Capítulo 8

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SUS OJOS

— "Muy bien, ya llego el amigo favorito de todos"

El salón del trono quedo en total silencio o eso era lo que se esperaría, de no ser por las pequeñas risas de la princesa Elizabeth. La pobre no pudo aguantar al ver al ahora Duque comportarse como si estuviera en su casa, y los demás presentes al oír las risas de la joven, se unieron a ella, además todos ya habían perdido ante la escena del épico ingreso del peli-celeste y es que quien podía resistir ante las ocurrencias de este divertido joven y más aún cuando el humor había vuelto a sus vidas, pero claro siempre acompañado de un aire melancólico. Todos los presentes sabían del motivo de la tardanza del joven, y es que no era un secreto para nadie que el ahora Duque visitaba el campo de hermosas rosas y flores azuladas que en el centro llevaban la lápida de Jericho. Punto en el que había sido visto todos los días sin ninguna falta, durante año y medio. Pero ahora todo el mundo agradecía la entrada cómica de su amigo y solo podían observarlo con una sonrisa y saber que estaba bien.

— "Buenos días Ban, o debo llamarlo Duque Cearbhall Ban de Benwic" — jocoso, Meliodas fue el primero en hablar e incurse delante de su amigo.

— "Tonterías" — replico con igual complicidad. — "Yo debería ser el que se incline ante usted, ¡Oh futuro rey de Liones!" — exclamo lleno de burla.

— "Oh cállense los dos" — Intervino Merlín, la cual ya estaba elevando la esquina de su labio derecho formando una media sonrisa.

— "Pero Merlín, se iba a poner mejor" — fue el tono acusador de King, el Rey Hada se encontraba de brazos cruzados al saber que su diversión había sido cortada.

— "Chicos, chicos tranquilos" — "calmo" Elizabeth, con aquella dulce voz — "ya habrá momento para reír"

— "Concuerdo con la princesa, es mejor terminar la reunión y así cada quien puede ser libre irse" — hablo con tranquilidad Escanor, quien llevaba unos documentos acerca de los viñedos y necesitaba la ayuda de la Señorita Merlín.

— "Entiendo" — Ban soltó un suspiro algo cansado. — "Entonces prosigamos con la reunión que interrumpí con mi llegada"

Ante el notorio cambio de actitud a una mas seria por parte del ahora Duque, todos procedieron a sentarse y la alegría que había inundado hasta hace unos momentos, se desvaneció y dio paso a una seriedad, pero una que reflejaba la calma y tranquilidad de los presentes. Nada incomodo en opinión de Gowther, que al parecer frotaba su mentón buscando procesar las últimas palabras del Rey Bartra hasta que lo comprendió.

— "Matrimonio" — confirmo golpeando su puño sobre la palma de su mano izquierda. Llamando la atención de todos los demás. — "Es de lo que estábamos hablando"

— "Bueno si, gracias Sir Gowther" —respondió. Consternado aun por la forma de hablar del joven, el Rey Bartra agradeció su intervención. — "Este era el tema que me deseaba tocar con ustedes" — se sinceró. — "La comitiva que viene del Imperio Osmaniyy no solo viene a una visita por cortesía, sino también para estrechar lazos y convertirnos en aliados contra los otros reinos"

Por unos momentos el salón quedo en silencio, los presentes empezaron a sopesar los diferentes escenarios. El pacto ya estaba hecho, matrimonio habría si o si, pero la pregunta es, quien o quienes asumirían la responsabilidad. Al inicio el colectivo a punto hacia las princesas de Liones, pero el problema aquí residía en que todas las princesas ya tenían compromisos o bueno ya estaban casadas y una de ellas estaba en espera de su primer hijo.

Por un segundo muchos pensaron entonces que el siguiente seria Ban, este al ser un Duque se convertía en el primer candidato, al ser el 5to en la línea, pero al ver la actitud del antiguo pecado desistieron de la loca idea.

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