Donde SeungMin vive con JiSung por una apuesta.
❌Actualizaciones lentas.❌
❌Esta historia NO ES MÍA❌
❌Adaptación de Partner || Hwang HyunJin por @3fachas❌
SeungMin; 22 años. «Top»
JiSung; 20 años. «Bottom»
Fecha de inicio: 19/03/20
Fecha de finaliza...
— ¡No puede ser! — gritó SeungMin desde el sillón. — No pasaron ni 24 horas y JungWoo ya quiere ver a Kami de nuevo. — la perrita se encontraba sobre su regazo, y cuando escuchó su nombre, se volteó y miró al dueño de la voz, quien le sonrío y siguió acariciando su cabeza. — Le mandé todas las fotos que me pidió, comiendo, durmiendo, ¡incluso yendo al baño, JiSung!
El muchacho rió desde la cocina, donde se encontraba sentado comiendo mientras hacía tarea.
— Ya, ya. Pobre JungWoo, debe estar preocupado por ella. Quizás no confía en ti para cuidar a otro ser humano, amor.
— ¿¡Qué!? — dejó a Kami sobre el sillón y fue dando pasos largos hacia el chico. Le abrazó por la cintura, y con cuidado de no lastimarle, le elevó mientras le hacía cosquillas en la panza. — Yo sería la mejor persona del universo cuidando a alguien más, JiSung.
— Sí, sí. — respondió entre risas hasta que Kim le bajó. — Si tú dices, SeungMinnie.
Se acercó a él y rodeó su cuello con sus brazos, como si de una obra de arte se tratase. Sus narices se rozaron, y cuando SeungMin le empujó contra él, dejó en sus tiernos y rosados labios un corto beso.
— Te quiero.
JiSung rió y no dijo nada, estaba seguro de que el castaño sabía cuanto lo quería.
— Estaba pesando... — comenzó a hablar sin separarse de él. — ¿Y si invitamos a JungWoo para que esté con Kami? También me gustaría invitar a ChangBin y a HyunJin para que la conozca; además, hace mucho que no los veo.
— Sí, está bien, príncipe. — clavó sus ojos en él y le sonrió. — Pero te toca cocinar.
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El timbre hizo que Kami comenzase a ladrar y SeungMin se vea obligado a agarrarla entre sus brazos para calmarla, y JiSung fue a abrir la puerta, encontrándose con su amigo pelinegro y al de pelo largo con coleta con los ojos vendados.
— ¿Por qué no puede ver nada? — preguntó el chico extrañado.
— ¡Sabía que vendríamos acá! — gritó HyunJin, saltándose del agarre de Seo. — ¡JiSung, sálvame!
Los ojos del más bajito se clavaron en el muchacho, mirándole con cierto enojo.
— Ya, ya, perdón. — se disculpó sacando el pañuelo de los ojos de su amigo. — ¿Por qué no podía ver?
— Es que, no le dije nada de...
La explicación de ChangBin se vio interrumpida por un grito de HyunJin.
— ¡Qué bonita perrita! — exclamaba seguidamente agachado frente a Kami, quien solo lamía el jean de la rodilla de Hwang. — No sabía que tenías una, JiSung. ¿Cómo se llama?
No hizo falta que él contestase, puesto que SeungMin se le adelantó.
— Es Kami.
— Oh. — levantó la vista, encontrándose con la tierna vista del castaño en él. — G'day mate! JiSung me dijo que estuvieron estudiando inglés.
Kim rió y ChangBin miró con ojos dulces a su novio.
— ChangBin. — habló JiSung. — deberías conseguirle un perrito a Jin, se ve como un bebé súper feliz.
— Oh, sí, ¡por favor, Binnie! — el coreano sonrió muy feliz, sacándole un suspiro al pelinegro más bajito.
— ¿No te alcanza conmigo? — preguntó intentando parecer molesto, sin éxito.
— No. — respondió inocentemente. — Quiero un perrito, hyung.
El mayor rodó los ojos y SeungMin rió y abrazó a JiSung por la espalda muy suavemente, apoyando su mentón en el hombro del chico mientras acariciaba su abdomen.
— ¿Se acuerdan de JungWoo? — indagó sin separarse de su novio, y cuando los dos invitados asintieron, prosiguió. — Va a venir hoy también.
Ambos chicos sonrieron, dando a entender que no tenían problema de pasar el cumpleaños de HyunJin con alguien más, al contrario, a este le hacía mucha ilusión hacer nuevos amigos, y a Seo le divertía ver feliz a su compañero.
🦄🌸🦄
Tres chicos se sentaron en el sillón a charlar de cualquier cosa, dejando sonar la música que JiSung había puesto de fondo sin prestarle mucha atención.
El muchacho dejaba varias compoteras con camida sobre la mesa de la sala de estar, unas latas de gaseosa, y servilletas para limpiarse las manos. Escuchaba las risas de sus amigos y la de SeungMin mezclándose y sentía que no podía ser más feliz; el hecho de que una de las personas que más amaba le llenaba cada espacio del corazones, provocando que él también riese.
Cuando iba a sacar la pizza del horno, el timbre sonó, y para no molestar a su novio, él fue lo más rápido que pudo. Cuando abrió la puerta, se encontró a quien esperaba, JungWoo.
— Hola, JiSung. — exclamó entregándole una bonita sonrisa. — Tiempo sin vernos.
— Lo mismo digo. Pasa, por favor.
El chico le entregó una bolsa con tortas individuales cuando se adentró en el departamento.
— Son para el postre, y para HyunJin, por su cumpleaños.
— Oh, muchas gracias, JungWoo. — rió tímidamente. — Pero no tenías que preocuparte.
— Era mi deber como invitado de última hora.
El chico le sonrió una vez más, ambos estaban cansados de sonreirse tanto; un momento definitivamente incómodo. Ambos eran de pocas palabras, así que no sabían exactamente qué decir.
— Seguro estás muy ansioso por ver a Kami. Está en el sillón, con SeungMin.
Kim asintió y se dirigió a donde se encontraba su amigo y la parejita invitada. Saludó a todos muy amablemente, y sus ojos brillaron al ver a su perrita durmiendo plácidamente sobre las piernas de HyunJin, mientras este le acariciaba muy suavemente, como el pequeñito ser indefenso que era.
JungWoo suspiró aliviado, al menos Kami no estaba en las peligrosas e irresponsables manos de SeungMin. Le resultó muy tierno como aquél chico pelinegro con el cabello como si fuese un casco miraba al de su lado, tan lleno de amor y ternura, como si fuese un ángel caído del mismísimo cielo. Demasiado tierno para Kim JungWoo.
🦄🌸🦄
Luego de que JiSung llevase la pizza a donde estaban, todos comieron mientras contaban chistes y se reían muy ruidosamente según JungWoo, pero igual estaba divirtiéndose.
Lo que parecía ser una escena sumamente divertida, y una genial cuenta atrás para el cumpleaños de Félix, se vio interrumpida por un timbrazo que no se calló hasta que JiSung abrió la puerta.
Faltaban solo dieciséis minutos para que den las doce, y ChangBin, HyunJin y el chico estaban muy entusiasmados. El timbre los sacó de aquel momento de disfrute y JiSung se levantó a abrir la puerta, un tanto molesto por el constante timbre.
— Oh, dios mío.
Fue eso lo único que dijo, al parecer la noche sería muy larga.