50

669 49 44
                                    

Después de la escena, Isaza y Blas se calmaron, creo que a estas alturas Koco había sembrado un poco de miedo en todos. Todos nos separamos, cada quien a hacer sus respectivas tareas, a Koco se le había ocurrido que para no descuidarnos y evitar peleas nos iba a juntar a los cuatro -a Isaza, Villa, Blas y a mi-, amarró nuestros nudos con una correa dejándonos completamente inútiles en hilera detrás de él, Isaza y yo de un lado -Isaza estaba atrás mío, lo suficientemente cerca para molestarme cada dos por tres– y Villa y Blas del otro lado, aún seguíamos amarrados de nuestras muñecas pero intentábamos mantener distancia entre nosotros, por su parte Georgina nos seguía también de cerca a todos lados.

–¿Tu sabias que iba a pasar todo esto? -le pregunte a Koco– ¿o por qué traes tantas correas y sogas?
–¿Nunca habías ido de campamento verdad?
–No y después de esto no creo que lo vuelva a hacer... -dije mientras movía mi brazo de arriba a bajo para molestar a todos– ¿de donde sacas tantas cosas?
–La bolsa de Georgina es como la de Mary Poppins -se burló Isaza, haciendo que yo me riera también-
–Seríamos más productivos si nos desamarraras -reclamó Blas-
–Ni lo intentes -le respondí– es lo que le he estado diciendo todo el día y no ha funcionado
–Prefiero tener cuatro inútiles tranquilos, que siendo productivos y peleando
–Nos dijo inútiles -Isaza continuaba con su tono burlón, yo solté una risa-
–Si somos
–No todos, eh -reclamo Villa-
–Uy disculpa, don perfecto
–Ya, ustedes -jalo de la correa fuertemente, todos nos quejamos-
–¡Oye! -reclame-
–Hey, yo ni dije nada ¿por qué eso? -al mismo tiempo se quejó Blas-
–Pagan todos por uno, así que ya saben, pórtense bien

Nos miró sobre su hombro, nadie dijo nada, yo mire hacia otro lado haciéndome la digna. La tarde de nosotros cuatro fue muy aburría viendo a los demás divertirse mientras nosotros seguíamos a Koco a todos lados, mi muñeca comenzaba a doler, pero parecía que Villa y yo no podíamos parar de pelear por cualquier pequeña cosita en la que no estuviéramos de acuerdo, no importaba cuanto nos regañara Koco. Isaza parecía estar disfrutando del espectáculo, Blas por su lado nos ignoraba, al igual que Georgina.

–Ambos son insoportables -se quejó Koco-
–¿Yo? -dijimos Juan y yo al mismo tiempo-
–Él
–Ella -volvimos a hablar al mismo tiempo mientras nos señalábamos-
–Los dos, ya dejen de hablarse por favor, hacen que me duela la cabeza -dijo mientras se tallaba los ojos– a la próxima que se peleen verán
–Llevas diciendo eso todo el día -me quejé-
–No empieces Nabyla -se giró para ignorarme-
–Además no solo somos Villa y yo, Blas e Isaza también son problemáticos -continúe con mi reclamo sin importarme nada-
–Si -me contestó Isaza, quien se había acercado para susúrrame– pero la diferencia es que Blas y yo ya no estamos peleando, ademas de que se siente la tensión sexual aquí

Soltó con tono burlón, a mi casi se me salen los ojos después de escuchar lo último que me había dicho el alto.

–¿Cuál tensión sexual? Estás loco -dije en voz baja-
–Usted y yo sabemos cuál, no me diga que no la está disfrutando tanto como yo

Soltó una risita. Me puse derecha, como un soldado, me dio vergüenza de solo pensarlo, Isaza tenía razón, pero yo estaba demasiado molesta para darme cuenta. No volví a abrir la boca después de eso, por alguna extraña razón yo estaba demasiado avergonzada por lo que Isaza me había dicho. Pasaron unos largos minutos en los que ya ninguno de los 4 dijo nada, hasta parecía que Koco se había olvidado de nosotros, tal vez si seguíamos así nos soltaría pronto.
A lo lejos vi a Netza parado viéndome con una sonrisa de lado, yo le sonreí desganada saludándolo con la mano, él hizo lo mismo. Sentí un jalón en mi muñeca, me quejé mientras volteaba a ver quien había sido, aunque no se necesitaba verlo para saber qué había sido Juan. Aún así lo mire, suspire pero no le dije nada, mire al frente para evitar contacto visual con Villa y con Netza, escuche a Isaza soltar una risita porque se había dado cuenta de lo que estaba pasando.

¿A Dónde Vamos? (Juan Pablo Villamil) {Morat}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora