¿A Dónde Vamos? (Juan Pablo Villamil) {Morat}

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Le di un sorbo a mi refresco, apoyé mi brazo sobre la mesa y recargue mi cara sobre mi mano. Estaba sentada esperando a Daniela y Eleand, íbamos a celebrar que teníamos el trabajo. La próxima semana teníamos que ir a firmar nuestro contrato por tiempo indefinido, nos dieron un mes en lo que empezaba la gira por México para poder poner nuestros papeles en regla, ya que íbamos a estar viajando a otros países con los chicos, yo ya tenía todo en orden, solo faltaba que a Dani le entregaran sus papeles. Tenía que renunciar a mi trabajo si o si la siguiente semana, mi más grande miedo, me había imaginado mil veces dejando el trabajo, ese trabajo que tanto odiaba, pero nunca pensé que se fuera hacer realidad, la verdad es que se ganaba muy bien, pero no lo suficiente como para aguantar un ambiente tan tóxico y destruir mi estabilidad emocional, suspire.

La verdad es que la ansiedad me estaba matando. No sabía que esperar de este nuevo trabajo, si nos acoplaríamos a los chicos, a los demás integrantes del crew, a estar de gira, no sabía tampoco que iba a suceder cuando renunciara... pero sobretodo no sabía si iba a poder con las miraditas intensas de Juan Pablo Villamil, quería estallar, pero también, estaba demasiado feliz, era un mar de emociones. Daniela llegó, la abrace, no pasaron ni dos segundos y entro Eleand.

–¿Díganme que se siente? -dijo Ele muy animada-
–Si, hola -bromeé-
–Me van a presentar a Isaza ¿verdad?
–¡No! -protestó Dani-
–¿Por qué no? A ti te gusta Simon

Replicó Eleand, ambas comenzaron una discusión tonta sobre Isaza, en la cual yo solo me limite a reír. A ambas les gustaba el alto, solo que antes a Dani solía gustarle Simon, pero después descubrió que su amor verdadero era Juan Pablo Isaza. Eleand me saco de mis pensamientos, con un comentario muy colorido.

–Lo bueno es que a nadie le gusta Villa mas que a Nab
–Ajá, a mi y a otras 800 mil niñas -me reí– pero en serio, ya no me gusta -mentí, ambas se miraron confundidas y luego se burlaron de mi-
–Claro, y yo haré como que te creo -dijo Dani-
–Es en serio
–Lo tienes de fondo de pantalla
–No-oh -dije mostrando mi celular– seria muy raro tener a mi compañero de trabajo de fondo de pantalla -reímos todas-
–Y por eso ahora tienes unas cascadas
–Fondo de señora -complementó Dani-
–Ja ja... en fin, ¿como te fue con tu papeleo?

Le pregunté a Daniela, ella se acomodó en su silla muy contenta, lo que ya sabía que significaban buenas noticias.

–Ya tengo pasaporte y la próxima semana tengo la visa ¿ya se podría decir que soy internacional? -Ele y yo asentimos– ¿y tú? ¿Ya renunciaste a tu trabajo? -negué con la cabeza-
–Nop, ¿Tu, Dani?
–Ya, renuncie la semana pasada
–Excelente
–¿Y tú Nab? ¿Que esperas para renunciar? -habló Ele-
–Nada, renunciaré la próxima semana ¿si? No me presionen estoy muy estresada
–¿Por qué?
–Por las miraditas que se hecha con Villamil
–¡¿Qué?! -Eleand me miró con los ojos abiertos como platos-
–Si, Nab no sabe si está frustrada por tener que dejar el trabajo o por tener que cortar a su novio

Estaba dándole un sorbo a mi refresco cuando Dani dijo esa última frase y casi muero ahogada. A Daniela nunca le había caído bien Alex, incluso creo que lo odiaba, pero jamás entrábamos en discusión por ese tema. Por otro lado, todo el mundo sabía que Villamil era mi platónico más grade entre todos mis ídolos, pero nuestras "miraditas" no eran de amor, pareciera que él me odiaba, no sabía cómo iba a manejar eso de trabajar con mi platónico que me odiaba. Una señorita se acercó a nuestra mesa para tomarnos nuestra orden, tan pronto se la dimos se fue.

–A ver... -retome el tema– nada de miraditas con nadie, ni voy a dejar a Alex -Dani puso los ojos en blanco– Dani está exagerando
–No, no estoy exagerando, si casi les teníamos que decir "¿no quieren que los dejemos solos?"
–¡Que intenso!
–Que no, Ele, no le hagas caso a esta señora