26

741 60 11
                                    

¿Eso era algo que quiso hacer durante la gira? ¿Besarme? ¿Eso era algo que quería hacer durante la próxima gira? Esas y millones de preguntas más giraban en mi cabeza. Procesar lo que había pasado ayer me costo toda la noche sin dormir, para mi suerte cuando llegue a la habitación Daniela estaba dormida y así no me podía preguntar nada, y no era que no quisiera contarle, porque al final sabía que le iba a terminar contando todo, pero primero tenía que volver a la realidad, porque si, aún no me la creía. En la mañana estuvimos tan apuradas que pude persuadir sus preguntas y desde que salimos del hotel ni Netza ni Alexis se nos despegaron, así que ya no pudo insistirme más con sus preguntas sobre Villamil ya que sabía que sería algo incomodo.

Por otro lado, no había podido ver a Juan desde ayer que me llevo a mi habitación, ni siquiera recordaba bien que había pasado después del beso, no sabia si estábamos bien o que éramos, solo sabía que por alguna extraña y tonta razón me sentía apenada y por un lado me alegraba de no tener que verlo para platicar de eso, aunque siendo sincera ya lo extrañaba. Aunque también sabía que el tiempo que no lo vería me daría más espacio para pensar y procesar todo lo que había pasado.

–¿Que tal te fue ayer?
–¿Ah?
–Si, ayer saliste con Villa ¿no?
–Si, si, salí con él
–¿en una cita? -parecía más afirmación que pregunta-
–Como crees Netza, somos amigos, me invito a conocer un poco Madrid
–Oh, ya veo
–Sip
–Y -alargó– ¿Que vas a hacer llegando a México?
–Definitivamente dormir mucho -ambos reímos- ¿y tú?
–Descansar los pocos días que tenemos y esperar a que si me contraten para la próxima gira
–Ya verás que nos renuevan el contrato a todos
–Espero ... oye y ¿podríamos salir allá en México?
–Ah... claro ¿por qué no?
–Bien, genial, entonces supongo que nos pondremos de acuerdo estando allá
–Si, si
–Netza ven -lo llamo Piña desde lejos–
–Voy -le gritó– ahora vuelvo ¿si?

Asentí con la cabeza y él me sonrió, lo seguí con la mirada hasta que llego con Piña quien le pasó un brazo por encima y lo acercó a él para platicar algo con Connie. Suspiré, ni siquiera sabía porque había dicho que si, Netza era un tipo dulce que me parecía guapo, pero mi corazón le pertenecía a solo uno, Juan. E incluso, debía admitir que me gustaba más a raíz de lo que había pasado ayer. Sacudí la cabeza.

–Nab

Alexis me hablo casi en un susurro mientras se puso a mi lado viendo en dirección a donde estaba Netza con los demás, ahí fue cuando me di cuenta que no lo había dejado de ver.

–¿Te puedo decir algo?
–Aunque dijera que no lo vas a decir
–Te lo digo en serio -lo miré extraña-
–¿Que sucede?
–No debería meterme porque no es algo de mi incumbencia, pero ese chico es mi amigo y tú también eres mi amiga -me miro– bueno dices serlo
–Que tonto Alexis, si somos amigos, llevaditos, pero amigos, creo
–Como sea, lo que quiero decir es que me preocupo por los dos y Nab, ese wey de verdad te quiere y si tú no lo vas a querer de la misma forma, no juegues con él, tampoco se lo merece
–Alexis yo... -me encogí de hombros– no quiero jugar con él, lo quiero
–Si, lo quieres pero como amigo ¿o me equivoco? -negué con la cabeza– seamos honestos Nab tus sentimientos son para otra persona, si no, hubieras salido ayer con Netza y no con Villa
–¿Como sabes que salí con Villa?

Alexis sacó su celular mostrándome una foto mía, de ayer con Villamil, para ser exactos del momento en el que ambos nos caímos en el Retiro, tomé su celular entre mis manos prácticamente arrebatándoselo para poder ver más de cerca la foto, no lo podía creer, seguramente esas niñas nos habían tomado esa foto y la habían filtrado.

–¿Que?

Dije en un susurro, sentí el pánico invadir mi cuerpo. Alexis me quito el celular y lo guardo.

¿A Dónde Vamos? (Juan Pablo Villamil) {Morat}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora