipí - dice en un susurro - y me da miedo ir solo.

Ik: Tranquilo, yo voy contigo - asiente y me toma de la mano para caminar hacia el baño.

M: escuché ruidos, por eso tengo miedo - continúa susurrando - lo siento, no quería despertarte, pero no aguanté.

Ik: No pasa nada, ¿ruidos dónde? -

Pasamos por la habitación de Luke y la puerta se encontraba un poco abierta, no le presté atención y seguimos hasta llegar al baño.

M: en el pasillo, la puerta se abrió y volvió a cerrarse - Dijo mientras ingresaba al baño.

Ik: ¿la puerta de nuestra habitación? - él asiente - está bien, yo voy a revisar que todo esté bien mientras tu acabas aquí ¿está bien?

M: si - apretó sus labios con duda antes de preguntar - ¿regresarás?

Ik: por supuesto, quédate aquí, pero si escuchas ruidos extraños no vayas a bajar, corre a la habitación y te encierras con Nico. ¿bien?

M: Si

Ik: No tardo, peque.

Camino por el oscuro pasillo hasta la habitación de Luke, como la puerta se encuentra abierta solo me asomo por esta y confirmo que Luke no se encuentra en ella.

Bajé silenciosamente las escaleras, sin hacer el mínimo ruido, tanto que hasta parecía que no estaba respirando. Llegué al primer piso y revisé rápidamente la sala con mi mirada, para finalmente encontrar que estaba totalmente vacía.

Ax no se encontraba en el sofá donde horas antes lo dejé. Sobre este estaba su manta, desarreglada. No había ninguna luz encendida, ni rastro de ninguno de los dos a la vista.

¿habrán salido?

Me percaté de que la puerta de la cocina estaba entreabierta y por medio del pequeño espacio podía ver sombras.

Caminé rápido hacia allí y escuché un quejido y sin hacer ruido me asomé por la pequeña hendija.

Lo que vi me dejó totalmente sin palabras, casi en un estado de shock. Solo pude tapar mi boca para evitar que mil groserías salieran de esta a causa de la impresión.

No me esperé esto de él, jamás en la vida me lo hubiese esperado.

Retrocedí hasta quedar recostado a la pared junto a la puerta.

Luego de unos segundos pude procesar lo que vi. A Ax boca abajo en la encimera de la cocina, totalmente desnudo y con una expresión en su rostro que realmente no quiero describir.