𝔸𝕞𝕠𝕣 𝕤𝕚𝕝𝕖𝕟𝕔𝕚𝕠𝕤𝕠•ShikaNaru•🍂

Capítulo 11: Felíz no cumpleaños.

🌾 Shikamaru 🌾

Los meses habían pasado rápido y el mes de octubre ya casi comenzaba. Me permití pensar brevemente que aún no sabía que regalarle a Naruto para su cumpleaños, que estaba a la vuelta de la esquina.

Sentí un ligero apretón en mi mano, que compartía con mi precioso compañero, y regresé la mirada hacia él, observando como tenía tendido el cuaderno, que por cierto había sido regalo de mi madre y tenía estampado de unicornios, frente a mí desde hace vaya a saber cuánto. Lo tomé con cuidado y leí.

"Mamá peleó con papá ayer durante la cena, están muy estresados por la falta de dinero. Me siento un poco culpable, el tratamiento no es nada barato."

Sentí ese dolor en el pecho que ya se me hacía conocido. Últimamente las cosas en la casa de Naruto no estaban bien. A Minato-san le habían recortado las horas laborales por falta de dinero en la empresa en la que trabajaba y eso significaba menos paga para él. Kushina-san no podía hacerse cargo de todos los gastos, que por cierto eran mucho, por su cuenta. Si bien habían comprado la casa, los servicios que debían pagar eran de precio elevado por culpa de la zona en la que vivían. Casi en el centro.

Más de una vez había tenido al rubio entre mis brazos intentando calmar su llanto por culpa de la complicada situación. Mamá también lo había consolado más de una vez, hasta se había ofrecido a hablar con los padres del menor para ver si podía ser de alguna ayuda. Sin embargo, Naruto se había negado rotundamente, alegando que las cosas estaban un poco tensas en casa aún. Mamá prometió no meterse a menos que fuese totalmente necesario, y ambos habíamos acordado que lo era.

Aunque no queríamos hacer enfadas a Naruto, mi madre y yo mismo habíamos estado hablando hace unos días de ofrecerle a la familia Namikaze-Uzumaki un apoyo económico. No sería algo que a mi familia le costase, gracias a la buena posición que con años de trabajo mis padres habían conseguido. Además, papá a estado inquieto con la situación de 'Naru', como el mayor le llamaba cariñosamente. El rubio sin duda alguna era su consentido, y es que con los meses que habían pasado, Naruto fue reiteradas veces a casa y mi padre no pudo evitar el encariñarse con el pequeño y atolondrado rubio. Claro que el cariño era mutuo e incluso Shikaku le había permitido al menor que le pusiera un apodo; Shiku.

"Lo lamento, estaba pensando. Con respecto a tus padres, quizás las cosas mejoren pronto. Ya te dije que no debes sentirte culpable por eso, no es culpa tuya. Ellos se aman, solo están estresados."

Naruto leyó la nota con un pequeño brillo de esperanza en sus ojitos celestes, que me encargué de besar hasta que la sonrisa volvió a pintar sus labios. Lo besé con cariño, dejando reposar mis labios sobre los suyos algunos segundos, permitiendo sentir la sonrisa que emergió de él.

Acaricié sus mejillas rojas y tomé nuevamente su mano para dirigirnos a la cafetería, era la hora del almuerzo.

                             [...]

-... Sé que prometimos no entrometernos a menos que las cosas pasen a mayores, pero los padres de Naruto cada vez están peor, él está peor. Si podemos ayudarlos ahora ¿Porque dejar que se sigan estresando por algo que tiene solución?- miré a mi madre con algo de enojo, se estaba negando a ir inmediatamente a hablar con la familia Namikaze-Uzumaki. Creía que lo mejor era esperar.

- Entiendo como te sientes, Shikamaru. Pero no podemos simplemente ir allá y decirles a esas personas que queremos pagar sus gastos, podrían sentirse ofendidas. Además, nisiquiera nos conocemos personalmente. Hablando con sinceridad, me siento una mala madre, Naruto a sido tu amigo desde hace casi un año y aún no conozco a sus padres.- acaricié su brazo con cariño, regalándole una sonrisa a la triste mujer.