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NARRA MÓNICA

Despertarme en la cama de Vanesa era un verdadero placer, pero ver que no estaba a mi lado me sorprendió. Me giré hacia la mesita y al ver que tampoco estaba mi móvil me levanté. Caminé por el pasillo hasta llegar al salón donde ví a Vane en el balcón fumando un cigarro y con mi móvil en la mano

-¿Qué ha pasado?- dije quitándole el cigarro de la mano y apagándolo en el cenicero

-Buenos días- dijo dándome mi móvil y un pequeño beso en la mejilla

-Ha llamado Claudia, quizás no debería haberlo cogido sin tu permiso pero ni siquiera miré quien era, no quería que el sonido te despertara, perdóname.

-La llevaba ignorando cada vez que me llamaba desde que lo dejamos

-Te he metido en un buen lío creo- dijo bajando su cabeza hacia el suelo

-¿Ey porqué dices eso? Ya ha visto que he rehecho mi vida y me dejará en paz

-No creo, se ha puesto muy agresiva. Ha dicho que me olvide de ti y que la próxima vez que te vea no van a ser solo miraditas.

-Ahora entiendes porqué le tengo miedo verdad

-Voy a ser tu sombra, no te voy a dejar sola en ningún momento

-Pero también me da miedo que te pueda hacer algo a ti, si lo nuestro va enserio que mas te vale que vaya enserio porque yo enamorada soy muy pesada y no me voy a conformar si me dices que no. Pero bueno que si ve que estoy con otra persona que no sea ella va a intentar hacerte daño.

-Bueno pero piénsalo, sabe que estas con alguien pero no que soy yo, por mi no te preocupes. Además tengo la conversación gravada, puedes poner una orden de alejamiento

-Mi hermano me dijo eso desde el primer momento pero es que no me apetece nada esta movida de jueces y abogados.

-Bueno yo podría ayudarte pero ahora olvídate de todo, desayunamos y te llevo al trabajo

-Debería de estar en el trabajo desde las 9:30, me va a caer una buena bronca

-Solo pasan 10 minutos, venga vístete y te llevo .


Vane me dejó en los informativos dónde me esperaban unas largas horas de reunión y me hizo prometerle que quedaríamos esta tarde con mi hermano para hablar sobre el tema de Claudia.

Tras aguantar los chistes de Matías sobre mi muleta y sobre mi chófer de esta mañana acabaron los informativos y Jesús, mi hermano, vino a buscarme para dirigirnos a dónde habíamos quedado con Vanesa.

-¿Cómo están mis chicos?- le pregunté a mi hermano sentándome en el asiento del copiloto

-Estoy muy orgulloso de ellos, unas notas espectaculares este trimestre y por fin veo a Vega feliz tras lo de su madre

-¿Lleva bien el fútbol?

-Le encanta

-Jesús, no es para tanto no estés así de serio

-Moni no me hace gracia que te vuelvan a hacer daño

-Vanesa es diferente, ya verás cuando la conozcas, ha sido idea suya lo de la orden de alejamiento

NARRA VANESA

Al despedirme de Mónica me vino a la cabeza Pongo, todos los buenos momentos vividos junto a el me ocuparon la mente y no pude evitar ponerme a llorar. Me parecía increíble la capacidad de Mónica para distraerme de el tema y por supuesto yo la iba a ayudar con su problema.

Vanica - Frenar EneroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora