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Estaba acostada mirando al techo, pensando en todo lo que había pasado esa tarde. De solo acordarme que estuve con Juan Pablo se me revolvía el estomago, ya no solo estaba emocionada por lo de Samuel, si no por lo que había pasado junto a Juan. También pensé en Isaza, juro que vi como se rompió su corazón en ese momento que vio a Daniela con Blas, ya no tenía que negarlo, le gustaba ella y por eso actuaba diferente con Andrea. Tenía que hablar con él pronto.
Alexis no dejaba de moverse como tonto mientras estaba sentado en la esquina de mi cama, no me dejaba pensar con claridad.

–¿Me estas escuchando?
–Si

Mentí. Después sentí como una almohada impactaba sobre mi rostro, me quejé.

–Ya dije que si te estoy escuchando
–Pues no parece -se quejó Daniela-
–¿Que hace Alexis aquí?

Pregunté mientras me sentaba en la cama.

–Alexis ya es nuestra cuarta amiga

Contestó Eleand, quien estaba por videollamada en la laptop escuchando todo el drama a detalle.

–¿Gracias?
–Es un cumplido tonto -dijo Ele y yo negué con la cabeza-
–¿Podemos volver al tema? -habló Daniela desesperada-
–Si -dijimos los tres al mismo tiempo-
–¿Y si despiden a Blas? -hizo caras Dani-
–¿Nos importa si despiden a Blas?
–Nos importa, nos importa -le respondió Alexis a Ele-
–A ver, ya les dije que no van a despedir a nadie
–¿Nos dijo? -se burló Eleand-
–Si nos dijo -agregó Alexis, viendo a la nada-
–Además aunque Isaza quisiera, no tiene el poder de decir "quiero que Blas se vaya" y lo despidan así como así -hubo un gran silencio– no puede ¿verdad?
–¿Ustedes saben qué pasó con el fotógrafo que estuvo antes que ustedes? -Dani y yo miramos con los ojos súper abiertos a Alexis y negamos– No pues yo tampoco, no era mi amigo
–Ah, eres un idiota Alexis -lo empuje– voy a sacarnos de dudas de una vez
–¿Vas a ir con tu mejor amigo Isaza?
–Pues si

Me paré de la cama antes de que alguno pudiera decir algo, salí de la habitación, no sabía cual era la habitación de los Juan Pablos ya que Villa no me había dicho, se vería muy extraño preguntar por su habitación en la recepción y tampoco quería quedar como estupida volviendo al cuarto. Llegó el elevador.
Solo esperaba que Isaza estuviera a fuera fumando, la suerte me sonrió cuando lo vi de espaldas, me detuve en el lobby antes de salir a molestarlo, ahora me arrepentía de estar aquí, suspire y tomé el valor para salir.

–Hola

Supe que espante a Isaza porque dio un pequeño brinquito, me aguante las ganas de burlarme de él pues no era el momento indicado, pero no pude evitar sonreír, ahora sabía lo que él sentía cada que nos espantaba. Me sonrió de vuelta.

–Me asustó
–Ya se porque lo haces todo el tiempo con nosotras
–¿Es divertido?
–Si es un poco -ambos reímos-
–Tal vez no es algo de mi incumbencia ¿verdad? -me miro– ¿que iban a hacer usted y el papo en su habitación?

Ambos nos quedamos mirando, me sorprendió su pregunta, yo sabía que no íbamos a hacer nada pero decir que íbamos a comer golosinas tampoco era algo creíble.

–Isa... yo
–Está bien, no es de mi incumbencia
–No -moví las manos– no, Villa y yo... íbamos a comer

Mordí mi labio inferior y lo mire de reojo. Hubo un largo silencio, en serio que eso sonaba tonto. Isaza comenzó a reírse, claro que entendía el porque se reía, era estupido.

–¿Que iban a comer?
–Uhm... unos snacks
–¿Los que solo venden aquí? -asentí con la cabeza– ¡Lo sabía! Sabía que me estaba escondiendo algo -ambos nos reímos– y ¿Dani con Blas?
–No lo se... ¿pero te importa?
–Pues pensaba que no, hasta que los vi
–Isaza ¿te gusta Dani? -pregunté emocionada, el me miro, pero aparto rápidamente la mirada-
–No he tenido tiempo para pensar ciertas cosas

¿A Dónde Vamos? (Juan Pablo Villamil) {Morat}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora