Take Me To Another World (L.T.)

~Capítulo Veintisiete: "Eres un amor"~

Louis Tomlinson

- Hola bailarina.-dije cuando llegó a mi lado. Sonrió.

- ¿Qué haces tú aquí? –dijo.

- ¿Esas son formas de saludar? –dije riendo después.

- Tienes razón. Empecemos de nuevo.-dijo volviendo a entrar en el aula. Salió de nuevo, acercándose a mí.- ¡Hola Lou! –me saludó sonriendo dándome después un beso en la mejilla.

- Hola bailarina.-repetí y reímos los dos.

- ¿Esto lo ha visto alguien? Porque si es así van a pensar que estamos mal de la cabeza.-dijo ella entre risas.

- Creo que por suerte no.-dije.

- Ahora en serio, ¿qué haces tú por aquí? –preguntó mientras empezábamos a caminar por el pasillo, hacia la salida supongo.

- Vine a ver cómo estabas.-Me miró extrañada.- Y no me mires así, sabes por que lo digo.-puso los ojos en blanco.

- Otro igual, ¿no podéis dejar el tema? –dijo algo molesta.

- Si no lo dejamos es porque queremos que estés bien.-

- Estoy bien.-afirmó.

- Vamos Mel, no lo estás y no quieras disimularlo.-dije y se paró a mirarme cuando llegamos al final del pasillo.

- No te irás hasta que no te lo cuente, ¿verdad? –Asentí con la cabeza y resopló.- Entonces mejor que vayamos a algún sitio a tomar algo.

- Donde quieras.-contesté

Andamos durante un rato por la facultad hasta llegar a la cafetería. Pedimos un refresco cada uno y nos sentamos en una mesa.

- ¿Y bien? –dije esperando a que empezara a hablar. Bebió un sorbo de su vaso antes de comenzar a contarme lo que había pasado.

- El caso es que ayer estábamos genial, estuvimos todo el día juntos paseando por la ciudad.-Mel, creo que esta parte te la podías haber ahorrado.- y cuando fuimos a la estación, al ir a despedirnos hizo un comentario que no me gustó nada.-

- ¿Qué te dijo? –pregunté.

- Pues le dije que le echaría de menos y su contestación fue “no creo que te de mucho tiempo con tus nuevos amigos” y bueno, puedes imaginarte que ahí empezó toda la discusión.-suspiró.- ¿sabes? Dijo cosas que me dolieron demasiado.-agachó la cabeza.

- Eh, Mel, no te preocupes.-cogí su mano y me miró.- Todo se arreglará, ya lo verás.

- Es que ya no sé si quiero que se arreglen las cosas entre nosotros.-hizo una pausa y la miré pidiendo que me explicara lo que acababa de decir.- Le quiero, no te lo voy a negar pero en una relación a distancia la confianza es lo más importante.-la escuchaba con atención.- y ayer demostró que no confía en mí.

- Quizás solo fue un arrebato de celos.-dije.

- Celos de vosotros, de mis amigos.-negó con la cabeza.- me pidió que me alejara de vosotros cinco, de Liam que lleva siendo como mi hermano toda la vida.-me miró y sonrió.- no voy a permitir que nadie me separe de mis amigos aunque eso signifique tener que perderle a él.-Iba a decir algo más cuando sonó su móvil.-

- ¿Es él? –pregunté y asintió.

- Dice que vendrá el sábado, quiere arreglar las cosas.-dijo.

- Lo ves, seguramente se arrepienta de haberte dicho todo eso ayer.-le sonreí.

Louis, ¿se puede saber qué te pasa? Se supone que tendrías que alegrarte de que las cosas entre ella y su novio fueran mal, así al menos tendrías una oportunidad. No, no puedo alegrarme por eso porque significaría verla a ella mal y lo más importante es que ella esté feliz, contenta.

- A lo mejor tienes razón.-sonrió también bebiendo el último sorbo de lo que quedaba en su vaso.- ¿Y tú qué?

