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El omega estaba consciente de que el hombre a su lado lucía tal vez un poco nervioso y ansioso, una combinación que realmente no necesitaban sentir días antes del nacimiento de los cachorros.

Incluso la reacción de Namjoon al enterarse por parte de Jungkook lo había sorprendido, el Ceo de la empresa se había quedado sin palabras al enterarse sobre la situación actual de la pareja, aunque el alfa pudo jurar que le escuchó murmurar una frase.

Debí suponerlo.

Jimin ladeó la cabeza hacia la izquierda, su vista oscura pendiente de las acciones del alfa quien no paraba de moverse de un costado a otro dentro de la habitación de los cachorros, esta había sido acomodada y contenía el espacio suficiente para ellos junto con el que les permitía a la pareja deslizarse por igual.

— Me estás poniendo nervioso a mí también — comentó Jimin en voz baja.

El azabache detuvo sus movimientos, entre sus manos sostenía unas pequeñas prendas que se hallaba acomodando entre los muebles.

— ¿Nervioso? No estoy nervioso — respondió volviendo a moverse.

— Seguro — agregó el omega observándolo repetir el mismo movimiento de nuevo.

No necesitaba escuchar decir al alfa que se acercaba el gran momento y que debían estar ansiosos y felices por ello, sin embargo, la preocupación latente en su mente no le permitía disfrutar del todo las fechas.

Realmente estaba seguro de que el alfa le apoyaría en todo, solo era ese pequeño asunto del cómo sus vidas cambiaron de pequeña a gran forma gracias a lo que fue su propia idea.

— Pareces incluso más preocupado que yo, ¿Qué sucede? — Jungkook se detuvo por cuenta propia, recostando su peso contra el mueble que se hallaba hacia el muro se quedó observando al rubio quien alzando la mirada lo encaró.

— No sé de qué hablas.

— Esta mañana cuando intenté besarte — el alfa forzó su garganta un poco — no te negaste, pero pude ver duda en tus ojos — Jimin debió suponer que Jungkook no demoraría en darse cuenta.

— No es como si dudara de lo que está a punto de suceder — respondió.

— No dudas de lo que estaba a punto de suceder, dudas de lo que está sucediendo ahora, de nosotros — se señaló a él mismo y al omega.

— No es como si yo — Jimin boqueó durante unos segundos.

— Déjame adivinar — interrumpió el azabache — este asunto entre nosotros, el hecho de que nos besamos y tomamos de nuestras manos incluso cuando estamos afuera — Jimin asintió al escucharle — el hecho de que puedo simplemente hacer esto — el alfa se acercó hasta el omega lo suficiente como para mover sus brazos alrededor de este y poder descansar sus manos en las caderas.

El omega inhaló de forma sonora, su vista pendiente de lo que el alfa estaba tratando de indicar.

— ¿Te molesta que no hemos hablado de esto en realidad? — cuestionó a pesar de que ya podía imaginar cuál sería la respuesta del rubio.

— No me molesta, no se trata de eso — sus labios frunciéndose a medida que hablaba — pero creo que solo podría llegar el momento en el que haya una palabra que pueda definir esto que hacemos — terminó de explicar de la forma más calmada posible.

A pesar de que su corazón estaba acelerado y para ese punto Jungkook a debía haberse dado cuenta.

— Creo que entiendo tu punto, sin embargo, no es como si fuese realmente etiquetarlo todo — Jungkook dejó que sus manos pasearan por las caderas contrarias — los cachorros nacerán prontos y lo único de lo que estoy seguro es que ellos nos tendrán a nosotros para protegerles y quererles.

— Que tengan una buena vida — agregó Jimin — que sepan y comprendan que siempre vamos a estar en sus vidas sin interesar cuántas veces puedan necesitarnos dentro de ella.

— Exacto — el alfa inclinó su rostro hacia adelante para poder la frente del omega — ellos nos tendrán a nosotros de la misma forma en la que tú me tendrás a mí — terminó por abrazar al omega, sus brazos rodeando el cuerpo contrario.

— Desde pequeño siempre creí que realmente estarías en cada evento importante durante mi vida, nunca visualicé ninguno de ellos con algún alfa o beta aleatorio en mi imaginación — confesó — supongo que para mí siempre fue más importante tener tu apoyo, creo que con eso basta para mí — agregó.

— Eso si es una gran confesión — comentó Jungkook fijando la vista hacia las espaldas del rubio.

— ¿Nunca pensaste algo similar? — interrogó el omega, sus manos yacían contra la espalda amplia del alfa, solo descansando allí.

— Para mí tú eres un punto fijo en mi vida, es algo que nunca pensé que podría faltar alguna vez, supongo que me acostumbré tanto a que estés a mi lado que imaginar que no lo hagas es extraño y doloroso de muchas formas incontables para mí — apoyó su mentón contra la coronilla de la cabeza del omega — ¿Eso tiene sentido para ti? — cuestionó en voz baja.

— Lo tiene, puedo comprender a qué te refieres con ello — el omega pudo sentir como poco a poco aquellas dudas comenzaban a desaparecer por las respuestas del alfa.

— Eso es bueno — soltó el cuerpo del omega para alejarse ligeramente — siempre puedes hacerme entrar en razón si cometo algún error en el futuro — agregó con una pequeña sonrisa tirando de la comisura de sus labios.

— Lo mismo va para ti — Jimin sonrió de vuelta, sus mejillas sin alcanzar tanta altura.

— ¿Estás listo? — preguntó Jungkook — mañana iremos al hospital y solo quedaría esperar el nacimiento de los cachorros — su voz sonando bastante suave.

— Nuestros cachorros — dijo Jimin.

— Nuestros cachorros — repitió Jungkook.

Jimin se movió hacia atrás para salir de la habitación con una sonrisa aún en su rostro.

Jungkook se le quedó observando hasta que desapareció de su línea de visión, la sonrisa en su rostro se esfumó y un surco apareció en su frente rápidamente haciéndole reemplazo.

Suspirando envió su mano derecha hacia el bolsillo delantero de su pantalón sacando del fondo de éste una pulsera dorada, ésta tenía un pequeño adorno con forma de lobo en el cual estaba grabado el nombre de Jimin en el centro de este mismo.

El alfa tenía otras cuatro pulseras doradas más guardadas y escondidas del omega en su habitación, cada una esperando ser marcada con los nombres de los cachorros, los cuales aún estaban en proceso de escoger.

Solo esperaba el momento adecuado para dársela, él mismo tenía una con su nombre grabado.

Tal vez solo quería enmarcar el hecho de que prontamente se convertirían de forma oficial en una familia.

Embarazado de mi mejor amigo  °Kookmin°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora