Epílogo "Positivo"

288 26 19
                                    

Positivo


15 de febrero


Gregory


No logro entender como carajos termine aquí.

¡Dios! Estaba tan furioso y tan lleno de celos que decidí encerrarme en mi habitación y no salir por no sé... ¡hasta que lograra dejar de sentir esa molestia en el pecho!

Pero mis planes, como siempre, ella los altera.

Eso explicaría porque maneje un auto a las doce de la noche y conduje hacia una casa totalmente desconocida para ir a ver a una chica borracha que no dejaba de decir incoherencias que me preocupaban.

En ese estado, cualquiera podría haberse aprovechado de ella.

Yo...jodidamente no entiendo como de traerla, cuidarla y soportar todo este dolor abajo, ella sigue torturándome de esta manera. Arrinconándome contra la pared y con solo una maldita toalla cubriendo su cuerpo, que insinúa dejar caer en cualquier minuto.

-Deja la maldita toalla donde está-gruño.

-¿Por qué?-sonríe divertida y se acerca-¿Temes que lo de abajo te tiente?

Mierda, solo miro levemente y desvío de inmediato la mirada.

-Debes estar jugando.

-Voy muy enserio.

-¿Qué tan serio puede ir una borracha?

-Estoy muy sobria después de esa jodida ducha que me obligaste.

-Al contrario, creo que la ducha te hizo daño-suspiro-Bowen, dejaré la habitación y te vestirás y en la mañana te dejaré en tu casa ¿de acuerdo?

-No, lo que menos quiero ahora es vestirme.

-Pues lo que menos quiero ahora es oírte ¿y qué crees? lo estoy haciendo.

Me agacho para salir de sus brazos y camino hacia la puerta pero su risa me detiene.

-¿Estás celoso?

-¿Celoso?-río-¿Y de quién?

-De James.

-Por favor, no somos nada ¿cómo podría estar celoso de algo que no somos?

Sonríe y se encoge de hombros.

-Para celar no se necesita una etiqueta, Greg.

-Pero para celar se necesitan sentimientos, Cris.

Ríe divertida.

-Repito, estás celoso.

-No lo estoy, estoy cabreado que es diferente.

-¿Por qué?

-Porque tienes un jodido novio que te deja emborracharte en un grado dónde recurres a mí, a quién has gritado en más de una vez que se puede ir a la mismisima mierda.

-Pudiste no ir a verme.

-Claro que pude.

-Pero fuiste a verme-recalca.

-Llámalo obra de caridad-repito sus palabras.

Y como espero, le llega el golpe bajo que en este momento.

-Eres increíble...

-Lo sé, es lo único que he oído de ti estas semanas.

-Te estoy detestando-admite.

¿Apuestas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora