T H I R T E E N

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Billie estaba nerviosa y emocionada a la vez, hoy era un día importante para ella y su carrera artística, los Grammys habían llegado. Yo iba como su acompañante y quizás estaba igual que ella, aunque sabía perfectamente que Eilish ganaría, estaba segura de ello.

Por la mañana vinieron a buscarnos en un lujoso y negro coche. Nos subimos en el y nos llevaron a un hotel de 5 estrellas, allí estaríamos todo el día para prepararnos para los Grammys.

La habitación era bastante amplia y tenía de todos los lujos necesarios.

- ¿Has visto la cama?- Pregunté asombrada tirándome a la amplia cama que era muy apetecible.

- Si y la estrenaremos esta noche si gano algo.- Me respondió subiéndose encima mía mientras ponía su sonrisa pícara.

La miré fijamente y acaricié su cuello suavemente, sabía que eso la volvía loca. Luego me incorporé y la besé apasionadamente. Billie accedió rodeando sus brazos por mi cadera, mis  manos seguían en su cuello y no tenía intención de quitarlas.

Hasta que tocaron a la puerta y nos separamos lentamente mientras nuestras miradas no podían dejar de verse. Ella me acarició los labios y se quitó de encima mía para abrir la puerta.

Justo cuando se fue me tumbé mirando al techo pensando hasta dónde habríamos podido llegar sino hubiera sonado el "toc toc" de la puerta.

- Rous, son mis padres, mi hermano y Claudia.- Me informó desde la puerta. Me levanté de la cama inmediatamente para recibirlos.

- Hola Rous, al fin nos vemos, llevábamos mucho sin verte.- Me saludó Maggie con una inocente sonrisa.

- Oh, siento mucho no haber ido a veros de verdad, estaba liada con el teatro y mis nuevos proyectos.- Les traté de contar mientras no paraba de tartamudear, todos soltaron una amistosa carcajada ante esto, yo solo sonreí.

- Hemos pensado que podríamos salir a comer por ahí para celebrar que Billie va a los Grammys.- Me informó Finneas mirándome sonriente. Todos en esa familia eran así de sonrientes, bueno, Billie no lo era tanto, ella era más de risas porque mal pensaba o por simple felicidad.

- Claro, esto hay que celebrarlo.- Aprobé sonriente la idea de la familia de Billie, en ese momento miré a Eilish y ella solo fingió que se reía de mi por la situación, ya que a mi no me gustaban mucho las comidas familiares porque siempre la cagaba.

Luego de un rato hablando con la familia de Billie, decidimos irnos ya a comer a algún restaurante de la zona, fuimos caminando hasta el, y fue una locura.

Nos cruzamos con 2 chicas que cuando se percataron de la presencia de Billie, comenzaron a gritar emocionadas y se acercaron a Billie para pedirle fotos y abrazarla, como esto pasó varias veces ese mismo día y yo no me sentía muy cómoda con tanta gente gritando y saltando de la alegría. Estaba de morros y algo aturdida.
Cuando Billie se dio cuenta de que yo no me sentía muy bien, me pasó su brazo por mis hombros y besó mi mejilla.

- ¿Qué te pasa?- Me preguntó sonriente.

- No es nada Bills, es solo que, ¿cómo aguantas que te pidan fotos cada dos por tres?- Le pregunté aun con el ceño fruncido.

- Porque son mis fans, les debo todo, sin ellos, no estaría aquí apunto de ir a los Grammys.- Me contó entusiasmada, cuando la vi, ella tenía una sonrisa hermosa en su cara y ahí entendí lo importante que era todo esto para ella, también sonreí con ella.

- Estoy tan orgullosa de ti Billie, mírate, empezaste con una canción y ahora estás nominada a 7 Grammys, eres la hostia.- La alague tan orgullosa y feliz que me podrían dar un premio por ello.

Moon // Billie Eilish & youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora