29 de noviembre de 2018
Quedaba tan solo un día para el certamen de patinaje, pero eso era lo último en lo que podía pensar. Tenía la cabeza en otra parte: en Jake y en Nina, concretamente. No había podido dejar de darle vueltas a mi conversación con Nina desde que me bajé del autobús y, ahora, en la última clase del jueves, seguía pensando en ello.
¿Por qué no me había dicho Jake que hablaba con ella a menudo? Era incapaz de quitarme de encima el miedo a que se volviesen cada vez más cercanos, sin yo saber nada, y la sensación de que mi novio me estaba ocultando algo.
Por otra parte, la forma tan natural en la que Nina había mencionado que seguían en contacto me desconcertaba.
Cuídalo, ¿vale?
¿Qué significaba eso? ¿Que sabía de mi relación con Jake y la apoyaba? Nina había dicho que Jake le había contado sobre el día en el que fuimos a patinar juntos, y, no sé, en general, nada en su comportamiento me daba a entender que había algo más que amistad entre ellos.
Lo más probable era que mis inseguridades me estuvieran jugando una mala pasada, como siempre. A estas alturas ya debería haberme acostumbrado pero, al parecer, no era así. Si no, habría podido ocultar mejor mi incomodidad durante la última clase del jueves, la cual compartía con Jake.
—¿Estás bien? —Me preguntó en un susurro, para que la profesora no nos llamase la atención.
Ayer no cené y hoy no he comido nada en todo el día.
Aparté ese pensamiento de mi cabeza tan rápido como apareció.
—Sí, solo estaba pensando en el certamen —hice una mueca al mismo tiempo que jugaba con mi bolígrafo, apretando una y otra vez el botón que sacaba la punta de este.
Click, click, click.
A veces me sorprendía a mi misma cuando elaboraba mentiras tan creíbles. Me había salido con demasiada naturalidad; ni siquiera había tenido que pensarla antes.
—Lo harás genial, estoy seguro —sonrió.
Devolverle la sonrisa me costó más de lo que me gustaría admitir, lo cual me hizo sentir que estaba siendo muy injusta con él. No obstante, tampoco quería contarle la verdad sobre lo que me preocupaba. O, más bien, no quería que pensase que estaba siendo una novia celosa y exagerada, porque así era exactamente como me veía en esos momentos.
Nina era amiga suya; no había nada de malo en que siguiesen hablando. Me repetí eso una y otra vez mientras trataba de escuchar lo que fuese que la profesora estuviera explicando.
Click, click, click.
—¿Te apetece venir a mi casa hoy? Ya no nos quedan capítulos de Brooklyn 99, pero podemos buscar alguna otra serie.
Cualquier otro día habría aceptado sin pestañear. Pasar tiempo con él entraba de cabeza en mi top diez de cosas favoritas. Pero es que... ese día me veía incapaz de estar con él sin explotar y contarle todo lo que me preocupaba, y tenía miedo de darle más razones aún por las que alejarse de mí.
Más razones por las que Nina era mejor para él.
—He quedado con Sam —mentí—, lo siento.
Dios, odiaba mentirle. Odiaba mentir, y aún así lo hacía constantemente. Era una persona horrible.
Recé por que Samantha tuviera la tarde libre.
—No hace falta que me pidas perdón por eso —se rio—. Le pediré a Zoe que me recomiende alguna serie, de todas formas.
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Emily & Jake ✔️
RomanceDe la amistad al amor no hay solo un paso. Hay muros y barreras que hay que estar dispuesto a derribar o a dejar caer. ... Emily tiene un pasado que le gustaría dejar atrás, unos miedos de los que no le ha hablado nadie. A lo largo de los años ha id...