Capítulo 16

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Shigyan

El gran baile en donde ricos y pobre, nobles y plebeyos, el chico y el grande; sin distinción alguna se juntaban, todo gracias a la "MASCARADA" que permitían la mezcolanza de todas las sangres

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El gran baile en donde ricos y pobre, nobles y plebeyos, el chico y el grande; sin distinción alguna se juntaban, todo gracias a la "MASCARADA" que permitían la mezcolanza de todas las sangres. Las comparsas iban y venían a lo largo de las calles bellamente decoradas con distintas telas de colores, cintas y globos; algunos tiraban papeles
multicolores al aire, así como pétalos de distintas variedades de flores.

Los "atuendos" – disfraces – de los ciudadanos de distintos diseños y colores, así como extravagantes, algunos haciendo alusión a los nobles del reino, otros en cambio vestían de bufones, así mismo los que vestían de danzantes, trovadores, músicos, y artistas sobresalían por su peculiar descaro y movimientos a la hora de presentarse, otros iban más allá emulando la vestimenta de los llamados "Shigyan", cuyas tradiciones eran en extremo demasiado diferentes con las de los demás pueblos, regiones o reinos aledaños, aunque estos siempre se reconocía por su caracterizarse por ser alegres, jubilosos y llenos de vida.

Sin embargo, la MASCARADA no solo consistía en calles adornadas, puestos llenos de comidas, músicos y trovadores en cada punta de la plaza alegrando con su arte, poseía una particularidad singular que iba más lejos del uso de vestimenta colorida y el intercambio de roles. Durante la preparación de los participantes al gran evento estaba de más decir que las hermosas y coloridas mascaras – muchas a mitad del rostro – servían para esconder la identidad del dueño de esta, pero no solo eso. Los cambios físicos – con ayuda de los aprendices de magos – eran la norma.

Entre los cambios más comunes se encontraban el color de los ojos, así como el del cabello y este también podía decidirse si se hacía largo, mediano o corto, si en ondas, ondulado o quizás unos hermosos rizos. En ocasiones algunos pedían cambiar de apariencia física para parecer más altos o más musculosos, otros – los más osados – pedían un cambio al sexo opuesto para generalmente jugar bromas a sus amigos y conocidos. Cada uno de los asistentes llenos de algarabía y excitación se habían encontrado expectantes por la inauguración del evento más esperado del año donde aparte de divertirse, podrían expresar su sentir sin que nadie lo critique, porque...

"Bajo la MASCARA uno puede ser un héroe o un bribón, pero nunca los dos"

"Bajo la MASCARA uno puede ser un héroe o un bribón, pero nunca los dos"

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