QUÉDATE A MI LADO ~JONGKEY~

IV. HEXÁGONO

[01 Abril de 2018, USA]

—La mujer con la que estoy comprometido de llama Jenifer, la hermana de Sara.

Jonghyun se quedó sin palabras.

—No quiero que te cases con alguien que no sea yo.

—Era joven y estaba perdido —Kibum dijo—, solo dame algo de tiempo para solucionarlo.

—Prométeme que no te casarás con ella —Jonghyun solicitó desde su lugar sintiéndose como un cachorro abandonado.

—No puedo prometerte nada —Kibum tomó la toalla y se dirigió a la salida—, solo te prometo que siempre serás el número uno en mi corazón.

¿Por qué esas palabras dolieron como el acero hirviendo en su pecho?

—¿En serio terminaste conmigo? —Se cuestionó Jonghyun al quedar solo en la habitación.

Unas horas más tarde Jonghyun se encontraba sentado solo en los jardines, no podía digerir lo que Kibum le había dicho antes.

La brisa pasaba suave, generalmente sería un día agradable, pero para él, era un día tormentoso.

¿Cuántas pruebas más tendrían que pasar para poder estar juntos?

—¿Ya te enteraste? —El presidente Kim, abuelo de Kibum se acercó a él.

—¿Presidente?

—¿Ya te contó todo Kibum? —El anciano se sentó junto a él.

—Me dijo del compromiso y las cláusulas —Jonghyun agachó la mirada.

—Estoy dispuesto a perder una de mis empresas si es por el bien de mi nieto, pero hace poco me enteré que el Presidente Lewis no tiene intención de conservar la empresa, si no que quiere cerrarla para tener más mercado para él, lo que significaría que más de mil quinientos empleados se quedarían sin sustento, de algún modo Kibum lo averiguó, y ahora se siente obligado a cumplir con el compromiso.

—¿Va a casarse con alguien que no soy yo?

—No lo sé, eso depende sólo de él —El presidente se apoyó en su bastón para levantarse.

—No quiero que se case con nadie más que no sea yo —dijo Jonghyun mirando los lirios del jardín.

El presidente suspiró, tampoco quería que su nieto se casara con alguien a quien no amaba, y menos teniendo al amor de su vida a su alcance.

—Creo que tienes otro asunto que arreglar antes de pensar en casarte con mi nieto —El presidente Kim dejó en manos de Jonghyun el periódico con el titular de la mañana—. Dije claramente que no quería escándalos antes de la boda, durante o después.

—¡Lo siento mucho! —Jonghyun se levantó de inmediato y se inclinó ante el hombre, se sentía realmente avergonzado—, ¡Me aseguraré de solucionarlo!

El presidente simplemente suspiró.

Amaba a su nieto, y ciertamente le tenía mucho cariño a Jonghyun, pero siempre se había prometido no meterse en los asuntos personales de Kibum, sólo una única vez lo había hecho para evitar aquel compromiso, y al final las cosas no habían salido como quería.