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-Bueno, eso es todo clase, pueden retirarse- dijo el profesor mientras guardaba sus cosas

Cómo si fuera una carrera, todos los estudiantes guardaron sus cosas en tiempo récord para salir de allí y escapar de los números de las matemáticas.

Tratando de seguirle la corriente a los demás estudiantes comencé a guardar mis cosas pero a mitad de esto mis manos empezaron a temblar sin razón alguna, y mis instintos decían que alguien estaba en problemas, así que deje que ellos se apoderaran de mí y me guiaran.

Corrí lo más rápido que pude, a velocidad humana, y abrí las puertas del gimnasio justo en el momento que una chica estaba teniendo una convulsión mientras escalaba el muro, viendo que no iba a llegar corriendo como humana, utilice mi velocidad de vampiro para llegar a tiempo y agarrarla. Una vez que la tuve segura en mis brazos la puse suavemente en el piso.

-¡Ponla de lado!- gritó alguien detrás mío.

-mierda...- susurré al ver lo cerca que estuve de que los otros adolescentes me vieran desaparecer y aparecer en otro lugar.

Rápidamente hice lo que la chica me gritó y la trate de sostener fuerte, pero Scott llegó a un lado mío y me corrió un poco para agarrarle las manos y sostenerla él.

-¿Cómo llegaste tan rápido Ma...- preguntó Stiles antes de que le tape la boca para que no diga mi nombre

-Yo... Solo pasaba por aquí cuando escuché un ruido- contesté mintiendo tratando de regular mis latidos para que Scott no los escuchará alterados- ¿¡Alguien puede llamar a la maldita ambulancia!?

[...]

Después de que uno de mis compañeros por fin llamó a la ambulancia, se llevaron a Érica y nos hicieron volver a nuestras respectivas clases, en dónde tuve que aguantar las miradas del dúo dinámico en mi nuca.

A la salida del instituto recibí un mensaje de Derek ordenándome que me apurara a llegar a las vías abandonadas, que debíamos ir a un lugar urgentemente.

-Wow que buen amigo que tengo, ni siquiera un "¿Cómo estuvo tu día?"- murmuré viendo el mensaje de texto- bueno, tendré que comenzar a caminar si quiero llegar rápido- hable para mí misma

-O te podríamos llevar nosotras- dijo con una sonrisa Allison apareciendo de la nada con la rubio fresa causando que brincara del susto, a lo que ellas rieron- perdón

-bueno... ¿Te llevamos?

-Claro, me harían un gran favor- sonreí- por cierto, nunca me dijiste tu nombre

-¡Cierto! Soy Lydia, Lydia Martín, un gusto conocerte Madison- sonrió mientras enganchaba su brazo con el mío- Alli me dijo tu nombre

-Bueno chicas, menos cháchara y más caminar al auto, tengo que llegar temprano a casa si no quiero que mi padre me castigue peor- hablo Allison yendo hacia, lo que creo, era su auto- Entonces ¿Dónde vamos?

A Hybrid in Beacon HillsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora