La oscuridad en tus ojos©

Capitulo 8: Luego de Medianoche

—Esos no fueron 15 segundos. —Vaya insulto a mi capacidad de contar números.

Moví mis manos queriendo soltarme de ese agarre en mi nuca. Odiaba que fuera más fuerte que yo. Probé otra táctica que era empujar su rostro. Apenas le rocé sus mejillas, malditos brazos largos.

—Quizás los conté lento... ¡Pero no estaba suicidándome! Ahora ¡Vete depravado! ¡Estoy bañándome!

Wolf pareció meditarlo provocando que un subidón de calor llegara a mi rostro. ¿Qué hice en mi vida pasada para terminar asi? Abandoné el apartarlo para cubrirme con brazos y piernas. Lo iba a matar.

—...Puedo verlo. —Su tono de admiración me dio repulsión y vergüenza.

—¡Largo!

Ataque mortal. Estiré uno de mis brazos hasta dar con su rostro. El aflojó su agarre un poco entre risas. Un aroma familiar cosquilleó en mi nariz.

—Estas bi... ¡Fuera Wolf!

¡Lorna! Mi salvadora. Entre quejas y abucheos el otro salió al fin del baño. No queriendo enfrentar a su hermana volví a hundirme en el agua que ya se sentía tibia. Él dijo que estuve más de 15 segundos. ¿Cuál sería realmente mi record? ¿Por qué se mostró tan raro? Su aura se sintió peor que del secuestrador.

Me elevé al comparar eso. ¡Era peor por el instinto de protección! ¿Acaso consideró mi presencia una amenaza? ¿Solo por bañarme? Qué raro.

—¿Te ayudo a bañarte? —Temblé tanto por el frio que tocaba mis hombros desnudos como también a la presencia repentina de Lorna— Veo que confundiste el acondicionador con el shampoo.

Necesitaría enfocarme en mis dudas cuando me deje sola la hermana de Wolf.

—¿Lo hice? Maldición... ehm, solo pásame los frascos, puedo bañarme sola. ¿Qué hacia Wolf aquí? —Aparte de espiarme.

—... Me hago la misma pregunta. Ese imbécil, si planeaba aprovecharse de ti en este lugar le cortare las que le cuelgan.

En su arrebato ella ya tenía sus manos en mi cabello masajeándolo con el shampoo, una acción desconcertante pero decidí dejarle ser. De ese modo se entretendría y me permitiría lavarme el resto rápido. Hubo un silencio cómodo entre ambas. Pocas veces se tiene eso con alguien por mucho que la conozcas o no.

Junto a todos los problemas que tengo se agregó uno más. La repentina amenaza de Wolf que se esfumó tan pronto como inició pero es algo que no olvidare. Mi presencia será más cuestionada ahora y eso me pone tensa. Era como si viviera entre enemigos en vez de aliados. Me agradaría confiar en cada uno si no lo hicieran tan difícil.

Otro arrebato de Lorna fue limpiar mi espalda y empezar a hablar de todo lo que necesito para mantenerme en forma según ella. ¿Me veré tan escuálida? Nunca creí eso, puede que no me mueva mucho más allá de caminar por la casa descalza o algunos estiramientos que aprendí de niña.

Mejor cambiar de tema.

—... ¿Qué hora es Lorna?

—Medianoche. Por estas horas la vigilancia es mayor a nuestros alrededores así que menos posibilidades tienes para escapar. —Sus movimientos pararon un momento— Que piel tan clara.

Retomo rápido su tarea sacando otra dubitación en mí. El tono de su afirmación sonó apenada. ¿Podría ser que le de envidia? No, no lo creo. Sera otra cosa.

En un rato me hecho agua terminando con el trabajo.

—Momento de dejar la bañera.

—Pero se esta hermoso aquí. —A pesar de mis hombros temblorosos.