-¿Esta es tu casa? -TaeHyung veía el pequeño apartamento de su Hyung, peso suponía que era cuando el mayor había dado seguro al taxista una vez subieron a este.
-Sí. -Susurró Jimin. Se sentía tan ridículo, como un niño pequeño avergonzado y con pánico por lo que iba a pasar ahora que se había acercado tanto a su caramelito.
-¿Estás...? -Tae encaró al mayor, observando con una tranquilidad envidiable el cuerpo ansioso de Jimin. -¿Te estás arrepintiendo? -Jimin entendió a la perfección lo que el castaño le preguntaba así que negó con su cabeza.
-Lo único que hago es no arrepentirme de haber provocado que dejaras el lado de Eunwoo para que estés ahora aquí conmigo. -La gran sonrisa, que Jimin denominaba idiota, surgió en el menor; ambas filas de dientes perfectamente mostradas. -¿Por qué no estás nervioso?
-Porque llevo mucho tiempo queriendo escuchar algo así de ti Hyung. -Tae adelantó su paso queriendo volver a abrazarlo, sin embargo se detuvo a unos pasos del mayor. -Minnie Hyung, yo quiero que estemos juntos. -Jimin ladeó una sonrisa enternecido y, sabiendo lo que deseabas el menor, rompió la distancia entre ambos abrazándose de nuevo al tronco del menor.
-Para que eso ocurra debemos hablar primero. -TaeHyung rodeó su espalda y acarició la cabellera azabache del mayor con cariño. -Después podremos decidir si iniciar algo o no Tae.
Jimin los separó, colocó sus manos en el pecho del más alto y empujó suavemente su cuerpo hasta hacerlo sentar en el sofá; después no dudó ni un segundo en sentarse sobre su regazo a horcajadas.
-¿Quién empieza? -Preguntó en un murmullo el castaño. Lo haría, hablaría de lo que sea con su Hyung adorado, por muy doloroso que fuera.
-Yo lo haré, quiero que entiendas un poco lo que he estado haciendo y diciendo. -Jimin bajó su vista a sus manos entre su cuerpo y el del menor. -Igual te debo unas disculpas porque, mi "problema", no es justificación para haberte hablado tan mal.
-¿Por qué no hablamos primero y entonces decido si quiero esas disculpas? -Las grandes manos morenas acicalado el cabello lacio negro fuera del rostro del mayor.
-Sufro Hafefobia. -Comenzó Jimin. -Eso significa que no puedo soportar ser tocado por nadie. -Tae lo miraba fan serio y concentrado, parecía que lo animaba a seguir estando concentrado a sus palabras. -Cuando tenía 4 años volvíamos de un viaje en carretera, tuvimos un accidente sin real importancia. -Jimin, irónicamente, recordaba perfectamente todo lo sucedido como el peor caso de su vida. -Nam y yo íbamos en la parte trasera del coche y quedamos atascados entre los metales por más de dos horas. -La sensación de las manos de su hermanastro, sin malas intenciones, tanto tiempo puestas sobre él que no se podía mover fueran las causantes de su trauma irremediable. -Nam tiene fobia a la oscuridad completa, yo no soporto que me toquen. -Tae, de manera automática, alejó sus manos del mayor pero este las devolvió a su rostro con delicadeza. -Con el tiempo aprendí a controlarlos, para tener una denominada vida normal. -Una sonrisa tierna fue el culminante a su explicación. -Pero que tú me toques es relajante de manera absurda.
Tae sonrió enternecido, deseando volver a besar a su Hyung como aquella noche que se conocieron. Bueno, no así, sino más tierno y delicado. Aún así se contuvo ante las nuevas noticias recibidas, era algo que tenía que procesar, lo último que quería era asustar a su algodón de azúcar y perderlo.
-Yo, lo mío no es tan así. -Susurró todavía conectando sus miradas, acariciando esa suave piel de sus mejillas mullidas. -Yo tan solo era un niño muy nervioso que sacaba de quicio a sus padres, porque unos días parecía tener una batería interminable y otras estar bajo cero. -Una mueca ladeada fue dada por ambos. -A los seis me diagnosticaron bipolaridad; imagina mi infancia con pastillas y psicólogos.
-Las pastillas no, los psicólogos sí. -Murmuró el mayor dejando un suave beso en la palma que reposaba en su mejilla derecha.
-A mamá no le gustó y se fue. Desde entonces siempre hemos sido papá, Yoonie y yo luchando contra los cambios drásticos en mis sentimientos. -Finalizó, llevando ahora sus dedos a los pendientes en las orejas de Jimin.
El mayor inclinó su cabeza de lado y se dejó caer sobre el pecho ancho del más alto. Sus brazos rápido enredándose al igual que hicieron sus piernas cuando Tae se dejó caer tumbándolos a ambos en el sofá.
-Voy a cuidar de ti Tae.
-Y yo de ti Hyung.
La maravillosa sensación cálida de lo correcto inundando sus cuerpos, almas y miedos.
🍭🍬🍭
Nota: Empezamos a sentir el amor 😍❤️
ESTÁS LEYENDO
Caramelo ~ VMin (Kim TaeHyung y Park Jimin)
Fiksi PenggemarSinopsis: TaeHyung siempre ha estado solo cuando él solo quería amor, siendo un niño con problemas emocionales que incluso su madre abandonó de pequeño junto a su esposo. En su vida el castañito solo ha podido contar con su padre, SeHun, y su mejor...