- ¿Qué de qué? –dije y ella rió.

- Que qué tal de amores, digo.

- Pasopalabra.-dije y reímos.

- Venga, yo te he contado lo mío, te toca a ti.-dijo mirándome.- ¿Hay alguna chica? – Claro que la hay, es más, la tengo en frente.

- Hay una chica, sí, pero es algo imposible.-contesté.

- ¿Imposible? No hay nada imposible, Lou.

- Tiene novio y eso es un obstáculo de los gordos.

- Es cierto, entonces es complicado pero no imposible.-me dedicó una sonrisa y después miró el reloj.- Tengo que irme, las chicas estarán preguntándose donde estoy.

- Claro, te acompaño.-

Nos levantamos y salimos de la cafetería. Fuimos hablando mientras caminábamos hasta la puerta de su habitación.

- Gracias por haber venido.-sonrió.

- No las des.- “Solo por ver esa sonrisa ha merecido la pena” le hubiera dicho. Se acercó a darme un beso en la mejilla.

- Y no te preocupes, conseguirás a esa chica, eres un amor.-susurró en mi oído y sonreí.

- Cuídate y saluda a las chicas de mi parte.-dije y después de verla entrar en su habitación, salí de allí.

Victoria Gray

Mientras Mel había ido a su primera clase de baile, Anne, Gabriella y yo nos habíamos quedado en nuestra habitación charlando de todo un poco. Nos extrañaba que Melanie tardara tanto en volver, en realidad, hacía una hora que debería haber vuelto pero no le dimos mucha importancia. Cuando al rato, entró en la habitación.

- ¿Dónde andabas? –preguntó Anne.- Creíamos que la clase duraba solo dos horas, no tres.

- Y dura dos horas.-contestó.

- ¿Entonces? –dijo Gabriella.- Éstas ya pensaban que te había pasado algo.-rió.

- Venga, Mel, hay que sacártelo todo con sacacorchos.-dije.

- Louis vino a verme y estuve hablando con él desde que salí de clase.-dijo sentándose en su cama.

- Uh, aquí hay algo entre vosotros dos.-dijo Anne.

- No hay nada de nada, solo quería saber cómo estaba.

- ¿Quieres que nos creamos eso? –continuó.- Pues no cuela.

- Es en serio, hemos estado hablando, nada más, le he contado lo que pasó ayer con Jake.

- Muy bonito, a él si y a nosotras no.-dije haciéndome la ofendida.

- Os lo contaré.-dijo Mel.

- Chicas yo creo que mejor me voy a mi habitación.-dijo Gabriella. Seguramente se sentiría algo incómoda porque tampoco sabía de qué hablábamos.

- No hace falta Gab, ahora eres del grupo, ¿no? –dijo Mel y Anne y yo asentimos con la cabeza.- Quédate, entre nosotras nos lo contamos todo.-dijo.

- Sí, aunque algunas a veces se hagan de rogar.-dijo Anne y reímos.

Y empezó a contarnos el porqué había venido así de su día con Jake. A mí, personalmente me parece fatal que te hagan elegir entre la persona de la que estás enamorada y tus amigos, es algo muy egoísta por su parte.

En cuanto terminó sonó mi móvil. Zayn.

“Estoy esperándote en el aparcamiento de la residencia. Tenemos algo pendiente, ¿recuerdas?”

- Bueno chicas, creo que yo sí que me tengo que ir.-dije levantándome y abriendo el armario.

- ¿Zayn? –preguntó Anne. Asentí.-

- ¿Me cambio de ropa? –pregunté. No sabía qué hacer.

- Yo digo que así estás muy guapa.-dijo Mel sonriéndome.

- Entonces será mejor que no le haga esperar más. Deseadme suerte.-dije abriendo la puerta.

- ¡Suerte! –dijeron las tres a la vez y antes de salir escuché que Anne le decía a Gab “no te preocupes, ahora te ponemos al día con lo que pasó ayer”.