Moon // Billie Eilish & you

E L E V E N (T2)

Últimamente, el tiempo pasaba bastante rápido, todo desde que llegó el esperado momento de visitar a Charlie. 

Un día el Doctor, llamó al teléfono de Billie para darle la increíble noticia de que Charlie ya estaba preparado para recibir visitas.

Íbamos casi todos los días, el estaba radiante, cada día que pasaba junto a el lo veía más como me tenía acostumbrada a verlo, era mi hijo al fin... Estábamos tan contentas las dos.

Han pasado 3 semanas desde aquella noticia.

Me encontraba despierta en mi cama, pero sin levantarme ya que Billie estaba apoyando su cabeza en mi y no quería despertarla, aunque, puedo dejar de ser una estúpida y decir que no quería levantarme porque Billie se veía muy tierna ahí dormidita, me moría de ternura. Ni siquiera yo me creía que podría ser capaz de amar a la misma persona durante tanto tiempo y hacerlo como si fuese el primer día... Me asombraba. Pero era la realidad de mi día, yo amaba a Billie como nunca antes lo había hecho y no veo la posibilidad de dejar de hacerlo.

Mientras pensaba en ella, acariciaba su pelo con delicadeza. Era suave y siempre olía bien, jamás en todo este tiempo había olido el pelo de ella y había pensado: ''joder espero que se lo lave pronto''. Ella siempre tenía el pelo más hermoso del mundo. Aunque cuando comencé a vivir con ella entendí que no era fácil mantenerlo así, lo menos tiene como 4 champús distintos y todos con una función distinta. Yo literalmente tengo el primero que veo en la tienda y ya, me da pereza cuidarlo. Billie a veces me regaña cuando digo eso, incluso ha habido ocasiones en las que me ha echado charlas del cuidado del cabello, pero sigue sin compensarme.

Mis pensamientos desaparecieron cunado noté que Billie comenzaba a moverse levemente, está apunto de despertar.

Así fue, a los segundos ya estaba mirando para arriba y sonriéndome para darme los buenos días. 

- Buenos días cariño.- Me saludó mientras se acercaba a mis labios y me daba un corto beso en ellos, obviamente correspondí.

- ¿Has dormido bien?- Le pregunté mientras la miraba como se tumbaba a mi lado.

- Si, sabes que se duerme bien en tu pecho, te lo digo siempre.- Me recuerda mirándome sonriente.

- Uhum, y tu sabes que me ayuda a dormir que tu te duermas en mi pecho.- Ambas soltamos una carcajada, la cual fue interrumpida porque sonó el tono de llamada de Billie, ella lo cogió para saber de quien se trataba.

- Es el Doctor de Charlie.- Me informó antes de responder a la llamada.

Mientras hablaba por teléfono con el, yo estaba sobre pensando. Es que, podía ser tan bueno o tan malo a la vez que llamaran del hospital. Trataba de buscar la respuesta pero no tenía ni idea de que podría ser, ojalá no sea que está empeorando otra vez y fue por culpa de las visitas. No me lo perdonaría.

- ¿Es en serio?- La escuché decir bastante emocionada, de repente agarró mi brazo y lo agitó con esmero.

- ¿ Qué te está diciendo? ¿Es bueno? ¿Qué pasa?- No paraba de preguntarle esas cosas mientras intentaba averiguar lo que que estaba pasando descifrando las expresiones de Billie.

Al rato colgó y comenzó a saltar en la cama.

-Para de saltar y dime que fue lo que te dijo el Doctor.- Le ordené muerta de la intriga mientras miraba como saltaba desde abajo.

- Seguro que vas a querer saltar tu también cuando te diga que Charlie está en condiciones para volver a casa, ¡le dieron el alta!- Me contó muy emocionada, yo grité bastante feliz y efectivamente también salté junto a ella mientras estábamos agarradas de la mano.