LUCIEN ✓

⛓️CAPÍTULO 22⛓️

— Domingos libres. Domingos libres. Amo los domingos libres — Rachel viene alegre mientras el ensayo de danza se ha cancelado.

— No cantes victoria. Ha sido solo por hoy porque el profesor Augustus tiene algo importante qué hacer — le recuerda Sussie.

— Déjame ser feliz por dos segundos, Sussie. ¡Dos segundos! — se queja la pelirroja.

— Ok, ok. Te dejo ser feliz.

— Ah, miren. Lía está allí — señala Chloe.

Cerca de la entrada de la mansión se encuentra mi prima con un grupo de chicos y chicas.

Llegamos hacia donde están ellos.

— Hey — saluda Lía—. ¿Ustedes también se unirán a la excursión?

— ¿Excursión? — frunzo el ceño al preguntar —¿Cuál excursión?

— Verás, según lo que me han contado. Hay un lugar bastante alejado de la propiedad que queda cerca de una construcción abandonada. Todos dicen que el lugar es bastante interesante.

— ¿Y cómo pretenden llegar allí? Sé supone que no podemos salir de aquí— dice Sussie.

— No tenemos que salir como tal de la propiedad. Ambos terrenos se comunican. Lo único que los divide es una gran valla.

— ¿Ir a ese lugar está permitido? — pregunta Rachel con desconfianza.

— No lo sé. Yo solo he tenido curiosidad y vine a preguntar. Ya vários estudiantes han ido allí, y dicen que el lugar es extraño, pero resulta atrapante.

— Lía tiene razón — de pronto la Ashlan se une a la conversación, y me señala—. Él primer día que fuí allí pensé en ti, Jade. Seguramente tendrás buen material allí para inspirarte.

— ¿Cómo dices? — pregunto confundida.

— Lo que escuchas. El lugar llama la atención porque tiene vibras raras y los colores que lo rodean son muy similares a los que tú sueles usar en tus pinturas. Me recordó a tu arte, así que supuse que te interesaría echar un vistazo.

— Ah. Suena... Genial — digo no muy convencida—. Aunque creo que paso, por ahora.

— Ah. Vamos, Jade. No seas aguafiestas — dice Sussie—. Echemos un vistazo rapidito y si no te gusta nos regresamos de inmediato, ¿Vale?

No estoy muy segura, pero al final cedo.

— Bien, entonces vamos.

Emprendemos un largo y fastidioso camino. Creo que pasan alrededor de dos horas hasta que finalmente llegamos a la valla.

Echo un vistazo al otro lado y siento un extraño retorcijón en mi estómago.

«Esto no me da buena espina.»

El lugar tiene exactamente la misma energía que la horrorosa habitación en la que habita Castien.

«Castien...»

De hecho, ahora que lo pienso. Las cosas han estado tranquilas durante unos días, eso es extraño.

— Chicas, deberíamos regresar — digo en dirección a mis amigas solo para encontrarme con el hecho de que las únicas que se han quedado a mi lado son Rachel y Lía, ninguna luce convencida de haber venido — ¿Dónde están Chloe y Sussie?

— Se han ido tras el grupo. Sussie ha insistido.

Bien. Ya eso no me gusta.

No tengo un buen presentimiento.